Namikaze-Uzumaki Naruto

🔹Cabos sueltos🔹

56

«=»

-------------------------

Entonces descubrió que tendría que tener cuidado.

Salto hacia una roca, cruzó sus brazos en x y retuvo la patada como pudo. El entregar parte de su chakra a sus Kage Bushin no era cosa sencilla, además tenía que sumarle que todavía se encontraba débil. Tobi había tomado la mayoría de su chakra y a pesar de ser un Uzumaki, su chakra no regresaría de un día para otro. Tenía su tiempo para regenerarse, como los Bijus.

(...)

Konoha podía sentir el ambiente fresco, tranquilo. El cielo estaba despejado, apenas si se podía mirar una que otra nube pasar. A la distancia se podía escuchar el bullicio de las personas pasando por las diferentes calles.

Jiraiya avanzaba hacia la aldea con rapidez, aunque no habría querido, sus invocaciones lo habían retenido en el país de las invocaciones para recuperarse. Ellos mismo le habían asegurado que donde se había dado la batalla, en ella no se habría encontrado nada o nadie. Así que sus esperanzas habían muerto al comprender las palabras. Naruto se había sacrificado por él y Konoha. El lugar estaba hecho ruinas. Y con ello y aunque su corazón se negara, su mente le tenía presente lo inminente.

Observó la torre con tristeza, le dolía haber ido a ese lugar y terminar sin un brazo y con heridas. Le dolía haber visto cómo su hijo iba a ese lugar para salvarlo y dar la vida por él. Habría querido que su hijo lo enterrara a él y no él a su Naruto.

Con la pesadez que su corazón sentía, se abrió paso por los pasillos porque no encontraba las fuerzas para entrar por la ventana, como habitualmente lo hacía.

Sin más abrió la puerta, encontrando a su alumno Minato; Itachi, Shikaku, Tsunade y el comandante anbu.

MINATO: - ¡Sensei! - Exclamó al ver el estado del mayor.

: - Jiraiya-sama. - Murmuraron el resto de hombres.

Tsunade se había acercado rápidamente para tratar de ayudar a su compañero, sorprendida del estado en el que se encontraba.

Suspiro caminando hacia adelante, no encontrando razón para retrasar la dura verdad y quizás al momento de compartir la información, tendrían tiempo de hacer un plan en caso de que Pain volviera.

JIRAIYA: - Tengo información de Akatsuki. - Murmuró mirando con seriedad al rubio, sin embargo, Minato pudo percatarse del aura triste que permanecía alrededor del hombre.

MINATO: - Bien, - Asintió observando a las demás personas. - Necesit-... - Elevó sus cejas al ver la mano alzada de Jiraiya.

JIRAIYA: - Solo coloca sellos y deja que se queden, hay información que ellos deben saber para proceder y eventualmente todos tendrán que saber. - Murmuró tomando asiento que le indico Tsunade para que ella pudiera ayudarlo a curar. Todavía no habían visto que le faltaba un brazo, quizás era por la capa que tenía puesta y que cubría parte de su cuerpo. - Akatsuki está conformada por varios caminos, todos esos cuerpos los controla una sola persona y que es poseedora del Rinnegan. - Dijo escuchando el jadeo que había dado su compañera. - Todos están bajo el control de Nagato, un alumno que tuve en el tiempo de la Segunda Guerra, cada uno posee una técnica. Puedo explicarles eso más adelante, ahora tenemos que ver una estrategia en caso de que ellos vengan. - Afirmó frunciendo su ceño, sintiendo un nudo en la garganta formarse.

MINATO: - ¿En caso de que venga? ¿No estás seguro? - Pregunto preocupado. - ¿Qué fue exactamente lo que sucedió ahí, sensei? - Pidió saber. 

Se le hacía raro la forma en que estaba actuando y el hecho de que parecía herido, pero no le daba importancia a ello. Daba gracias a los dioses porque Jiraiya había regresado, había sentido que no lo iba a lograr puesto que se iba a enfrentar a ninjas que desconocían su poder.

JIRAIYA: - Pude obtener un solo cuerpo, ellos eran muchos para mi. - Ante eso, destapó su brazo, dejando a la vista que hacía falta. - Estuve a punto de morir. - Aseguró mientras agachaba su cabeza, tratando de contener las lágrimas.

SHIKAKU: - ¿Morir? Alguien llegó para que pudiera salir, ¿no es así? - Dedujo viendo lo grave que se veía aquella herida y porque no encontraba alguna otra explicación.

Todos esperaban que continuara, pero simplemente solo obtuvieron el leve temblor en el cuerpo del hombre y varias gotas caer de sus ojos tapados por su cabello.

MINATO: ¿Sensei? - Pregunto preocupado por ver al hombre así.

TSUNADE: - Jiraiya, ¿Quién llegó? - Ella preguntó preocupada por el hombre, sin embargo, sentía que algo no estaba bien con que el hombre dejará a flote sus sentimientos.

JIRAIYA: - Naruto, - Murmuró con voz ronca. - él llegó y le ordenó a Ma y Pa que me sacaran de ahí, mencionó sobre la invocación inversa y que solo logrando ello podía salir de ahí y traer la información. Él llegó ahí para salvarme y dejar que me fuera con esta información... - Dijo mirando duramente a su alumno. - Minato, ¿por qué Naruto haría algo así? Todo cuando se supone que es un ninja renegado, que está buscando el hundimiento de Konoha y no salvarla. ¿Hay algo que nosotros no sabemos? - El preguntó duramente a su alumno, no encontraba otra respuesta a los acontecimientos.

MINATO: - No, no sé de qué hablas. No sé nada de lo que estás diciendo. - Dijo mirando enojado a su sensei. - ¿Dónde está él? - Pregunto también en el mismo tren de preocupación.

Itachi frunció su ceño al no gustarle para nada la conversación. Sus cuervos había estado vigilando a su amigos y de ahí pudo partir para unir las cosas que no tenía claro y que sentía que no estaban bien, porque sentía que todo estaba enlazado a algo que no entendía o no veían a simple vista.

Pero no llegó ninguna respuesta más que solo una mirada desolada y herida.

TSUNADE: - Jiraiya, ¿dónde está él? - Pregunto viendo como su compañero se quedaba callado y su única mano estaba hecha un puño. - ¿Jiraiya? Por favor, habla. - Pido empezando a desesperarse.

Su mente le estaba repitiendo aquella escena, como lo había sacado de Ame y la única imagen de su hijo era su espalda, viendo a sus enemigos. Dispuesto a luchar por algo que ellos habían jurado que quería destruir. Naruto le había demostrado con ese acto que algo se escondía dentro de todo.

El simplemente no podía odiar a algo y pelear por ella, era algo ilógico. Naruto estaría de un lado o de ninguno y se que le demostró, era una clara señal de que algo ocurría y que ellos no contaban con esa información.

JIRAIYA: - Él se sacrificó, se quedó en Ame y luchó con todos los caminos. - Murmuro tratando de recomponerse, pero aquello era difícil. 

[✔]