Capítulo 12

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Bajé de la moto sintiendo el motor de la CB250T de Mikey tras de mí, lo miré por unos segundos. Sabía que estaba destrozado y preocupado por Draken, pero también sabía que iba a actuar con tranquilidad frente a todos para no llevarnos al pánico.

—Mikey. —me acerqué a él, sosteniendo su mano que se sentía un poco áspera y tenía ciertos rasguños sobre los nudillos. Mis manos también estaban así, pero lo ignoré.

—Estoy bien.

Hice una mueca—. Estaré dentro.

Él asintió y solté su mano para ingresar al hospital. Cuando pude identificar a mis amigos, caminé hacia ellos.

—¡Maya-chan! —gritó Emma corriendo hacia mí, no tardé en abrazarla mientras ella lloraba desconsoladamente sobre mi hombro. Mis lágrimas no tardaron en caer—. No puede estar pasando esto...

—Draken es fuerte, él estará bien, ¿si? —me separé de ella para sonreírle quitando rastro de las lágrimas. Me acerqué a Takemicchi—. ¿Cuál es su estado?

—Dijeron que tuvo un paro cardíaco en el camino. —me respondió uno de los amigos de Takemicchi. Mi corazón comenzó a latir con fuerzas. Tomé aire profundamente, pero tambaleé un poco, así que Takemicchi me sostuvo del codo.

—¿Maya-chan, estás bien? —me preguntó Takemicchi, asentí.

—Sí, estoy algo mareada.

Solté mi cabello para que se pudiera secar un poco. Me apoyé en la pared para quitarme los tacones y maldije cuando vi unas heridas en la parte de atrás. Mi vestido tenía algunas manchas de sangre.

—¡Takemicchi, ¿Cómo está Draken?! —Mitsuya llegó junto a Peh-yan. Mi amigo no tardó en venir hacia mí—. Estás pálida, Maya-chan. —puso su mano en mi frente.

—Estoy muy preocupada por Draken, Mitsuya. Tuvo un paro cardíaco y las posibilidades de que muera son altísimas.

—¡Maldita sea! —golpeó la pared.

—Kiyomasa hizo todo esto. —avisó el chico de cabello platinado.

—¿Qué? Maldición... —suspiré.

—Antes de que llegáramos al hospital su pulso ya estaba decayendo. 

—Takemicchi. —habló Mikey.

Lo miré.

—¡Mikey-kun, Draken está...!

—Sí, lo escuché. ¿Dónde está la sala de espera?

—¡¡Mikey!! —gritó Emma y Mitsuya.

—Están haciendo demasiado ruido. Estamos en un hospital así que bajen la voz. —dijo tomando asiento en el sofá—. Kenchin siempre ha cumplido su palabra toda la vida. Él no va a morir aquí, nunca sería tan deshonesto, ya que él me prometió que seríamos dueños del país entero juntos. Así que Emma, Mitsuya, Peh-yan, Maya-chan, Takemicchi, crean en Kenchin.

Asentí levemente y me dejé caer a su lado. Puse mi mano sobre su rodilla y él no tardó en entrelazar sus dedos con los míos. La espera parecía eterna, así que los demás se intentaban distraer conversando o haciendo cualquier cosa para mantener la mente despejada de lo que estaba sucediendo en cirugía. Hasta que la señal de que la cirugía terminó nos hizo poner de pie inmediato, solté la mano de Mikey.

El doctor salió y yo me acerqué un poco más, si la noticia de que Draken estaba muerto llegaba a mis oídos, no sé de qué sería capaz. Él era como mi hermano mayor y yo como su hermana pequeña, siempre fue así y no tenerlo a mi lado sería como si alguien hubiera desgarrado mi vida entera. Junté mis manos.

Always with U || Sano ManjiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora