Help Me - Niall Horan❄️

74. Recuperandola

Cuando Jessica corta la llamada una parte de ella se siente aterrada, porque sus padres se estaban impacientando y tenía miedo de que se volviesen violentos con ella. Pero por otro lado le alegraba de que Niall estuviese haciendo tiempo, así tendría más tiempo para encontrarla y salvarla. Jessica no quería que Niall perdiera veinticinco mil libras por su culpa.

Joder, no podía creer que esto estaba realmente pasando, era una locura.

Se sentía engañada. Sus padres no solían ser así cuando todavía estaban juntos. Puede que no fueran los mejores padres del mundo, pero le proporcionaban un techo donde refugiarse, la alimentaban. Habían veces que los tres se acomodaban en la sala de estar para ver una película mientras comían helado.

Jessica no lo podía entender. ¿Qué pasó? ¿O es que ellos siempre fueron padres horribles y ella no tenía idea porque no tenía otros padres para comparar con los suyos? Nunca tuvo otros padres, claro está, así que siempre se dijo que sus padres estaban siendo padres normales, pero ahora que se detenía a pensar más sobre su vida con sus padres, podía ver los fallos, como si de repente se hubiera dado cuenta que estuvo viviendo en una especie de matrix.

Ahora Jessica no podía dejar de preguntarse si todo fue una mentira. ¿Por qué tuvieron que tardar dieciocho años para darse cuenta que ya no la amaban? Ahora tenía dieciocho años de recuerdos y 'amor' que olvidar, superar, que odiar. Se preguntaba si hubiera sido mucho más sencillo si la hubiesen abandonado a una edad más temprana, porque así no se hubiera adherido tanto a sus padres, no hubiera tenido tiempo de profundizar su amor por ellos, y olvidarlos hubiese resultado mucho más fácil.

Pero ahora ya era demasiado tarde para los "¿y si..?". Ahora tenía que concentrarse en salir de allí sin terminar herida.

- ¡Maldita sea!- brama su padre agarrando un vaso de vidrio y estrellándolo contra una pared. Jessica se sobresalta por su arrebato y baja la mirada en un intento de parecer indefensa. Odiaba cómo se estaba sintiendo. Inútil, sumisa, como si tuviera las manos amarradas tras su espalda, incapaz de pelear y protegerse a sí misma.

Sentía que volvía atrás en el tiempo y el pánico se apoderó de su ser. Le había tomado cinco años y un Niall para superar su depresión, y ahora ella no quería tener que esperar otros cinco años más y otro Niall para recuperarse de otro trauma. No podía recaer, no podía permitírselo. No sobreviviría.

- Tu novio es igual de inútil que tu- espeta su padre y la fulmina con la mirada. Jessica tiene que morderse la lengua para no saltar a defenderlo, no quería arriesgarse a que su padre descargase su ira con ella-. Me pregunto si será igual de cooperativo con un puñal en el estómago- se burla y Jessica no se pudo contener.

- ¡No le tocarás ni un pelo!- chilla ella saltando de su asiento. Su padre camina hacia ella y le da una dura bofetada.

El rostro de Jessica gira ante el impacto y lagrimas asaltan sus ojos. Una mano instintivamente se va hacia su mejilla, la cual ardía. Nadie nunca la había golpeado y se sentía impotente. Un fuego se enciende en su interior prendiendo cada miembro, cada vena.

- Haré lo que se me de la puta gana- gruñe su padre, furioso de que su hija replicara.

- Entonces me aseguraré de que no recibas ni un centavo- replica Jessica sin pensar. En un segundo, Jessica se encontraba contra la pared, su cuello siendo rodeado por la mano de su padre, quien aprieta su agarre.

- ¿Qué dijiste?- sisea. Jessica abre la boca en un intento de conseguir aire pero le resulta imposible. Con sus pies intenta patearlo pero falla. Puso sus manos sobre la mano de su padre en una silenciosa suplica- Por tu bien, será mejor que tu novio se apresure con el dinero- amenaza su padre y la suelta para darse la vuelta, pero a medio camino, se vuelve hacia Jessica y planta su puñetazo en su rostro haciendo que ella soltara un quejido y callera al suelo sobre los vidrios rotos.