- mi plus ultra, lo eres tú... -
Obviamente créditos a Kohei Horikoshi por crear tremendo manga.
Pd: ninguna imagen es mía, solo las edito, todos los créditos a su respectivo creador.
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~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~~•~•~•~•~• Cambié la forma de narrar como antes. ~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~
Jueves 9:30 AM
El primer receso había comenzado y todos comenzaron a levantarse de sus asientos. Pero tú te quedaste en tu asiento, pensando curiosa como salir de la UA, mientras golpeabas el lápiz en la mesa.
Sentiste como te tocaban el hombro repetidas veces. Sin detener los golpes de el lápiz contra la mesa, girastre hacia la izquierda. Al instante se formó una sonrisa en tu rostro. - ¡chico lindo! - el heterocromatico te miró fijamente, apuntándose. Asentiste con la cabeza mientras lo mirabas entusiasmada. - bueno ¿que quieres, chico lindo? - él miró de reojo a sus alrededores para después mirarte.
- Midoriya dice que te vió distraída, así que me dijo que te diera esto - y te entregó unos apuntes. Los tomaste con una leve sonrisa y luego gritaste con felicidad - ¡aaw! Deku es tan tierno... - y dejaste los apuntes en la mesa y le preguntaste - hablando de él... ¿En dónde está? - y te levantaste, dejando de jugar con tu lápiz - fue a hablar con All Might - asentiste comprendiendo para después caminar hacia la puerta.
Te diste la vuelta y lo miraste - ¿tienes algo que hacer? - preguntaste entusiasmada mientras saltabas sin parar, el heterocromatico negó tranquilo - entonces ¿quieres acompañarme? - Todoroki simplemente se quedó callado, sin responder. Caminaste hasta él, lo tomaste gentil de la mano y comenzaste a correr entre risas. - ¡corre, Shoto! - y carcajadas salían de tí. El nombrado solo miraba con cierto brillo en sus ojos tu sombra, que corría rápidamente.
Las pocas personas que se encontraban en los pasillos, los miraban extrañados. - Nee~ Nee~ Todoroki, ¡vé a la azotea! Voy en menos de un minuto - y soltaste poco a poco su mano hasta desviarte del camino hacia la azotea, lo saludaste con una sonrisa mientras poco a poco te dejaba de divisar a cada paso que dabas. Todoroki paró de correr y te siguió mirando desde lo lejos, miró las escaleras que daban a la azotea y lentamente, mientras suspiraba, comenzó a subir por estas.
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