El capitán respiraba cada vez más deprisa a medida que se acercaba a Stroi, Wagner lo observaba a su lado sin decir nada. Ancel se había quedado sin uñas hacía ya unas horas, estaba demasiado nervioso, sus hombres pensaron que le iba a dar un ataque al corazón antes de ver a Johann.
-Capitán...- Carsten le mostro una sonrisa amable, el alfa confiaba poco en sí mismo, desde que vio que podía ser débil contra Johnson – Todo irá bien.
-Ya lo sé, Marx, si hacemos lo que está en los planes, nadie sufrirá ningún daño...- el alfa asintió – No quiero que os pongáis en peligro, si notáis que algo no está bien o tenéis miedo, huid.
-Capitán, nosotros también queremos ayudarte a encontrar a Johann... - Ancel cerró los ojos al escuchar el nombre del omega – Él es nuestro compañero.
-Vosotros estaréis en el grupo de Wagner, solo vais a entrar si es seguro, entendido – Rolan negó con la cabeza – Zillah, no me hagas repetir los planes.
-Simons es mi compañero, aunque no hayamos estado juntos desde el principio, él es mi amigo, Ancel – Carsten trago saliva cuando llamó al capitán por su nombre – No pude hacer nada por Doham, déjame hacer algo por Simons.
-No vas a ponerte en peligro, Zillah – el beta lo reto con la mirada – Vas a seguir mis órdenes, aunque no quieres, te quedas fuera con Wagner y Marx.
Rolan estiro su pierna hasta llegar a Ancel, el beta golpeo al capitán en la espinilla sin compasión y sonrió con malicia cuando este se quejó. Cuando Ancel lo miro de nuevo, el beta volvió a su pose desafiante, conocía a Ancel, incluso mejor que Wagner – o eso creía -, el vice-capitán le ordeno callarse.
-Ancel Hoffman, siempre has sido realmente estúpido, desde que empezaste a entrenar conmigo, un estúpido incompetente – Wagner miro de reojo a Rolan para que se mantuviera en silencio – Si tengo que decir la verdad, siempre me has parecido bastante ingenuo y estúpido, muy estúpido ¿ya te he dicho que eres estúpido? Capitán – le pregunto con ironía – Pero eres al estúpido que he decido seguir, y yo puedo ser el triple o el cuádruple de gilipollas, me he cansado de llamarte estúpido, lo siento – se rio – Y como gilipollas, decidí seguirte aunque pudiera morir.
-No tienes que hacerlo, no está en tu contrato, Zillah – el beta negó con la cabeza, cansado de lo cabezota que podía ser Ancel – Será mejor que te mantengas lo más alejado posible de Johnson.
-¿Cómo te llamaba el mayor de joven? – Rolan apoyó su mano sobre la barbilla y cerró los ojos, para poder pensar mejor – A sí... Alcornoque.
Carsten comenzó a reírse, no podía mantenerse serio viendo las caras que estaba poniendo Ancel, el capitán no era tan expresivo con ellos, a menudo solo tenía la mirada de "Quiero mataros a todos", pero nunca cambiaba. Ahora la mirada de "Quiero materos a todos", paso a la mirada de "Quiero matar a Zillah Roland". El alfa oculto su rostro detrás de sus manos para que no que no desearan matarlo a él también e intento mantenerse calmado.
-¿Has terminado tu discurso, Zillah? – el beta negó con la cabeza – Sigo diciendo que os quedéis fuera con Wagner.
-Wagner ¿Se lo dices tú o se lo digo yo? – el vice-capitán aparto la mirada en cámara lenta – Tu viviste con él, sabes como de estúpido puede ser ¿recuerdas cuando quiso salvar a ese gato? Mintió a Karl sobre sus heridas, para no decirle que se había caído del árbol ¿Crees que ahora también va a ser tan tonto?
-Rolan, deberías hacerle caso, ahora los dos estais en rangos diferente, él es tu superior, acata sus órdenes – el beta puso los ojos en blanco – Por favor, deja de llamarlo así.
-Tenemos al estúpido y a su seguidor, dos estúpidos en potencia, por Dios – puso su mano de manera dramática sobre su frente y suspiro de manera exagerada – Carsten lo que tenemos que aguantar, estos dos me van a matar del disgusto.
ESTÁS LEYENDO
Amor en la guerra
Teen FictionJohann decide entrar en el ejército para proteger a su hermano menor. Los omegas tienen prohibido ingresar, así que quiere hacerse pasar por beta. Tendrá que hacer todo lo posible, para que no se den cuenta de su secreto. Un imprevisto hace que lo...