¿Puedo pedirlo todo en un deseo?

¿Eres feliz?

29 de noviembre

Serkan está dando vueltas en su cama... el tiempo no pasa... hace dos horas que son las 4 de la mañana y no pasan los minutos.... Cada vez que mira el reloj de nuevo la hora sigue parada. Decide levantarse, sabe que no va a volver a dormirse.

Sale del gimnasio duchado va a Art Life como si fuera un día normal, nadie le dice nada. A las 9:20 sale de la oficina y pasa por la cafetería que se ha vuelto su preferida para comprar dos cafés. A las 9:40 entra en las oficinas del Holding... no debería sentirse así... pero aunque ha hecho cosas preciosas con el holding desde que Alptekin lo dejó, no para de sentir que no es su sitio. Sube a lo que es su oficina para tenerlo todo dispuesto para ella.

Eda se levanta tarde, no se durmió hasta las 4 de la mañana, son las 9 y Kiraz salta en su cama. Cuando Eda ve la hora salta de la cama.

Kiraz, hoy te vistes sola.... Por favor, tengo una reunión importante no puedo llegar tarde.... Corre te dejaré con Murat de paso.

A las 9:40 sale de casa deja a Kiraz en la floristería y pasa por la que una vez fue la cafetería de los dos... compra dos cafés cogiéndolos de las manos del camarero que le mira con una enigmática sonrisa.

Cuando está abajo en la entrada recuerda la ultima vez que estuvo aquí con Serkan cuando le dijo que si se dormía se despertaría casado un con dos hijos.... Bueno ni casado ni con dos hijos... pero una..... aparta esos pensamientos, solo pide poder ser civilizados... la ultima vez que estuvieron frente a frente fueron crueles el uno con el otro. Ella se fue a otro país y él se aisló del mundo, de sus amigos para vivir solo del trabajo....

Betul le sonríe cuando la ve.

Srta. Eda... está usted preciosa como siempre.... Le espera...— dice la asistente.

¿Que humor tenia?— pregunta Eda con una sonrisa. Le sudan las manos, le tiembla el cuerpo y se le dispara el corazón solo de pensar en el.

Taciturno... — sonríe la asistente cogiéndole el cafe y abriendo la puerta.— La Srta. Eda, Sr Serkan...

Ella alcanza a verlo, con las manos en los bolsillos mirando por una ventana mientras le da las gracias a Betul, cuando se gira y la mira, quedan enganchados con sus miradas.

Vaya Eda Yildiz... para ti no ha pasado el tiempo... sigues preciosa...— le dice acercándose a ella.

Solo les separa medio metro cuando ella sonríe y cierra la distancia entre ellos abrazándose a él.

Serkan la aprieta respirando de su olor, su paz, su cercanía.

Eda le abraza agradeciendo su salud, y robando ese calor para cuando le pueda el frio.

Cuando se separan los dos tienen los ojos brillantes se miran y se sonríen. Serkan le ofrece el café. — hemos tenido la misma idea —sonríe cuando ha visto los dos vasos que ha entrado Betul. — ¿quieres sentarte?

Claro.

Eda se sienta en una de las sillas que quedan ante la mesa. Serkan se sienta en la de al lado, no quiere la formalidad de una reunión. Quiere que ella acepte el proyecto.

Él se apoya en el respaldo y cruza las piernas. — Bien Eda Yildiz — ¿que es de tu vida?¿que te ha traído a Estambul?¿un trabajo?

Eda sonríe.— no. Necesitaba volver... llevo aquí 6 meses...

6 meses aquí... — ella no le ha buscado... no sabe porque le duele tanto. 6 meses —¿Melo?¿Ayfer? Se que Ceren y Ferit tienen dos hijos... Engin y Piril se relacionan con ellos... se ven una vez al año...son felices.... Pero no se nada de Melo ni de fifi ni de tu tia....