58

1.7K 178 36
                                    

Camino al estacionamiento y me subo de copiloto en el jeep de Dylan

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Camino al estacionamiento y me subo de copiloto en el jeep de Dylan. Dooley dijo que él llegaría más tarde a casa porque iba a ir a casa de Miley, por lo cual lo molesté un poco. Primero pasaremos a mi casa para cambiarme ropa y luego iremos a la de Dylan para cocinar, ya que quiere que le haga espaguetis con salsa de champiñones.

—¿Algún día me enseñarás a conducir? —le pregunto cuando hemos salido del estacionamiento.

—Que miedo —se ríe —moriré joven si te enseño.

—Idiota.

—No seas enojona, enana —me toma la mano y deja un beso para luego soltarme y pasar un cambio —si te enseñaré, pero esperemos a las vacaciones de verano ¿Vale? Así ya tendré la licencia.

—Vale —sonrío.

—Si quieres te puedo enseñar a conducir la moto —pongo cara de pánico.

—Yo tampoco quiero morir.

—No es tan difícil —me da una rápida mirada —es como andar en bicicle... —deja la frase sin terminar —había olvidado que no sabías eso —se ríe —¿Cómo es posible que no sepas?

—Nunca me compraron una bicicleta, por lo que nunca aprendí —me quejo.

—¿Quieres aprender?

—¿Te estás burlando? —niega con la cabeza —¿Tienes bicicleta? —vuelve a negar con la cabeza —¿Entonces?

—En el garaje está la de Dooley y la de mi tío.

Me dice que ponga música mientras vamos camino a mi casa, aunque dejo una lista aleatoria.

—Te espero aquí.

—¿No quieres acompañarme? —le pregunto.

—¿Y tú mamá?

—Se tendrá que acostumbrar a verte —le sonrío —¿O ya no quieres un poco de atención?

Se baja junto a mí y en cuanto abro la puerta de la casa, mi mamá pasa por enfrente de nosotros.

—Hola, Dylan —lo saluda un poco confundida.

—Hola, Andrea —responde con una sonrisa.

—¿Se quedarán al almuerzo? —niego.

—Comeremos en casa de Dylan —respondo —Me iré a cambiar ropa —informo —No lo aburras, por favor —le ruego a mi mamá.

Corro a mi habitación para vestirme lo más rápido posible, ya que no quiero dejar mucho tiempo a Dylan abajo. Tomo mi habitual mochila pequeña y meto mi celular, mis llaves y mi billetera repleta de dinero, porque hoy es viernes y de seguro el italiano hará su aparición.

—Estoy lista —le digo a Dylan, quien está sentado en el sofá mostrándole algo a Tommy.

Dylan se despide de mis hermanos y luego va a la cocina para despedirse de mi mamá, quien le da un enorme abrazo y le dice que se cuide. Mi mamá intentando avergonzarme con sus actitudes maternales.

Nuestro Eclipse #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora