Kian
Los días pasaron y un año nuevo empezó. Los últimos meses si que han sabido ser una locura. El problema con los italianos, la chica, Jude, ahora con los rusos.
Mi resolución de año nuevo es volver a tomar el control de todo. Aunque para ser honesto no puedo sacarme de la cabeza lo que me contó ella. Sigo pensando en su historia y en lo que dijo.
"Tú y yo estamos unidos por el fuego"
Sigue dando vueltas en mi cabeza. Su mirada cuando lo dijo, el tono...
En parte lleva la razón, es decir, ¿Qué tan común es que tú casa de infancia se incendie con uno de tus padres dentro? Bueno, en su caso con ambos, pero aún así. Ambos cargamos con nuestras culpas. Que va... si resulta que tengo más en común con esa chica de lo que creí.
Estamos en el asilo Hayes, Marlon, Alessio, Eric y Hardy luego de terminar la reunión de como empezaremos en año con nuestros negocios en marcha y los que tenemos pendientes.
- Ya acordamos la fecha con Roman Kozlov. - dice Hardy.
- ¿Con quién carajos? - pregunto confundido.
- Ay dios, con la mano derecha del jefe del clan Vólkkov. - me responde Hardy.
- ¿Por qué diablos nos relacionamos con gente que apenas puedo pronunciar su apellido? - digo.
- Sabes lo que dicen, siempre es bueno tener a un ruso de tú lado. - dice Hayes.
- Buenos días. - dice una voz femenina, que me hace en un segundo levantar la cabeza por mero instinto. La veo entrar en la sala, nuestras miradas se cruzan por unos segundos, pero la vuelve a los demás.
- ¡Liv! - dice Hayes.
- ¿Qué haces por aquí? - pregunta Hardy.
- Vine a entregarles personalmente las invitaciones, pero caso esté fin de semana. - dice ella, sin mirarme.
Suspiro con pesar para mis adentros.
- Que va... - dice Hayes con sorpresa. - Eso si que fue rápido.
- Saben como soy... - dice ella con una sonrisa un tanto forzada.
Va a sonar de un loco celoso, pero no parece ella. No tiene su sonrisa espontanea. Le entrega a cada uno un sobre blanco, me extiende uno a mi. Nos miramos por unos segundos. Pareciera con los la mirada me suplica que lo agarre, así que lo hago.
- Y lo harás en el Plaza. - dice Hardy leyendo la invitación.
- Pues claro, todo chica Neoyorquina sueña con casarse en el Plaza. - dice ella. - Será el evento del año.
- Liv, te adoro, pero no iré. - dice Marlon. - No me pondré un vestido.
- Puedes ir con lo que quieras. - dice ella.
- Aún así, todos me miraran raro. - dice Marlon.
- ¿Te intimidan unos viejos adinerados? - dice Hayes burlón.
- Prefiero ahorrarme lugares donde no me siento cómoda. - dice Marlon.
- No están obligados a ir, no me ofenderé. - dice Olivia.
- Genial entonces. - digo. Ella me mira rápidamente, con algo de dolor en su mirada.
- Por favor, dime que no has invitado a mis padres. - dice Hardy, queriendo cambiar de tema.
- Yo no, mis padres. - responde ella.
- ¡Olivia!
- Me vieron nacer Christian. - dice. - Tengo que irme, aún tengo mucho por hacer. Confirmen. - agarra su bolso y sale de la sala.
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No Puedes Comprar Mi Amor (Mafia Marshall I)
RomanceÉl. Peligroso. Despiadado. Frío. Cruel. Criminal. Poderoso. Rico. El mejor en sus negocios clandestinos. Ella. Solitaria. Abandonada. Compasiva. Sumisa. Pobre. Pérdida. ¿Qué pasará cuando estas dos almas heridas se crucen? ¿Cuál de los dos se perd...