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-------------------------Ni uno se dio cuenta de cuando se había desaparecido Naruto, solo se pudieron percatar de lo acontecido cuando algo se había incrustado en la pared.
Naruto estaba en el lugar de Deidara con una pierna levantada y el rubio mayor del otro lado de la habitación.
DEIDARA: - ¡Ya verás! -; gruño por el golpe recibido.
No dejaría que fuera el único que recibiera algún golpe, eso ya se había convertido en una rivalidad. Mandó parte de su arcilla fuera en dirección del menor, no esperaba que nadie más se metiera, era algo entre Naruto y el.
NARUTO: - "Ridículo" -, pensó viendo como el humo en la explosión se iba. - ¡Es lo mejor que tienes! Vamos Deidara, pensé que si harías algo, sería a lo grande, ¡Como verdadero arte! -. Abrió sus brazos mientras lo miraba burlón.
Sus ojos captaron como el otro fruncía su ceño y lo miraba enojado, le haría entender que era un ataque. Mandó sus cadenas hacia el otro y cuando lo tuvo agarrado, lo jalo.
Incrustando chakra a sus pies, salto y traspaso el techo. Ahora Deidara sabría porque no debió de hacerlo enojar y menos molestar con sus "padres".
NARUTO: - Será divertido... - Murmuró viendo directo a los ojos del otro, cuando lo había tenido al frente de el.
Levanto su puño y le inyectó chakra, y se lo plantó en el estómago a Deidara.
Desde el cielo aún suspendido vio el cuerpo del rubio caer directo al suelo, sus cadenas ondeando amenazadoramente. Río entre dientes viendo como trataba de levantarse lentamente.
Su atención se dirigió a sus pies cuando sintió como algo se enrollaba en ellos, sus ojos se dirigieron al responsables de los hilos de chakra.
Sin previo aviso fue jalado hacia el suelo, y antes de chocar hizo que sus cadenas formaran una esfera y que lo protegería del impacto.
NARUTO: - "¿Piensa que esto quedará así?..." -, sus ojos se oscurecieron al ver los hilos, el polvo se iba yendo poco a poco.
Ninguno de los demás miembros podían ver el rostro de Naruto, su cabello tapaba sus ojos y su rostro.
KISAME: - No debieron hacer enojar a Naruto ... - Suspiro negando.
-¿Por qué lo dices? -, su cabeza giro hacia el hombre.
KISAME: - Es obvio que si nunca vimos enojado a Naruto, es porque es muy malo cuando lo hace... ¿Por qué crees que siempre está sereno? -; sus ojos miraron con suma seriedad el siguiente movimiento que aria el menor. - Kakuzu, Konan. Tenemos que estar preparados para intervenir. - Aviso.
El era el único que sabía de algunas técnicas del rubio, había sido asignado como compañero del Uzumaki. Así que podía decir cuando intervenir, porque usando sus técnicas las cosas se ponían feas.
Sus ojos miraron los hilos que sostenía su mano, los apretó haciendo que dejaran de absorber su chakra. Pero entonces le mando chakra corrosivo, para que le quemará cuando lo drenara.
-¡Ahg! -. Jadeo cuando sintió el dolor que el chakra le generaba.
KAKUZU: - Y ahora a ti Sasori. ¿Qué te pasó? -: pregunto con una ceja levantada hacia el peli-rojo.
SASORI: - Su chakra es muy oscuro al querer robárselo, me hizo sentir dolor cuando no puedo sentirlo... - Murmuró dejando sorprendidos a los otros.
NARUTO: - Fue una mala idea que quisieras meterte en esto, Sasori. - Declaró mirando hacia el mencionado y a sus compañeros. - El problema aquí es entre Deidara y yo, así que no te metas, a menos que quieras sufrir como el. - Le envío una sonrisa, pero que no transmitía nada.
Apretó los hilos y hizo que se rompieran, nuevamente clavo sus ojos en el recostado rubio.
Masajeo el puente de su nariz haciendo que la sed de sangre y el querer matar a Deidara retrocediera al ver a la figura entrar, sacudió levemente sus ropas y a paso calmado se dirigió hacia la figura que lo miraba serio.
DEIDARA: - ¿A dónde vas? ¿Me vas a decir que te arrepentiste? ¡Mocoso huérfano! -. Exclamó viendo la espalda de su compañero más joven.
NARUTO: - Tengo cosas más importantes que hacer, que ensuciarme las manos al sacar la basura. Rubia estúpida. - Sonrió con burla al ver como el otro empezaba a despotricar. - Como sea, no puedo matarte aunque quisiera, eres parte fundamental para la organización, por algo estás aquí. ¿No, Deidara? -: Suspiro mirando como el otro se quedaba quieto en su lugar. - ¿Necesitas de mi, Pain-sama? - murmuro a la figura escondida.
DEIDARA: - ¡No te quieras hacer ahora el inocente! ¡Ven y pelea! -. No era justo que cuando tenía la atención de Naruto para una pelea este decidiera retirarse. - ¡Naruto! -, lo llamo, siendo ignorado.
Con pasos decididos y firmes avanzó hacia a Naruto.
KONAN: - Deidara, no creo que sea conveniente que vayas hacia ahí. - Advirtió mirando sería al ninja.
DEIDARA: - ¿Por qué? - levanto una ceja en confusión.
No recibió respuesta, más sin embargo, miraron como Naruto se arrodillaba y otra sombra sobresalía esta vez. Pequeños murmullos pudieron escuchar, en algunas ocasiones viendo al Uzumaki asentir.
Naruto se levantó mientras realizaba una reverencia y caminaba hacia ellos, sus ojos cerrados eran tapados por algunos mechones de cabello rubio.
NARUTO: - Hidan... - Llamo al oji-violeta. - Tenemos una misión, así que andando. - Dijo mirando al mencionado.
HIDAN: - ¿Los dos? ¿No se supone que las misiones son con nuestras parejas correspondientes? -, pregunto con confusión.
NARUTO: - Son órdenes de Pain-sama, ahora si quieres decirle algo a el, anda y ve que te dice. - Levanto sus hombros restándole importancia de lo que pudiera pasarle al otro. - ¿Qué? ¿Tengo algo en la cara? - pregunto frunciendo su ceño hacia su compañero rubio.
DEIDARA: - Nada... - Murmuró.
El Uzumaki asintió lentamente, empezando a caminar hacia su habitación compartida con Kisame, debía ir por armamento y medicamento.
(...)
Réyelo nuevamente el pergamino donde estaba la misión que debían cumplir, intentaba mantener la calma ante las estupideces que decía el otro hombre y que venía diciendo desde que salieron de la guarida, en todo caso quizás le hubiera gustado ir con Deidara, era menos hablador.
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Namikaze-Uzumaki Naruto
FanfictionBajo la oscuridad, caminaba entre ella, sumergiéndose más hasta tocar fondo. Ella se había vuelto una parte de el, sabía que era peligrosa y siguió con ella si con ello conseguía mantener a salvó lo que amaba y que quería proteger. Habían sacrificio...