𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 𝐇𝐚𝐫𝐫𝐲 𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫 [+18]

88. Draco Malfoy & Cedric Diggory.

Pedido +18.

Ya había tiempo desde que Draco Malfoy era mejor amigo de TN Scamander, una Slytherin con un humor natural que lograba cautivar a cualquiera de las casas. Era jodidamente lista, lo cual le causaba la constante duda del por qué no quedo en Ravenclaw, pero cuando su actitud de buena líder resaltó siendo una buena guía queriendo ser elegida siempre para trabajos de grupo, lo entendió. Eso fue lo primero que lo cautivo, el que fuera la primera que lo lideraba de la forma que le encantaba, aunque no fue al único.

Cedric Diggory, la joya de Hufflepuff. Combinaban a la perfección. Era un chico derecho, que destacaba por su amabilidad y una sonrisa reconfortante que lograba dar esperanzas hasta al ser más frío, Draco. Al principio cuando lo conoció creyó que eran celos y envidia al ser lo que él jamás podría, sin embargo con el tiempo se volvió admiración... Atracción, en cierto modo.

Cuando comenzaron a salir Draco únicamente observaba intentando aclarar que sentía realmente, cuando lo descubrió rápidamente lo contó a sus amigos, con quién idearon el mejor plan que se les ocurrió. Decidieron que lo mejor era declararse a la pareja durante o al final del baile, si, a los dos. El plan se llevaría a cabo después de que Zabini hiciera saber a la pareja que supuestamente Draco había bebido en grandes cantidades a modo de broma, conociendo el como eran de atentos, lo llevarían a una habitación y en el camino Draco se iría confesando, y si todo acababa bien, TN no le quitaría su amistad.

Cuando los participantes del torneo comenzaron a ingresar Draco fijo la vista en ellos. Aquel vestido amarillo palido le quedaba perfecto, sobre todo con la piel bronceada de la chica. Joder, juraba babear cuando vio que la espalda era totalmente descubierta hasta su cintura baja. Llevaba un peinado recogido y una grande mano decoraba su cintura. Cedric Diggory la acercaba a él con una sonrisa deslumbrante, orgulloso de llevar a la chica más lista que podría conocer según sus palabras.

—mierda, que elegancia la de TN. Daría una fortuna por cogermela.— murmuró un chico de Gryffindor, ganándose un empujón de Draco.

—puto cerdo.— gruñó haciendo que se escabulleran de ahí. Draco volvió la vista a la pareja, y aunque odio el comentario, entendía a la vez este. Sus fantasias se hacían más fuertes y no dejaba de fantasear con que Cedric quitará el vestido amarillo frente a él al final de la noche en un cuarto para los tres.

Durante el resto se dedicaba a disfrutar la fiesta, Draco comenzó a pasearse con distintos tragos enfrente de la pareja. Theodore Nott era quien se encargaba que está indirectamente se diera cuenta de esto. Luego de también darles su tiempo y que Draco bailará con amigos y dos chicas supo que había llegado el momento. Y es que ya varios se estaban marchando y cuando miro a Blaise le guiño el ojo.

El plan comenzaba.

—ya me quiero ir. Necesito hacerlo.— Cedric la apretó contra su cuerpo sintiendo la reacción de todo su cuerpo cuando se erizo por esto.

—¿Por qué, cielo?— jugó con una sonrisa atrevida mientras sus dos manos acariciaban su cuello y paseaba las uñas con cuidado por este mismo. Bien sabía que Cedric se volvía loco cuando lo arañaba, y cuando lo hacía muy poco en público era suficiente para que se la llevará a un lugar donde estuvieran los dos.

El sexo era candente, siempre tenían sus temporadas de lo cotidiano y experimental. Cuando era temporada de lo cotidiano jugaban dentro de la habitación y hacían el amor en las mismas dos posiciones, en cambio, cuando estaban en lo experimental, nada podía saciar por completo su apetito sexual si no era fuerte. Está vez buscaban un trío, y aunque buscaron y buscaron, tenían en la mira al mejor amigo de TN, pero luego de verlo en mal estado decidieron que disfrutarían la noche de dos nada más.