𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 𝐇𝐚𝐫𝐫𝐲 𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫 [+18]

79. Tom Riddle y George Weasley.

Pedido por nilse_0609 +18.

Yo y los chicos siempre habíamos sido mejores amigos, no juntos, claro. Más bien se llevaban bien por mi, y se toleraban cerca por mi también.

George Weasley siempre fue un coqueto de lo peor, y no solo conmigo (aunque me gustaría que fuera así), si no que con toda chica que se le cruzará al igual que Tom. Tenían una labia increíble, y una personalidad que podría de rodillas a cualquier chica. Siempre quise que me vieron de otra forma, pero eso nunca pasaba, y nunca pasará.

Hoy teníamos una junta, únicamente para fumarnos un porro y hablar de nuestras citas fallidas. Ellos siempre hablaban de que obtenían victoria con las chicas, y yo solía ser la que fracasaba, pero está vez... Era distinto. El día de ayer obtuve victoria con nada más y nada menos que Cedric Diggory, un chico sumiso de lo mejor, era exquisito para mí... Pero no me domino como me gustaba. Aún así iba a exagerar para provocarles aunque sea una puta pizca de celos, como la que yo sentía cada que me hablaban de una mujer.

La puerta sonó, y de inmediato les abrí. Lucia mi camisa blanca y apegada con los primeros dos botones desabrochados, me la había sacado de la falda, la cual era corta. Estaba en solo medias para más comodidad, y mi habitación desprendía un olor a vainilla gracias a la vela que había prendido.

—mmm ¿Nos estabas estabas esperando?— Tom sonrió coqueto, como siempre y jalo de mi cintura para abrazarme. Siempre he suponido que hace eso porque soy su amiga o... Me quiere sentir los senos.

—ya suéltala animal.— lo empujó para besar mi mejilla y darme una vuelta en el aire.

—¡Ay, George!— chille por la altura. Me bajo sonriente para ir a cerrar la puerta.

—¿Quien lo enrola?— levanté la mano tomando mi moledor azul metálico.

—la que lo enrola lo prende, eso es ley.— afirme metiendo un cogollo para comenzar a dar vueltas en los dos sentidos.— ¿Y? ¿Quien va a empezar?— me senté en medio de la cama, con una pierna flexionada. Vi a los dos mirar mis muslos, y como se sentaron en cada extremo de los pies de la cama.

—la chica creyó que era una cita romántica, no de follar. Cuando la bese más subidita de tono se asustó y me dijo que no era así, de acostarse en la primera cita.— Tom bufó.— ¿Qué creen? ¿Que follar en las primeras citas las tacha de fáciles? ¡Claro que no, es una puta estupidez!

—uuuh... Por la rabia creo que te dejaron con las ganas.— me burle tomando un papelillo. Le entregué una boquilla a George para que la armara.

—no, solo hay una en toda esta escuela que me ha dejado frustrado.— abrí los ojos, interesada en saber quién era. Lamió sus labios y cuando rasco su mentón supe que estaba algo nervioso.

—¿Quien?— le pregunté sin rodeos. George me entrego la boquilla y comence a dejar la hierba molida acomodada para comenzar a ordenarla un poco.

—solo George lo sabe. Él tampoco la ha podido tener.

—ush, no me la imagino... O si. Debe ser de Slytherin por el orgullo, ¿No?

—ja, claro.— soltó George de forma ironica.

—¿Y a ti? ¿Cómo te fue?

—muy mal también. Se me escapó el nombre de alguien mientras... La tenía ahí.— paso las manos por su rostro.— se salió y me metió una bofetada que me dió vuelta el rostro.

—uish, ¿Y te dolió?— apreté el porro para pasarle la lengua mientras lo miraba fijo a los ojos. Cuando Tom suspiré lo mire haciendo lo mismo.

—algo... Me dolió quedar con la erección. Te juro que al estar medio borracho la imaginé tan bien, y como en cuatro no le veía el rostro... Carajo.