¿Una niña en la Iniciativa Vengadores?
La Iniciativa Vengadores, un equipo conformado por individuos poderosos y con habilidades excepcionales que responderían a las amenazas globales.
¿En serio querían que la raza humana dependiera de un grupo de f...
—————————————— CAPÍTULO CINCUENTA Y TRES NADA ES PERMANENTE. ——————————————
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NO PODÍA CREER EL DESCARO DE Logan, tuvo que contenerse para no arrojarle el capuchino directamente en la cara. Lo que la hizo querer enterrar al chico bajo tierra no fue el como le dio dos besos a cada mejilla de las hermosas chicas, ni el como movía las sillas de cada una para que tomarán asiento. No, su furia era por la sonrisita burlona que él mantuvo y como se desviaban sus ojos a su dirección, como si estuviera asesorándose que ella no se perdiera de un solo movimiento.
—Oh, ¿no eres la chica que fue a casa de Eddie como hace tres meses?—le dijo la rubia cuando la miro.
—Sí, creo que también te ví.—agregó la morena. Grace sonrió obligada, sentía la mirada de su jefe en ella.
—¡Hola! Sí, también las recuerdo. No podría olvidar a chicas tan hermosas.—ella se mostraron halagadas y le devolvieron un genuino cumplido. El problema no eran ellas.—Bienvenidas a la "Choza del café", creó que les daré tiempo para que puedan ver el menú y ordenar.—habló con gran rapidez y con la misma se alejó, casi chocando con una de sus compañeras.
Odiaba a Logan Cárter. Lo odiaba tanto. Él sabía que la encontraría allí. Parecía que había dado con ella y por alguna razón decidió acercarse de esa forma. No sabía con qué fin había reunido a las dos mujeres allí, en su espacio de trabajo. Pero le pareció un gesto muy sucio.
—Disculpe, Señor.—se acercó a su jefe, hablando con un tono bajo. Le asustaba ese hombre.—¿Puede alguien más atender la mesa doce?
—¿Qué? Ya le llevaste el café al joven, si no vas tú se verá descortés. No seas ridícula Hargrove y haz tu trajo que para eso te pago.—le gruñó y se metió a su oficina. Grace suspiro cuando las chicas le hicieron señales para que se acercara a tomar su pedido.
—¿Ya saben que ordenar?—preguntó, con la sonrisa más enorme y falsa que pudo trazar en sus labios. Trató de ignorar la intensa mirada de Logan que hacía decaer su gesto fingido.
—Yo quiero un Moca con solo un poco de jarabe de chocolate y un muffin de ciruela.—Grace apuntaba el pedido de la morena en una pequeña libretita.—¿Tú que quieres, amor?
Grace sintió un apretón en su pecho, pero solo presionó los dientes y giro a ver a Logan con una ceja alzada. Él también la miró, y una sonrisa se formó en su rostro cuando la rubia habló.
—Creó que me iré solo por el expresso doble, por favor.—contesto ella, soltando el menú para comenzar a trazar un camino para encontrar la mano de la morena por encima de la mesa.
Grace miró sus manos entrelazarse, y como una le daba un rápido beso en la mejilla a la otra. Los ojos de Grace se encontraron rápidamente con los de Logan y su estúpida sonrisa de suficiencia.
