CAPITULO 84

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Jire abrazo el cuerpo de Shilo, su compañero estaba perdiendo la vida poco a poco y no sabía cómo ayudarlo, aunque hubiese cubierto su herida con su camisa y la presionara todo el tiempo, la sangre no paraba de salir

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Jire abrazo el cuerpo de Shilo, su compañero estaba perdiendo la vida poco a poco y no sabía cómo ayudarlo, aunque hubiese cubierto su herida con su camisa y la presionara todo el tiempo, la sangre no paraba de salir. Shilo estaba frio y ya no respondía a sus preguntas, sus manos temblaron cuando dejo de sentir el latir de su corazón.

-No es un juego, Shilo, deja de hacerme esto, por Dios – el sudor caía por su espalda, mientras regañaba al alfa – Shilo, te quiero ¿me escuchas? No querías que te dijera que te amaba, te amo, estúpido alfa.

Su herida le dolía, pero no quería pensar en eso, Jire tampoco quería que Shilo se fuera así de rápido de su vida, iba a luchar por él, aunque no sabía si era buena idea. El tiempo se acababa y con el, las esperanzas de que pudiera sobrevivir.

El grito de Greta volvió a sonar un par de veces más y después escucho la voz de Johann, quería pedirle ayuda a él, pero algo lo detuvo. Al acercarse a la puerta olió unas feromonas desconocidas para él, no parecían seguras y no podía poner en peligro a Shilo.

Escucho la discusión de Johann con su hermano, bueno... Solo hablaba Gunter, el omega se había quedado de piedra al verlo, si no estuviera marcado podría oler sus feromonas, Jire no estaba muy seguro de cómo se encontraba Johann.

Varios disparos sonaron, después vinieron más gritos y terminaron con el silencio total. Jire pensó que había terminado, pero no salió, las feromonas de aquellos alfas seguían estando por todo el lugar. Nadie hablaba, pero estaba lleno de enemigos.

No iba a arriesgarse.

-Johnson, quiere que nos lo llevemos a él... - Jire conocía la voz que estaba hablando – Nos iremos, cuando lo llevemos, podemos dejarla a ella aquí.

-Si no la matamos, hablara... - volvió el silencio, Jire temió por la vida de Greta – Simons ¿Qué debemos hacer?

-No podemos matarla, Johnson también la necesita, pero no ahora...- el alfa trago saliva – Déjala aquí, no crea que pueda hablar de nuevo.

La mirada de Greta mostraba terror, la pequeña se quedó mirando a Lenny cuando paso por delante de ella, el beta le sonrió con malicia y se acercó a Johann. Su amigo estaba luchado para protegerse, pero no podía moverse.

-Llevémoslo, ya hemos hecho demasiado...- se burló otro de los alfas – Tenemos que dejar a alguien con vida.

Unos pasos se acercaban dónde estaban ellos, el corazón de Jire estaba a punto de estallar, se apartó de la puerta y abrazó a Shilo para protegerlo. La puerta no se abrió, podía sentir a los enemigos delante de él, burlándose, lo más seguro, por haber sido un cobarde. Oyó por última vez la voz de Greta y después varios disparos.

El mundo se detuvo, al igual que su respiración y el corazón de Shilo. Jire sintió muchas cosas a la vez que no entendía, incluso siguió sin respirar aunque lo necesitara. Quería gritar, pero no le salía la voz. No estaba muy seguro si habían matado a alguien, y si era así ¿A quién sería? Las lágrimas comenzaron a caer por sus mejillas sin que pudiera controlarlas, los intentos de pronunciar alguna palabra se vieron rotos al notar que no podía.

Amor en la guerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora