Martes 6:58 AM
...
El aire frío abarcaba en toda la zona... Una niña dejaba las huellas de sus botas en la nieve, aunque pronto más copos de esta taparían las pisadas blancas y claras.
Mientras se abrazaba a ella misma y respiraba rápido, tratando de suspirar y largar un aire caliente, para que este cubriera sus manos y sintiera calidez, caminaba por al lado de algunas personas que tenían un ritmo de caminata más rápida que el de ella.
Alfin pudo llegar a su destino, una tienda pequeña al que la habían mandado. Cuando habia llegado, su pequeña capucha se cayó, dejando ver a una niña de 6 años despeinada, con ojos más vacíos que un cuerpo sin vida luego de años en un cementerio, cubría su cuello en una larga bufanda, de seguro de su padre o madre, le debieron de prestar gracias al frío de aquella mañana helada... Tan helada.
Sus dedos de las manos dejaban de temblar del frío, y sentía como la calefacción, aunque fuera mínima y leve, dejaba calentar la punta de su nariz congelada, cerró sus ojos como si estuviera a punto de dormirse hasta que sintió que alguien la observaba, abrió al instante sus ojos, y miró indiferente hacia su alrededor.
La tienda se encontraba vacía si no fuera por el chico de la caja, la miraba desde la mesa, que en esta se encontraban varios dulces y objetos de poca importancia para lo que realmente necesitaba la niña en esos momentos.
Sin saludar ni nada, la pequeña caminó hasta lo pasillos, haciendo que la vista del joven hacia la niña desaparecíera, aunque poco le importó a esta, solo quería comprar. Miró con detenimiento el sector de comidas, viendo la variedad de panes envueltos en papel film dentro de una bandeja. Tomó uno aleatoriamente, unos redondos con buen color, brillantes y dorados.
Al tomarlos sintió calor en sus manos, quería quedarse así un buen rato para poder estabilizar la temperatura de sus manos.
Llegó a la caja y allí lo esperaba el mismo joven, alrededor de unos 17 años, tenia una sonrisa dulce y amable. La fémina no le tomó tanta importancia, así que dejó el pan en la caja y el chico aún apoyando su codo en el soporte y su mano en la barbilla sonrió de lado - serían 50 yenes - sin decir nada pagó lo justo, dejándola enfrente de él.
El chico tomó el dinero al igual que el pan y este último lo guardo en una bolsa transparente mientras la fémina lo miraba sin expresión alguna, cualquiera diría que fuera una muñeca. - aquí tienes - y dentro de la bolsa pudo notar un dulce - O... - trató de hablar pero parecía bastante rasposa su voz, la aclaró raspando su garganta y habló.
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My Plus Ultra (Chicos De Bnha y tú)
Fanfiction- mi plus ultra, lo eres tú... - Obviamente créditos a Kohei Horikoshi por crear tremendo manga. Pd: ninguna imagen es mía, solo las edito, todos los créditos a su respectivo creador.