Desde que comenzó a estudiar para ser lo que quería desde niño todo cambió.
"Cada día como carne, aún fingiendo querer ser vegetariano.", aquella frase ahora describía su vida desde que lo conoció.
¡Advertencia:
🕊; Contenido en contra de la exist...
¿Ver a su ex-mejor amigo y tutor tener sexo, le había provocado una erección?
Apagó la cámara.
—M-Maldición.
Aunque técnicamente estaba viendo porno.
Al menos. Ya tenía el vídeo.
Misión cumplida.
—¿Q-Qué me pasa? —dejó la cámara en la mesilla de objetos de limpieza, para después bajar la vista y ver un bulto.
Y en plena madrugada, decidió darse un baño con agua fría para calmar el dolor.
Logró bajarla considerablemente, por lo que se vistió con otra pijama más cómoda y con la cámara en manos se dirigió fuera del baño.
La guardó en su armario entre ropas de vestir y suspiró. Al menos estaba aliviado de haber cumplido su castigo.
Se dirigió a su cama y vio a su compañero de cuarto, dormir pacíficamente y con una sonrisa pintada en los labios.
Debía de admitir que, desde el día de la misa, no había visto de la misma manera a aquel.
Y los gemidos del vídeo que captó su cámara vinieron a su cabeza, avergonzándolo por completo y negando repetidas veces.
El Soobin que su cámara grabó, no se parecía en nada a su ex-mejor amigo. Hablando sucio y suplicando por ser penetrado.
Había cambiado mucho. Mucho.
El lindo, tímido y tranquilo Soobin, pareció haberse marchado para Kai. Porque ahora uno más desafiante, atrevido y creído, apareció. Aunque la verdad seguía siendo lindo.
"¿Estar con el profesor Choi lo cambió?"
"No sé. Lo más probable es que sí."
Pero luego vio de nuevo al pelinegro, ¿estaba riéndose entre sueños?... visualizó como apretaba las sábanas y sonreía como un tonto.
"Tal vez lo cambió. Pero eso lo hace feliz. El profesor Choi lo hace feliz.", sonrió levemente.
Parecía que fue ayer cuando Soobin negaba ser homosexual. E irónicamente acaba de tener relaciones con un hombre.
Apretó los labios para luego abrir las sábanas de su cama.
"Si no hubieras sido tan terco y enojón, muy probablemente, mañana no estarías contra la espada y la pared."
Y entró entre las mantas. Por última vez girando a ver a su compañero, quien dejó de sonreír para sostener fuerte la almohada como si se fuera a ir.
"¿Una pesadilla...?"
Supuso que, todos los cuentos tenían un nudo. Y obviamente también un desenlace. Ya sea bueno o malo.
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