CAPITULO 129

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Ancel preparaba la habitación de los mellizos con la ayuda de Evie, Johann quiso contarles la buena noticia después de preparar una pequeña fiesta para todos, incluso Liam fue a esa cena – Johann sospechaba que hacía tiempo que era pareja de Greta, pero ella no decía nada -, Ancel llamó a su hermano la misma que supo de la noticia, estuvieron varias horas hablando, Walter le dio algunas lecciones para ser un buen papá, Gian no tardó en responder a aquellas palabras, el alfa daba consejos que él no seguía. También llamaron a Jaziel, al día siguiente, cuando Johann estaba más tranquilo, el omega quería hablar con su amigo a solas, así que Ancel tuvo que irse de su lado por algunos minutos.

-No creo que mi hermano quiera que los bebés duerman en una habitación solos – le advirtió Evie, cuando Ancel estaba montando las cunas – Nuestras madres no nos enseñaron eso, dormimos con ella hasta casi los cinco años.

-Cuando era bebé dormía en la misma habitación que mi hermano... - confeso el alfa – Nunca nos pasó nada malo, mis abuelos me dejaban dormir con él, Walter me cuidaba si le apetecía, era muy pequeño en ese momento.

-Tendrás que llevar las cunas a vuestra habitación, sería mejor que lo hiciéramos al terminar – Ancel no veía mal que los bebés durmieran en otra habitación – Johann te las hará cambiar de lugar cuando las veas, puedo ayudarte a llevarlas, estoy aquí contigo.

Ancel le confió a Liam y Greta el cuidado de Johann, mientras él preparaba la habitación, el omega había insistido en ayudar pero Ancel no le dejaba, las palabras del doctor Meyer en la última revisión, no le gustaron. Johann estaba demasiado débil y su embarazo era complicado, aunque ninguno de los tres estaba en peligro, era mejor que no hiciera grandes esfuerzos durante el primer trimestre. Johann se enfadó con Ancel cuando le dijo que no podían montar las cunas juntas.

-Johann se veía molesto está mañana... - Evie lo miró con una sonrisa pícara, por la cara que puso Ancel pudo adivinar que el alfa tenía algo que ver con el berrinche de su hermano - ¿Qué le pasaba? No ha dormido bien.

-Durmió toda la noche, los bebés se portaron muy bien está noche – sonrió Ancel – Pero lo enfade está mañana, lo hice por su bien, el doctor Meyer dijo que debía guardar reposo en el primer trimestre.

Evie se aguantó la risa mientras escuchaba la explicación de Ancel, no solo se había enfadado con él por no dejar que montara las cunas, sino porque el doctor Meyer le prohibió muchas de las comidas que le gustaban. También culpo a Ancel por haberse despertado tarde.

Ancel se asomó por la ventana que daba al pequeño jardín, Johann estaba sentado en el banco mientras observaba a Greta y Liam, parecía más tranquilo que por la mañana, incluso sonreía un poco. Evie apoyó la mano sobre el hombre de Ancel, el alfa se estaba preocupando demasiado por Johann, si lo vigilaba siempre su hermano terminaría enfadándose más de lo que estaba. Que le dijeran que debía hacer reposo, no le gustaba para nada, Johann necesitaba moverse para poder relajarse.

-Lo están cuidando bien, mira, incluso le dieron una manta para que cubriera sus piernas – sonrió la alfa, pero Ancel veía algo extraño en el omega – Mi hermano está haciendo reposo como le dijiste, está tranquilo acariciando su vientre.

-Sospechoso... - entrecerró los ojos y se acercó más a la ventana, Johann no podía verlo desde donde estaba pero él si – Muy sospechoso, Evie. Johann nunca está tan tranquilo, observa – señalo al omega – Mira sus piernas – Evie rio – Sigue enfadado, mueve mucho las piernas cuando está enfadado y sus cejas están fruncidas, seguramente estará pensado algo perverso.

-Estará esperando a que Greta se distraiga para arreglar las cosechas que no ha cultivado – puntualizo Evie y sonrió – Está mirando a ese punto, los tomates siguen sin cosechar y es lo que primero prepara Johann para vender, Greta no se ha dado cuenta.

Amor en la guerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora