¡ya basta lee minho!

029;♡

"¡Psss...!"

"¿Me pasas la respuesta de la 11?"

"Esto no está funcionando... Esto no está funcionando"

"¡Uy! Casi nos agarra Hongjoong."

"Mmm... esa mirada no me gusta."

"Era de esperarse de este profesor, siempre con sus trucos y jugarretas"

"Lo siento amiga, me atraparon y me quitaron la prueba"

- Entrega tu hoja, Song.- recitó paulatinamente el mayor, ajustados altaneramente su corbata negra, extendiendo su brazo seguidamente.- Ahora.

El susodicho con rostro afligido y con pesar se levantó con desgana de su asiento, bajo la atenta mirada de todos sus compañeros, sintiendo la vergüenza recorrer cada célula de su cuerpo, animándolo a soltar nada más que un suspiro de resignación, entregando la hoja.

Unos dudaban de sus acciones, otros miraban la marcación del reloj instalado en la pared, atentos a cada minuto que pasaba, sudando la gota gorda de temor, planteándose en sus pensamientos su posible destino para cuando su tiempo se acabase. Otros maniobrando estratégicamente y limpiamente sus respuestas, ingeniándoselas para dejar algo decente y eficiente en sus hojas, dejando a su suerte el posible resultado final, sin saber si sería positivo o negativo.

En el caso de cierto alfa un tanto peculiar estaba de traficante, usando como bases receptoras a Jisung, Seungmin, Jeongin, Hyunjin y un omega de labios carnosos y piel cremosa llamado Lee Felix. ¿Cómo quedó incluído? Nadie lo sabe... pero dejemos que las cosas lleven su curso, así como Chan se hace de oídos sordos a las acusaciones de Minho, en fin. Quedando como fuentes de información un alfa de tez morena, baja estatura, hoyuelos y cabello oscuro llamado Seo Changbin y el propio Lee problemático Minho.

- ¿Ya acabaron?- murmuró recostándose en el espaldar de la mesilla sintiendo una oleada de adrenalina pura recorrer y serpentear por su dermis. Minho Nunca fue el favorito de esa clase, aunque ahora que se ponía a rebobinar...

Él nunca fue el favorito de ninguna clase.

- Espera un momento Lee, aún me falta la 15...

- Joder Felix.- frunció el ceño.- escribes como abuela, muévete.- susurró con disgusto.

- Eh, eh, eh.- susurró del mismo modo.- A mí me tratas con respeto, soy tu mayor.- le lanzó una mirada fulminante con su entrecejo fruncido.- Y ahora te esperas por idiota insensible.

- Pero...

- Minho, ojos de búho a las nueve...- escuchó decir a Changbin, pero su voz se escuchaba misteriosamente lejana, como si no se encontrara cerca de su campo ambiental.

- ¿Algún problema señor Lee?- maldijo su suerte al escuchar la voz cantarina del viejo.

- No, señor.

Escuchó el suave respirar del profesor al lado suyo. Casi quería llorar y reír a la vez por lo jodida que era su existencia, maldecir al mundo y mandar todo a la mierda h salir de allí... lejos de problemas, presiones y muertes seguras.

Pero no podía, porque tanto su parte animal como racional estaba ahí todavía luchando contra la marea por una sola persona.

«Han Jisung»

Y no le fallaría, no a a él. Un día caería, pero no sería precisamente hoy.

Hoy no.