𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 𝐇𝐚𝐫𝐫𝐲 𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫 [+18]

48. Dean Thomas.

Pedido +18

Iba caminando tranquila por el callejón Diagon. Hace un tiempo se había comprado un departamento y estaba comprando unas cuantas cosas para hacer de cenar.

Llevaba las bolsas cuando algo la choco e hizo caer.

—¡Hey! Deberías mirar por donde caminas.— bufo la chica devolviendo las cosas que se cayeron a la bolsa.

—lo siento, aunque si no me equivoco ibas igual de distraída que yo.— contraatacó ofreciéndole su mano para ayudarla, ella la acepto y fue levantada del piso. Sacudió su vestido y se digno a mirarlo.— ¿Estas bien?— el chico era demasiado alto, era alto, con facciones marcadas y atractivas a la vez que era moreno y de buen físico. Le recordó mucho a su amor de niña.

Se parecía mucho, ¿O era él?

—¿Dean? ¿Dean Thomas?— cuestionó dudosa. Él levantó la mirada al oír su nombre mientras aún secaba su traje manchado de café para ver a su mejor amiga. De inmediato recordó lo mucho que la amo, y como ella era su amor platónico... E imposible.

Ella estaba mucho más guapa, y su cabello estaba más largo. Se podían notar cambios en ella que la hacían mujer, como sus caderas más anchas, o sus senos más grandes y claramente el como se había puesto más sexy... ¡Dean, concéntrate!

—¿Potter?— la reconoció con una gran sonrisa mientras ella asentía.— wow, realmente yo... Me quedé sin palabras.— TN dio una leve risa que se le hizo demasiado atractiva. Él creía que había pasado su etapa de ponerse nervioso con las chicas, sin embargo ahora lo estaba.

—wow Dean, estás enorme.— lo vio hacia arriba impresionada y él rascó su nuca nervioso.— no te he visto desde... Bueno, tú sabes.

—claro, jamás nos encontramos después de eso... Yo te espere, te espere donde habíamos acordado y tú me plantaste.

—¡Tú me planteaste a mi!— acuso de vuelta con una risa.— te espere en la torre de astronomía oeste por más de una hora, mis huesos estaban congelados.

—¿Oeste? Pero su te había dicho en la este.— tocó su frente con leve frustración.— ahora todo tiene sentido.— murmuró entregándole una última bolsa que se le había caído.— ¿Estas complicada? Te puedo acompañar.

—no, tranquilo.— se notó tímida, y es que Dean lucía como alguien muy importante. Él llevaba un traje elegante al igual que ella, pero mientras el de ella era de oficina el de Dean parecía de jefe.

—vamos, hace frío y ando en auto.

—en realidad no hace tanto frí-

No pudo ni terminar cuando un trueno sonó y pronto la lluviaos cubrió por completo, y se sentía demasiado fuerte.

—¡¿Ya cambiaste de opinión?!— bromeó siendo rápido. En este tiempo de lluvias era muy peligroso el estar afuera, ya que había pasado anteriormente que habían inundaciones por causa de las lluvias.

TN lo seguía casi corriendo y pronto llegaron y subieron a un carro deportivo negro, muy lujoso.

—mi apartamento está a cinco cuadras, solo dobla a la izquierda.— Dean solo pudo asentir agitado mientras sentía su traje mojado. Comenzó a conducir escuchándola reír.— ¡Eso fue horrible! Siento hasta mis huesos congelados por la lluvia.

—igual yo. Me tendré que devolver a mi casa, está al otro lado.

—¡¿Estas loco?! Ir hacia donde comenzó la lluvia hace rato sería como meterte a la boca del lobo.— lo miró como si lo estuviera regañando, tal y como cuando hacía broma con los gemelos y ella se enojaba. Sentía sus mejillas calientes.