- mi plus ultra, lo eres tú... -
Obviamente créditos a Kohei Horikoshi por crear tremendo manga.
Pd: ninguna imagen es mía, solo las edito, todos los créditos a su respectivo creador.
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Miércoles 05:00 PM
— osea... — y nuevamente Aizawa comenzó a corregirte mientras disimuladamente a sus espaldas te cerraba tu partida del solitario en la computadora, intentándolo por octava vez en la hora. — está mal, va al revés — asentiste y volviste a acomodarte en el escritorio de al lado donde anteriormente tu profesor estaba comiendo su sándwich por la hora del almuerzo.
— ¿por qué no vas a la cafetería? La hora del almuerzo comenzó hace 20 minutos — negaste aún concentrada en la consigna mientras jugabas con tus pies debajo del escritorio — no quiero ir a la cafetería — el dudoso entrecerró sus ojos y se dedicó a ver de reojo tus respuestas mientras regresaba a intentar apagar el computador por detrás. — ¿no tienes hambre? — negaste rápido mientras empezabas a tachar nuevamente en la hoja, pero contradiciéndote, tomaste el sándwich de Aizawa y le diste un mordisco.
— ese es mi almuerzo — y abriste la botella de agua a su lado — y mi agua — le viste curiosa y después bajando la botella de tus labios, rápidamente respondiste — pues ahora no, quieres? — suspiró por la nariz negando al mismo tiempo que un poco calmado terminaba de ver el computador apagandose. — y bien? — mostraste los resultados y al fin, todos estaban correctos. El pelinegro asintió, dando a entender que todo estaba bien, y con entusiasmo te levantaste a saltar de un lado a otro — pero no es suficiente — volteaste confundida, mirándole con curiosidad mientras ladeabas la cabeza — hay contenidos de la escuela que no aprendiste por dos años casi tres — bajaste los hombros un tanto desanimada, pero sin que se te vea la cara larga.
— pero aprendes... Un poco rápido — subiste la cabeza a verle de reojo y luego pusiste tus manos en tu cintura, viendo hacia arriba orgullosa. — pero aún, eso no quita que te lleve un tiempo aprender todo — mientras volvías a quejarte ruidosa por la Sala de profesores, distraído Aizawa se perdió en sus pensamientos "aunque en la secundaria por más que no sepas, es imposible repetir de año, solo en secundario superior puedes llegar a repetir" Y volvió a verte como dabas la tercera vuelta frustrada, agarrándote de los pelos enloquecida por la tarea que sentiste que no valió de nada. No se sabía porqué, pero cuando empezaste creías tener la torpe e imposible ilusión de que todo ese problema se solucionase en un abrir y cerrar de ojos, pero tan sólo te hizo meter un poco más en el lodo, ni siquiera te habías zambullido en ese torbellino de problemas sobre la escuela y tus notas.
En eso, la campana sonó y dió la señal de que la hora del almuerzo acabó. Aizawa, quien estaba muy motivado y que se notaba a la lejanía, suspiró pasando su mano por su largo cabello y luego te vió de reojo — vete yendo al campus, tendremos entrenamiento — un tanto vacilante le viste, pero mientras te acercabas a la puerta, comentaste — gracias, viejo... Fuiste de ayuda — y cerraste rápidamente la puerta mientras a los segundos se oía tus pasos acelerados por los pasillos. Shota bajó la mirada y vió tus cuadernos y hojas en su escritorio. Incrédulo las vió por unos segundos y después musito — ¿es así de tonta siempre? — y tomó los cuadernos, caminando hacia fuera de la oficina para ir de paso a dejar los cuadernos en tu pupitre.
