DE CAFÉ A TI

CAPÍTULO XV

-No seas estúpida, Verónica- Adrien me golpeo el hombro mientras conducía- ¿Crees que la cenita y atenciones es de parte de una amiga? Claro.

-Le dejé claro que no me interesaba tener nada con nadie ahora- me miró y negó con la cabeza.

-Ya te la cogiste, en primer lugar. En segundo, Debes superar a Victoria de una vez por todas- suspiré y giré los ojos.

-Esto no es por Victoria ni por lo que pasó- aunque me haya dejado totalmente traumada- es por mi, porque quiero tranquilidad- se rió. No iba a tener tranquilidad con el fantasma de la noche en que estuve con Kamille persiguiéndome, mucho menos con ella yendo a la editorial con un atuendo mas atractivo cada vez. No era Victoria. Mi exnovia no tenía nada que ver, pero no podía explicarle que su prima si.

-Mereces lo mejor, Verónica- detuvo el auto frente al edificio donde trabajábamos y me tomó las manos.- Tu ex fue una hija de puta, como tu dices, y vivieron mucho y te dio mucho, pero te hirió, te lastimó y no merece menos que el olvido. Conoce gente nueva, sal a comer, disfruta y sé feliz, porque lo mereces- me acarició la mejilla y besó mi frente con cariño- ¿Me prometes buscar algo serio y ser muy feliz?- asentí y me sonrió- necesito tu opinión para elegir un par de colores para una portada, ¿esta bien?

-Gustosa de ayudarte.

-Nos vemos entonces- me bajé del auto y él se fue a parquearlo. Entré al ascensor y suspiré en la soledad de este. Necesitaba vacaciones. La idea de pedirlas e irme a España no sonaba mal, realmente.

Las semana pasaba con lentitud, sentía que pasaron 40 días desde el lunes y hoy a penas era jueves. Kamille avisó el renacer de nuestro equipo, ella sabía que fue gracias a mi ese avance, lo que ella no sabe es que use uno de mis escritos para eso. Susana me informó que ella le pidió que observara con atencion a Emma, ya que había sido la que mas mejoró. Esperaba que siguieran subiendo, pero por si acaso me junté con ella un par de veces para almorzar y le di tips para que la calidad de lo que hacía fuese mejor.

Respecto a Laila, quien habia visto mas cercana ya no solo a Eric sino tambien a los integrantes de su equipo, su desempeño tambien mejoró, pero me preocupaba su cercanía con la competencia.

-Verónica, ¿puedes recolectar los escritos de hoy y llevárselos a Kamille?- la miré mientras atendía el telefono y sonreí asintiendo, de igual forma, Susana me había evitado esos encuentros más de una vez en la semana- Gracias, tengo que salir temprano hoy- Me lanzó un beso y volvimos de nuevo al trabajo. Genial, Genial. Casi termino mi meta de finalizar la semana sin tener contecto directo con ella, volvería a entrar a su oficina de nuevo, lugar en el que no estaba desde que le traje el café. La puerta se abrió y esperé encontrarla a ella, pero no fue así esta vez.

-Buenos dias- Irene sonrió desde el lugar y ambas levantamos el brazo- Verónica, Adrien me dijo que te esperaba en su oficina.

-Vale, gracias- cerró la puerta y recogí algunas cosas antes de salir de la oficina. Cuando llegué a la de mi amigo, entré sin tocar ya que supuse estaría esperándome solo, pero no era así.

-J'étais censé faire quoi ? L'épouser ? Adrien, s'il vous plaît. (¿Qué se supone que tenía que hacer? ¿Casarme con ella? Adrien, por favor)

-La traiter d'une manière plus respectueuse pour une fois ? Non (¿Tratarla de manera mas respetuosa tal vez?)

-Adrien.

-Elle ne méritait pas ça. Ne me demande pas de te soutenir dans une telle affaire car c'est une insulte au respect, à sa morale et surtout à la tienne. (Ella no merecía eso, no me pidas que te apoye en algo asi porque es un insulto al respeto, a su moral y sobretodo a la tuya)- carraspeé y ambos me miraron con seriedad. Tuve la tremenda sensación de que la conversacion me incluía, y sabía de que conversación se trataba. ¿Por qué no se frances?