Namikaze-Uzumaki Naruto

🔹Recuerdos🔹

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Los dos peli-negros sintieron un tirón desde su estómago. Abrieron sus ojos para encontrar solo oscuridad, intentaron buscar con la mirada al rubio menor.

NARUTO: - Este lugar se conoce como el espacio mental de una persona, los Yamanaka pueden entrar al propio o al de otras personas, nadie que no conozca como acceder a el no puede entrar. Por otro lado los Jinchūriki's comparten uno con sus Bijū y les es fácil entrar en el. - Shisui y Itachi se sobresaltaron al escuchar al rubio en sus espaldas. - Síganme. - Sus pasos resonaron en todo el lugar.

El silencio era lo único audible en ese momento, no habían nada de luz que pudiera dejarles ver el lugar completamente, el aura de Naruto parecía una fuente de luz, al pasar por la oscuridad parecía alumbrar su camino. Mientras seguían al Namikaze miraron a sus lados tratando de ver algo más, sin embargo, se detuvieron cuando el oji-celeste detuvo sus pasos.

NARUTO: - Creo que con esto empezaríamos. - Delante de ellos, parecían imágenes ir y venir. Como si se reprodujeran solas, sin embargo, lo que les llamo la atención fue ver al menor luchando con Anbu's de Raíz.

-Así que te diste cuenta. - Afirmó mientras lo escaneaba. - Eres listo, quizás si eres ese prodigio que dijeron. ¿Qué te parece estar bajo mis órdenes? Llevo días observándote. - Ante eso Naruto se paró, mientras sus manos permanecían en sus bolsillos. - Se que eres más de lo que aparentas.

En el recuerdo parecía más detallado de lo que pudo haber contado Naruto, Shisui apretó sus puños mirando a Danzō, aunque también se fijó lo pequeño que Naruto se veía.

-Dentro de una semana, ten está es la dirección donde uno de mis Anbu's irá por ti. - Con eso empezó a retirarse, dejando a Naruto solo que miraba el papel.

Los Uchiha's quisieron seguir viendo el recuerdo, pero nuevamente pasaron a otro. Itachi miro sobre su hombro al rubio que miraba un punto sin específico. Sus ojos se miraban más apagados de los que pudo recordar, su ceño se frunció en preocupación por el menor. Nuevamente observo el nuevo recuerdo que Naruto les mostraba.

-Tenemos una misión en conjunto con el equipo de Yūki. - Dijo mientras pasaba su vista en sus Genin.

Itachi se percató de que misión era, una sonrisa amarga cruzo por su rostro ante el recuerdo, pero el sentimiento de tristeza fue fuerte viendo cómo Naruto les mostraba desde lo que pudo observar.

Lamentablemente no podían ver más que solo pequeñas partes, pareciera que Naruto solo les mostraba lo más relevante, dejando oculto cosas que el no querían que vieran.

-¡Ya basta! ¡Déjalos! - Exclamó viendo cómo sus sensei y compañeros eran torturados, mientras el veía todo.

Los peli-negros se sobresaltaron ante la exaltación en la voz del rubio. Itachi y Shisui miraron como Naruto estaba amarrado a un árbol, sus ojos se abrieron observando el sufrimiento que estaba pasando todo el equipo, incluido Naruto.

SHISUI: - ¡Espera! Déjanos saber más. - El Uchiha dijo mirando a Naruto seriamente, más sin embargo no recibió respuesta.

Los recuerdos aparecían, tenían preguntas y querían respuestas. El Namikaze solo miraba todo con detenimiento, para el era doloroso volver a revivir esos momentos y temía que al hablar no saliera su voz. Los dos mayores podían ser sus amigos, pero prefería guardarse sus sentimientos y sufrimiento para el.

-Al final si demostraste qué eres diferente a ellos. - Su voz sonaba agitada, no mentiría al decir que por unos momentos logro sorprenderle el menor. - Pronto nos volveremos a encontrar. - En un ágil movimiento sintió como ponía su mano sobre su corazón.

ITACHI: - ¿Qué hizo?.... - Su Sharingan activado mostrando una aspa miraron a Naruto. - ¡¿Qué sucedió?! - Sus pies avanzaron, sus manos fueron a los hombros de Naruto.

NARUTO: - ... - Sin hacer muchos esfuerzo quitó las manos del Uchiha de el. - Todavía falta. - Caminó hasta colocarse delante de los dos.

HIRUZEN: - ¿Quieres entrar a Raíz, Naruto? - Sus ojos escanearon al menor que estaba sentado en la camilla viendo sus manos. Recién despertaba de la misión que había tenido, donde había perdido a sus compañeros.

NARUTO: - Hai, Sandaime-sama. - Su voz sonaba distante y más ronca de lo común.

HIRUZEN: - ¿Estas seguro? Quizás.... - Intentó encontrar otra solución para que el rubio no fuera a un lugar como lo era raíz.

DANZŌ: - Ya lo oíste Hiruzen, el quiere entrar y no podemos negárselo. - Sus ojos se mantenían neutros, pero por dentro se regocijaba por tener al Namikaze aun más a su disposición y teniendo el consentimiento de el y el Hokage.

NARUTO: - Esa es mí decisión, como lo dijo Danzō, en raíz puedo manejar mejor mis emociones después de todo esto. - Lavando su rostro mostrando seriedad y calma. - Es una buena oportunidad y no pienso desaprovecharla. -

Shisui tembló de rabia en su lugar, Naruto nunca debió de pasar por todo eso en tan poco tiempo. Nunca debió de ser una arma que controlaban, nunca debió de estar solo. Sus ojos miraron la espalda de Naruto y entonces suavizo su mirada, el no tenía nada de culpa de lo que le había pasado.

MINATO: - Así que tu eres Kitsune. - Dijo ganándose la atención del Anbu. - Supongo que has leído el pergamino y sabrás que tan importante es y su riesgo. - Sus ojos azules miraron la figura del Anbu, esperando alguna reacción para cuestionar sus habilidades.

NARUTO: - Hai Yondaime-sama, la misión se realizará. Puedes contar conmigo, incluso si yo no vengo la misión se hará. - Sus palabras salieron en un tono plano, sin mostrar rastro de sentimientos. - Tienes mí lealtad y mí vida para proteger Konoha. - Complemento haciendo que el viejo mono lo mirara sorprendido.

Los oji-negros se sorprendieron de las palabras de Minato y Naruto. La entrega que hacía de su vida al rubio mayor era la misma que ellos tenían, sin embargo, les causó intriga al ver cómo Minato no parecía saber que Kitsune era su hijo mayor.

Una vez más el recuerdo parecía distorsionarse, tomando un blanco, sin embargo, no se mostró nada más.

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