-París ¡es hermoso!- Paula salió al balcón y miró a la ciudad a sus pies. Sonreí y caminé con ella hasta allá, sintiendo la brisa de la mañana. La miré y bajé mis ojos hasta la vista que la ciudad del amor nos ofrecía.
-Si, es una ciudad hermosa. Y espera que salgamos a visitarla, te vas a enamorar- asentí y ella sonrió levantando sus cejas con gracia. Me reí.
-Si, pero no creo que hayas querido que viniera sólo para mostrarme la ciudad. Algo hay en tu mirada, ¿qué es?- se apoyó en el balcón y me miró.
-Muchas cosas, pero habrá tiempo de contarlas- el timbre sonó y miré a mi espalda. Sonreí y corrí a abrir la puerta para después recibir un abrazo de Eric, que caminó hasta donde estaba mi mejor amiga.
-¡Ey! Que bueno tenerte aquí- Paula sonrió y se dieron un abrazo. Hicieron la típica conversación en el balcón mientras yo me senté un momento en el sofá para preguntarle a Kamille cómo había amanecido Jérémie. Ella, con una foto de él corriendo por el jardín me había dicho que todo estaba ok. Sonreí y dejé el celular a un lado un poco más tranquila- Y bueno, ¿donde es la fiesta?- me reí al verlos.
-En la tarde saldremos a algún lado, ahora Eric y yo debemos cumplir con una misión, y no tienes idea lo loco que está todo esto- Paula me miró sorprendida y se cruzó de brazos. La idea de Isabella era hacer el concurso el domingo, y el lunes tener el día libre en reemplazo de ese. No sé qué quiso hacer realmente, pero hoy en el almuerzo al que me invitó adelantándose a mi invitación a cenar, lo descubriría.
-En resumen, la jefa de Verónica es una loca ladrona, tramposa y mentirosa- me reí y asentí.
-¿La cuarentona?- asentí- Que pedo con tus jefas, ¿todas quieren arruinarte la vida?
-Oye, que hablas de mi prima, Cálmate- Eric la señaló y mi mejor amiga se escondió de hombros.
-Y que se joda. ¿Desde cuando la defiendes?- ella se acomodó en el sofá.
-Ahora son alíados- puntualicé y Paula rió un poco.
-¿Pero Cuanto me he perdido?
-Muchísimo, pero Eric se encargará de ponerte al día- le toqué el hombro levantándome del sofá.
-No, yo no puedo. Kamille me quiere temprano en la editorial, y creeme ella odia la impuntualidad- giró los ojos. Vaya que yo sabía lo mucho que la amaba.
-¿Crees que scarlett estará..?
-No- me cortó de inmediato y ambos la miramos- No, yo no puedo quedarme aquí hasta que regresen, no hay problema- la miré y ella se encogió de hombros.
-Paula no viajaste tanto para quedarte encerrada por favor- me miró mal.
-¿Ustedes no eran amigas?- Eric preguntó y Paula asintió sin convicción.
-De verdad, déjame descansando. Luego salimos los tres, y después quedo con Scarlett. No hay problema- Paula me miró con intensidad y reclamandome, suspiré y me resigné aceptando su propuesta, aunque sabía que ella no iba a hablar con Scarlett, desde aquel beso su relación se había roto, al menos eso creía. Pero no podía retrasar mi encuentro con Isabella.
-Entonces nos vemos dentro de un rato- me levanté y tomé la chaqueta despidiéndome- Deseenme suerte.
-Suerte.
-¡Ve por esa cuarentona!- Eric levantó su brazo y me reí.
-¿Van a coger ?- mi mejor amiga preguntó curiosa.
-No
-Si- Paula miró a Eric riendo.
-¡Ve por esa cuarentona!- Paula le siguió y me detuve en la puerta- ¡Campeona!- me reí y salí de la habitación suspirando y tomando con fuerza mi chaqueta. Tenía que hacer esto por mi, por mis valores, por la editorial y claro, por ella.
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DE CAFÉ A TI
RomanceUna de las cosas que más increíble me parecía de la vida, o tal vez del destino, era lo difícil y caprichosa que podía volverse. Me robaba sonrisas y me robó el motivo de ellas. Me entregaba tristeza y dolor, cuando estaba en máximo punto de felicid...