¿Una niña en la Iniciativa Vengadores?
La Iniciativa Vengadores, un equipo conformado por individuos poderosos y con habilidades excepcionales que responderían a las amenazas globales.
¿En serio querían que la raza humana dependiera de un grupo de f...
————————————— CAPÍTULO TREINTA Y TRES DIFÍCILES DECISIONES. —————————————
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
GRACE VIAJÓ DE INMEDIATO A LONDRES sin importar que el funeral de Margaret Carter fuera en un par de días, pues Logan era su amigo y en ese momento quería acompañarlo. En cambió, Steve decidió quedarse esa noche a dormir en su cama y viajar al día siguiente. Grace creía que el hombre aún quería tiempo a solas para procesarlo. Lo comprendía completamente; el pasar por la perdida de la persona con la qué hubieras dado todo para que su tiempo juntos fuera más amplío. Grace sabía que Steve necesitaba espacio y tiempo para ordenar todos los fuertes sentimientos encontrados que le había provocado la noticia.
Steve no había preguntado el cómo Grace se había enterado rápidamente de la muerte de Peggy, ni porqué su viaje tan precipitado aunque las preguntas rondaron por su cabeza cuando la chica lo reconforto. Y es que Steve ignoraba del parentesco de Logan Carter con Peggy. Pocas personas lo sabían.
El recorrido a Londres duró menos tiempo que el prolongado con el jet a su máxima velocidad. Llegó a Inglaterra a primera hora y estuvo en el umbral de la casa de Logan cuando el amanecer bendecía el cielo con los hermoso colores naranjas y rosas.
La puerta se abrió unos segundos después que Grace tocara con insistencia, mostrando el abatido rostro de Logan Carter.
—Oh, Eddie.—balbuceo con tristeza antes de atraerlo a sus brazos. Él se aferró tanto a ella que temió hacerle daño, pero se permitió ser egoísta.—Lo siento tanto. Se lo mucho que significaba ella para tí.
—Gracias por venir tan pronto.—murmuró una vez que se obligó a soltarla. Logan tomo la pequeña maleta de la chica y la invitó a pasar.
La casa de Logan era pequeña, en la planta superior solo habían dos habitaciones; el salón de la casa y la cocina justo a lado de las escaleras de caracol que daba a las otras dos plantas. Pero, sin importar que no fuera demasiado espaciosa, tenía un ambiente y estilo hogareño y cálido a pesar del frío que hacía afuera, talvez la enorme chimenea frente a los sillones tenía que ver con la calidez.
Ambos se sentaron frente al otro en el salón y se miraron buscando en el otro el inició de una conversación complicada.
—Podemos hablar de ella si así lo quieres—comenzó Grace después de una bocanada de aire.—o podemos hablar de otra cosa. Incluso podemos no emitir sonido o podría irme para dejarte tranquilo, esa es la opción a la que yo recurro en estos casos.
—Yo prefiero tener compañía, si no te molesta quedarte.—murmuró, bajando la cabeza.
—Por supuesto que no.—se inclinó y puso una mano sobre la rodilla del chico.—Vine para apoyarte y estar a tu lado. Solo quería asegurarme que tú quisieras mi compañía.
