Capítulo 40

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Kairi

4 de Septiembre – 22:29 PM

Inazuma- Tatarasuna – Base secreta Fatui – Sala de tortura

¿Cuántos llevaba? ¿Cuántos había dejado ya inconscientes o en peor estado? Ya... había perdido la cuenta. Aquel maldito enano no me había dejado, prácticamente, dormir para que siguiera con aquella carnicería. Los humanos eran demasiado débiles para mí. No era en absoluto una batalla justa, o ni siquiera se le podía llamar "batalla".

No era más que un cruel verdugo. Y lo peor: entre el sueño, la desesperación, los "roces" con Scaramouche, la lejanía con Kazuha y el resto de mi familia... aquellos gritos comenzaron a gustarme. Sólo quería callar a mi mente y los gritos ahogaban a mi conciencia.

Sentí unos brazos en mi cintura. Era la señal para que me detuviera, así que así lo hice.

Después, el peliazul me dio un beso en el cuello. Sentí un escalofrío por lo repentino e íntimo del gesto, aunque, últimamente, me había mezclado más de lo que hubiera querido con aquel enano psicópata.

-Scaramouche: ya no hay nadie en pie –soltó unas extrañas carcajadas-. ¿Te lo has pasado bien?

Me volví hacia él con una mirada malhumorada y, tras su imagen, mis ojos se clavaron en algo de mayor importancia: ¡¿KAZUHA?!

Estaba atado a una silla con la cabeza caída hacia abajo. No podía verle el rostro, pero sentía que no estaba bien. Nada bien.

Sin pensarlo, aparté a aquel idiota de en medio y corrí hacia él.

-Kairi: ¡Kazuha! ¡Kazuha! –grité, mientras corría con cierta euforia.

Lo había extrañado una inmensidad.

No obstante, cuando fui a tocar sus hombros, sentí cómo le daba un intenso escalofrío por mi presencia.

-Kairi: ¿Kazuha? –quedé boquiabierta ante aquella extraña reacción.

Tenía... miedo. Lo percibía: tenía muchísimo miedo. Y era de mí.

"¡¿Cuánto tiempo ha estado en esa silla?! ¿Acaso...?", comencé a temer.

-Scaramouche: lo mejor será que lo regresemos a su celda, ¿verdad, querido samurái? –sonreía de forma perversa-. Ya ha visto más que suficiente por hoy.

***

Kairi

4 de Septiembre – 22:48 PM

Inazuma- Tatarasuna – Base secreta Fatui – Aposentos del Sexto

Volvieron a encerrar y a alejar de mí a Kazuha, y yo ahora era una bomba a punto de explotar.

-Kairi: ¡¿por qué permitiste que me viera de esa horrible forma?! –chillé, explotando en un estallido emocional.

Incluso lo agarré de su camiseta. Sin embargo, no borré un ápice de aquella asquerosa sonrisita que tenía.

-Scaramouche: ¿horrible forma? Esa forma es parte de ti, ¿sabes? –expresó con tono pícaro-. Si tanto te quiere, debería aceptar todas tus formas. Además... ¿no te había ya visto él así con aquellos dos gusanos que sometiste en Liyue?

-Kairi: aquello tenía un sentido –lo zarandeé, rabiosa-. ¡Esto no lo tiene en absoluto!

-Scaramouche: sólo estoy potenciando lo que eres, Kairi –su siniestra sonrisa se intensificó.

Y yo no pude más. ¡Le propiné un buen bofetón!

-Scaramouche: ...Jajajaja... -rió de forma extraña, con la cara girada hacia un lado. Su cabello peliazul ocultaba ahora su mirada-. JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA –aumentó la risa de forma frenética.

Entonces, me tomó en brazos y me llevó a la cama.

El Pecado del Alquimista 7 [+18] (Genshin Impact)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora