Capítulo CXXVII: Junto a tí

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Domingo 12:00 AM

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Domingo 12:00 AM

El señor Hamadoka y Gina se habían despedido hace una hora y media al menos. Ya había pasado la hora de dormir de la niña y debían de descansar para pasar el domingo juntos.

Aún recordabas las tiernas mejillas rosadas de Gina mientras saludaba apenada a todos los presentes y el señor Hamadoka te agradecía a tí y a Nezu por la invitación.

...

— Muchas gracias, fue una maravillosa noche, pero Gina esta cansada y debemos levantarnos temprano mañana para ir a pasear por la ciudad — asentiste tranquila sin darle presiones.

— no se preocupe. Gracias por venir, fue bueno volver a verlos — y la niña corrió a tus brazos.
Aceptaste gustosa el abrazo y luego revolviste su cabello, haciéndola reír.
— fue un placer conocerlos, espero volvamos a vernos — estrechó manos con el director de la UA.

Al rato mientras se iban alejando y desapareciendo de sus vistas cerca de las puertas del restaurante, el mayor con una sonrisa paciente habló — no me avisaron que invitaste a gente — mientras terminabas de saludar con la mano a Gina a la distancia, hablaste seria — eso porque todavía no vinieron los otros dieciocho, les dije que vinieran más tarde —

El director giró a verte estupefacto, con la boca abierta. Echaste a reír fuertemente mientras golpeabas tu muslo, entrando por la puerta.
— calmate, rata de dos patas. Solo los invité a ellos, son mis vecinos del departamento y me ayudaron más de una vez cuando no quería salir —

Nezu resopló aliviado, dejando salir su preocupación a la vez que cerraba sus ojos y ponía su mano en el pecho.

...

— ¡VAMOS, _______! ¡HAY QUE BAILAR! — gritó Ashido mientras movía sus brazos.
Negaste entre risas mientras seguías metiendo hielo a tu bebida — baila por mí, Mina. Destruye esa pista, mujer — la de ojos negros no tardó en recibir el mensaje y poner manos en acción, tirándose al suelo para hacer un par de giros de breakdance.
Todos la rodearon para silvar y gritar divertidos.

— era un restaurante, ¿desde cuando se descontroló hasta el cantante? — hablaste para tí misma viendo como el cantante de la banda también bailaba de un lado a otro, cantando cuando la respiración agotada le daba la oportunidad de volver a uno de sus números que habían acordado con el establecimiento.
Mina era una debilidad para los músicos. Esa adrenalina al bailar era fácil de dejar llevar a quien sea, y eso se veía cuando los meseros pasaban y le miraban de reojo con molestia al cantante quien bailaba con todos.

My Plus Ultra  (Chicos De Bnha y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora