CAPITULO 19

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Ancel se abalanzo sobre Johann, justo antes de aquellas enormes rocas los separaran del resto, el alfa se puso encima de él, para protegerlo. El omega lo mirada sorprendido, sintió como los brazos de su compañero lo abrazaron, parecía que iba a ponerse a llorar.

-¿Estás bien? – asintió y Ancel sonrió.

Podían escuchar como sus compañeros los llamaban desde el otro lado, estaban separados completamente no podían verse. Ancel se levantó y ayudo a Johann, que seguía confundido. A lo lejos, el capitán pudo divisar algo brillante, que no le dio buena espina, antes de que el primer disparo sonara.

La bala se desvió bastante lejos de ellos, Ancel abrazo con fuerza a Johann, el omega pensaba que lo iba a ahogar. La segunda bala impacto en el hombro del capitán, su compañero tuvo que sostenerlo para que no se cayera.

-Estoy bien, no te separes de mí...- acarició su cabello, para tranquilizarlo.

Johann busco el arma de Ancel, que colgaba de su cinturón y comenzó a disparar sin fijar ningún objetivo, estaba demasiado nervioso como para concentrarse. Los disparos dejaron de sonar cuando se quedó sin balas, la persona o las personas que los habían atacado, no volvieron a hacerlo. Ancel se negaba a separarse de Johann, no quería que lo hirieran.

-Capitán...- escucharon la voz a coro de sus demás compañeros – Johann – estaban desorientados, ellos también se habían puesto en guardia para atacar si era necesario - ¿Estáis bien?

No hubo respuesta, Jire grito más fuerte que sus compañeros para llamar su atención, esperaron unos segundos hasta obtener respuesta.

-Han disparado al capitán, en el hombro...- grito Johann – Yo estoy bien, pero el capitán, no para de sangrar – Ancel le volvió a acariciar el cabello - ¿Cómo estáis vosotros?

-Todos vivos, no tenemos heridas – les informo Shilo – Buscaremos la manera de ir con vosotros, esperad.

-Volved a Ylesa...- les grito Ancel – No podréis llegar a Pora, vosotros solo, debéis volver.

-Capitán, no podemos hacer eso, tenemos que buscar a Jaziel y ayudaros, nosotros...- el alfa los volvió a gritar, al ver que no le hacían caso – Capitán ¿Cómo volvemos a Ylesa? No sabemos el camino.

-Cohem marco algunos árboles, mientras trotábamos, podréis encontrarlos fácilmente, seguid solo los que tienen una "x" marcada...- volvió el silencio incomodo – Os ordeno volver a Ylesa, ahora.

-Capitán...- replicaron, pero Ancel les volvió a dar la misma orden - ¿Qué haréis vosotros?

-Iremos a Pora, e informaremos sobre la desaparición del señor Cohem y los disparos.

Escucharon los pasos de sus compañeros, separarse de ellos. Johann seguía en shock, Ancel no paraba de sangrar, pero seguía abrazándolo con fuerza, para protegerlo. El alfa estaba asustado, no se esperaba aquel ataque, ni el derrumbamiento de aquellas rocas.

-¿Cómo iremos a Pora? – Ancel lo miro con el rostro completamente desfigurado por el dolor – Capitán.

-¿Te han disparado? – negó con la cabeza – Te guiaré para poder llegar a Pora.

La mochila de Johann se encontraba cerca de ellos, el omega estaba guardando la chaqueta de su compañero, antes de que Ancel se abalanzará hacía él. Cargo la mochila en su espalda y ayudo al alfa a ponerse de pie.

No sabían con exactitud cuánto tiempo estuvieron caminando, Ancel dejaba un pequeño rastro de sangre con cada paso, llego a perder el equilibrio en varias ocasiones, pero le pidió a Johann que siguieran caminando, estaba seguro de que encontrarían una cueva cerca de allí, solo debían seguir avanzando.

Amor en la guerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora