57.

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- ¿Cuando vuelve?
- En una semana o así.- afirmé sin dejar de mirar el televisor al estar jugando con él.
- Entonces no es mucho.
- Podría haberse ido más.
- Que bien consuelan eh.
Sonreí y oí a Sofía reírse sentada en el sillón. De reojo pude ver cómo aún así, seguía teniendo su mirada en su celular, ignorando como Thiago y yo jugábamos hoy que no tenía turno de tarde ni de noche y podía estar más tiempo con mis amigos y familia, ya que luego tendría una cena con mis padres.
- ¿Y qué tal con él?
- ¿Con Mauro?
- ¿Con quién sino?
- Ya, bueno, bien.
- ¿Sólo bien?
- Es...raro.
- Raro.
- Y no sé, con Bruno era distinto.
- ¿Para mal o para bien?
- Para...distinto. Con Bruno todo era más...normal, rutina.
- Bueno, es que estuvisteis juntos dos años.
- Ya, pero tampoco había algo especial en nuestras vidas aparte de los autos.
- Y para él era su laburo.- añadió Sofía a la conversación de Thiago y mía.
- Exacto, así que, no había mucho que contar.
- Pero se querían.
- No puedo decir que no. Quizás era por comodidad o por conformarme con lo que ya conocía, pero sí, le quería.
- ¿Y cómo es con Mauro?
- Distinto, ya te lo he dicho.
- ¿Pero en qué sentido?
- Pues...es algo nuevo, ya que bueno, es famoso y todo eso. Pero aparte, con Bruno éramos ya como amigos, pero con Mauro no sólo es eso.
- Es tu amigo y tu pareja.
- Claro, ahora miro hacia atrás y me doy cuenta como mi relación con Bruno se fue desgastando hasta que parecíamos más amigos que pareja. Pero, con Mauro no siento eso.
- ¿Y qué sientes?- preguntó Thiago sin dejar de jugar.
- Pues...cuando estoy con él es como si nada existiese, quiero decir, no me acuerdo de lo exterior, de su vida famosa ni nada de eso. Realmente, me siento como si estuviese con un chico normal que vive la vida como puede e intenta siempre hacerme feliz, hacerme sentir segura después de todo.
- Después de todo.
- Bueno, él pasó conmigo como rompía con Bruno y como yo misma me molesté con él pensando cosas que no eran, así que...estuvo ahí entonces y ahora parece que intenta que nada de eso pase.
- ¿No hay ninguna discusión todavía?
- No, la verdad es que no. Y además de todo eso, todo es nuevo.
- Ya, la música y todo lo demás, ¿No?
- Claro, cuando yo iba a ver a Bruno veía también a mi hermano, por lo que siempre era igual para mí todo. Pero, con Mauro conozco a más gente, me hace sentir cómoda haciéndolo y además siempre intenta que esté cerca de él en su música.
- Ya...
- Me lleva con él a las grabaciones, me había de sus proyectos, me enseña algunas canciones...no sé, es distinto todo, ya te lo he dicho.
- En definitiva, te estás enamorando.
- ¿Eh?- paré el juego para ver a Sofía, que no había vuelto a decir nada hasta ahora.
- Estás enamorándote, por eso está así de confusa.
- No estoy confusa.
- No sabés decir clara lo que sentís por él.
- Bueno, porque soy mala con las
palabras.
- No pasa nada por enamorarse eh.- añadió Thiago mirándome, ya que no estábamos jugando ahora.
- No es eso, es que no entiendo por qué debería estarlo.
- Porque estás comenzando a sentirte demasiado bien a su lado, siendo todo bueno. Y es normal, son los primeros momentos de una relación que tiene todo nuevo para vos, porque quizá con otro chico...pero, además, no sabés decir que sentís y tenés miedo de que todo de a entender que te estás enamorando.
- No entiendo.
- Ni yo.- me apoyó Thiago. Sofía chasqueó su lengua y dejó el celular para acomodarse en el sillón y mirarnos.
- A ver,no sos capaz de decir bien que sentís y cuando hablas de lo que te pasa, siempre parece que buscás las palabras correctas para que no parezca que es alguien más y que tampoco parezca que es muy importante para vos, que ya no sólo te gusta.
- Uh, ahora sí entiendo.- Thiago sonrió para dejar de mirar a Sofía y después mirarme a mí.- Estás re enamorada, wacha.
- Dale, dejen de decir boludeces, no estoy enamorada ni nada.
- Aún no, date tiempo, ahora vas a pasar de la confusión a la negación para finalmente aceptarlo.
- ¿Qué sos? ¿Psicóloga? Me estás re analizando.
- Soy buena en esto.
Sofía asintió y yo puse los ojos en blanco, volviendo rápido al juego para pillar a Thiago desprevenido.
Estuve con ellos un tiempo más hasta que finalmente, tenía que ir a por mí hermano al taller e ir juntos a la casa de mis padres.
Me despedí de mis dos mejores amigos y salí de la casa de Thiago para subirme a mí auto y manejar hacia el taller, pensando en todo lo que me habían dicho.
No me sentía enamorada, pero me sentía diferente. No sabía explicar cómo era estar enamorada, pero lo había estado.
Aún así, aunque no supiese explicarlo, no me sentía realmente así, aunque no podía evitar que desde que se fue no parábamos de hablar y yo de pensar en él. Que cuando hacemos videollamadas el peor momento es cuando terminan y que al final, lo extrañaba como si no volviese por meses.
No sabía que era lo que hacía donde se aque estuviese y eso tampoco era lo mejor para esto. Pero, cuando no hablábamos y tenía que hacer algo que no era laburar o mi vida social, solía estar distraída y poco eficaz. Cómo en la carrera.
Suspiré y frené delante de la puerta del taller, olvidándome de todo lo que había pensando al subir el volumen de la música y esperar así a mí hermano, que salió segundos después con Bruno detrás.
Nos saludamos con la mano como solíamos hacer, como mucho también con una leve sonrisa. Pero, finalmente Lautaro se subió y podemos manejar hasta la casa de mis padres casi en silencio.
Al llegar, aparqué y salimos a la vez, yendo a la puerta para esperar que alguno de nuestros padres o nuestra hermana nos abriese la puerta, ya que a Lautaro se le olvidaron las llaves.
- Lautaro.
- ¿Qué?- me miró y yo sonreí nerviosa
- ¿Crees que me estoy enamorando?
- ¿De Mauro?- asentí y sonrió levemente.- Pues...la que debería saberlo sos vos.
- Ya...pero, ¿Vos qué pensás?
- Que nunca te he visto también como con él.
Sonríe de nuevo y él también, pasando su brazo alrededor de mis hombros segundos antes de que la puerta se abriese, dejándonos ver a nuestra pequeña hermana a la que no tardamos en subir en brazos y entrar riéndonos los tres.

One Million Dollar Baby (Duki)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora