54. Peleas

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Niall se despierta esa mañana soltando un grave quejido y se pasa los dedos por los ojos los cuales abre lentamente. Ve a su lado y encuentra a Jessica boca abajo aun durmiendo. Termina por levantarse para ir al baño para tomar una píldora para el dolor de cabeza y baja a la cocina para comer algo ya que estaba hambriento.

Se lleva el plato de desayuno a la sala para ver la televisión y cuando termina se prepara un café. Cuando la taza queda vacía lo deja y sube las escaleras para darse cuenta que Jessica seguía acostada en la cama pero ahora de lado, dándole la espalda. Frunce el ceño, quizá ella tomó mucho y se acostó tarde y ahora solo recuperaba el sueño. Mira la hora y eran las doce del medio día.

Aprovecha a meterse a la ducha y se toma su tiempo. Cuando termina se seca el cuerpo con la toalla y se la enrolla en la cadera y sale para rodear la cama y meterse en el closet para vestirse. Ya vestido se detiene frente al espejo para verse y cuando corre la mirada, se encuentra con que Jessica yacía despierta, pero miraba hacia la nada, perdida en sus pensamientos, con la expresión caída.

En seguida Niall se preocupa. Conocía bien esa actitud y expresión suya, y no eran buenas noticias. Se preguntó qué fue lo que pasó ayer. Las últimas horas de la celebración eran meras imágenes borrosas.

- Buenos días, amor- saluda Niall saliendo del closet. Jessica alza la mirada y se obliga a sonreír.

- Buenos días- dice incorporándose en la cama y eleva los brazos estirando su cuerpo.

- ¿Te encuentras bien?- pregunta Niall, aunque intuía que no iba a obtener la verdad.

- Excelente- dice sonriendo y se levanta de la cama para bajar las escaleras para prepararse el desayuno. Tenía hambre.

Niall mirando la puerta que cruzó Jessica, frunce los labios y se pasa la mano por la corta barba pensando. ¿Cómo podía saber lo que pasó anoche? ¿Acaso había hecho algo malo y no se acordaba? Joder, solo rezaba de que no hubiera hecho algo que arruinara la noche de Jessica.

Baja las escaleras y le parece raro no encontrar a Jessica en el sofá viendo televisión, ya que era la única manera para ella para tomar desayuno. Entonces entra a la cocina y la encuentra sentada en la mesa con la cuchara en el aire mientras miraba fijamente hacia la ventana.

Okay, estaba claro que algo había ocurrido anoche, ¿pero qué?

Se sienta a su lado y le besa la mejilla con cariño. Jessica lo mira y sonríe levemente.

- ¿Lo pasaste bien anoche?

- Sí, estuvo bueno- dice simplemente y se lleva la cuchara a la boca.

Niall suelta un suspiro y se levanta para prepararle un té a Jessica como a ella le gustaba mientras ella terminaba su desayuno. Una vez listo se lo lleva y lo pone frente a Jessica, quien alza la cabeza y le tira un beso con una sonrisa.

- Jessica, algo me dice que algo anda mal. ¿Por qué no me dices qué es lo que te molesta?- insiste Niall mirándola atentamente. Jessica simplemente voltea la cabeza para mirarlo y sonríe.

- Todo está bien, en serio- insiste ella. Niall simplemente niega con la cabeza y sube a su cuarto en busca de su arma secreta: Deo.

- ¿Cómo va la resaca?- bromea su primo.

- Matándome...- responde- Pero hay algo que me está matando más.

- Déjame adivinar... Jessica- dice Deo adivinando que ella no le diría nada a Niall.

- ¿Cómo sabes? No me digas que...

- Sep. Yo estuve ahí con ella mientras tu estabas borracho cantando en irlandés.

Help Me - Niall Horan❄️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora