DE CAFÉ A TI

CAPÍTULO LXXII (FINAL)

Extendí mis piernas en el suelo y miré a Kamille a mi lado jugar con la copa de vino que estaba entera todavía, hasta ahora, que la tomó toda de un sorbo. Ninguna de las dos decía nada. Cada cosa y momento que pasamos estaba resumido en el silencio. En el amargo silencio de mi departamento, sentadas en el suelo recostadas en el sofá y mirando a la otra con timidez. Como desconocidas, como lo que seríamos a partir de hoy. A penas desconocidas, con simples recuerdos en común.

-La primera vez que te vi también tenias un cabestrillo- hablo ella y yo sonreí un poco suspirando.

-Así es- la mire un segundo.

-Adrien ya me había hablado de su mejor amiga para ese entonces, pero no creí que fuese aquella chica en la cafetería, créeme jamás lo habría adivinado- se apoyó en su brazo- Me pareciste muy bella y tenias una mirada tan... Fuerte- sus ojos fueron a los míos- me mirabas mucho- solté una carcajada y mire al techo.

-Ya, ya se- Kamille sonrió con nostalgia- Lamento haber parecido acosadora, pero cuando una mujer tan hermosa como tu esta en un lugar es imposible no mirarte- me encogí de hombros- tu presencia no pude pasar desapercibida para nadie- levantó las cejas y yo sonreí girando mi rostro hacia el frente. Nos quedamos en silencio de nuevo, porque ninguna de las dos sabía que decir o como decirlo para alejar la sensación de despedida del ambiente, pero la había. Kamille me tomó la mano y jugó con ella por un rato y yo miraba a la pared evitando pedir mas explicaciones sobre su decisión, de igual forma no haría que la cambiara.

-Lamento haberte herido, tantas veces- un nudo se me formo en la garganta- busque siempre tu bienestar, pero se que me equivoque y te lastime en el proceso, Verónica- asentí sin mirarla- eso me pesara toda la vida.

-El dolor rodeado por tus ojos cafes es un poco mas soportable- imite aquella frase que me dijo aquel dia. Carraspee y la mire de nuevo, sintiendo agotada, triste y decaída- ¿Volverás con Alexandre?- la pregunta me quemo la garganta y me recorrio el cuerpo entero torturándome con las imágenes que llegaron a mi cerebro casi de forma automática.

-¿Que?- suspire y gire mi cuerpo quedando frente a ella.

-Ambas sabemos que él te pretende Kamille, y que con Alexandre nada te impide estar- me encogi de hombros- Tú y el ya volvieron a estar juntos y solo quiero saber si le daras otra oportunidad.

-No lo sé- solte una risa cinica y ella me tomó del brazo cuando me iba a levantar- escucha, no se que sucederá. A corto plazo no tengo planeado tener ninguna relacion. Quisiera tenerlo todo contigo, no miento cuando lo digo, estoy loca por ti, pero mi temor sigue y seguirá siendo mucho mas grande. No puedo ofrecerte nada de lo que mereces...

-¡Y ya te dije que eso no me importa!

-¡Pero a mi si!- la mire y me solte levantándome del suelo. Kamille hizo lo propio y me detuvo- Entiende que no puedo estar contigo dándote una realidad a medias, yo no me lo permitiría- suspire y recosté mi cuerpo en el respaldo del sofá bajando la cabeza al suelo- No puedo, Verónica.

-Cuando Eric estuvo entre la vida y la muerte Damien acepto que se realizara la operación y me dijo que lo había hecho porque era lo que el necesitaba, porque la felicidad de Eric y sus deseos iban a ser su prioridad sin importar que y...- carraspee- y yo tal vez no te quiero lo suficiente para dejarte ir aunque sea lo que necesites- sonreí con amargura- y lo acepto, acepto no quererte lo suficiente si eso significa estar dispuesta a aceptar perderte, te mantendré por el tiempo que pueda en mi vida, aunque sea solo en recuerdos, y sin importar cuanto duela eso- me rodeo la cintura con sus brazos y dejo un beso en mi frente. Fue la gota que derramo el vaso y no pude evitar soltarme a llorar en su pecho. Me aferre a su cuerpo con mi brazo sano y ella acaricio su mi cabello.