Capítulo 20

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Un mes después...

Pov SeokJin

-Qué linda estás mi amor- halagué

Hoy iríamos a firmar los documentos de casamiento, pues queríamos hacerlo antes de que naciera el bebé cuál lo hará dentro de apenas unas semanas. Luego lo celebraríamos, de eso me encargaré yo.

El ministro de Defensa y el presidente habían llegado a un acuerdo con el norte, así que según medios oficiales la persecución hacia el submarino había desistido. Pero Jeon aún no daba con el.

Se había estado moviendo de país en país y no lograba alcanzarlo cuando ya se había movido nuevamente.

Pero según la última vez que hablamos había obtenido información sobre su punto futuro, así que se dirigía allá en un KC390 cual lo llevaría hasta la  ubicación y dejaría caer en paracaídas al agua.

-Tu también te ves muy bien. Dan ganas de comerte justo ahora.

-Tu hermana está fuera- dije con cansancio. Las habitaciones de los niños estaban listas y estas habían ido a comprar ropas y demás. Cada tanto las sacaban y me hacían verlas. Luego volvían a acomodarlas.

Nos habíamos quedado aún así en el departamento de Sofía pues así esta no se quedara sola al no contar el mío con espacio para los tres con la ahora reformada habitación del bebé.

Salimos del cuarto ya vestidos y emprendimos camino hacia el ayuntamiento.

-Quiero almorzar fuera. Y pasear- dijo Kim.

Pasear, y luego se queja porque le duelen los pies y yo debo masajearlos por horas.

-Almorzaremos los tres y luego Song pasará a buscar a Sofía para llevarla al hospital.

-¿Tienes cita?- su hermana asintió.

-Pero puedo ir en taxi no...- la callé

-Song te llevará como es costumbre, ya le envíe el mensaje, también esperara por ti.

-¿No es mucho tener un militar de chofer? Me da pena con el.

-Se le paga para estar a mi servicio y a él esta.- le reste importancia.

...

La firma de los papeles de casamiento fue rápida y antes de lo esperado ya estábamos frente al restaurante.

-Desde ya les digo, nada de postres y cero hamburguesas o pizzas.

-Ya matanos- se quejó mí ahora esposa.

-Cuñado, de todos modos la comeremos- dijo divertida

-Si, pero le encanta joder. Por eso me gusta más cuando salimos con Song, incluso nos brinda malteadas.- eso no lo sabía.

-Song va a renunciar dentro de poco.

-A no, no harás lo mismo que con mi entrenador.

-Pensé que era mujer

-Era hombre, lo despidió el primer día.

-Renunció- dije con lentitud.

Comenzamos a comer y logré convencerlas  de comer la hamburguesa sin pan y en lugar de este lechuga. Aceptaron pero acabé cediendo con el postre.

Song llegó poco después al restaurante para recoger a Sofía, le hice una señal para estar al pendiente todo el tiempo. No por algo, porque en efecto. ¿Que podría pasar? Solo soy paranoico. Aunque está el hecho de lo que me enteré de su antiguo trabajo como periodista.

Con Kim paseamos unos minutos y luego nos sentamos en el parque a conversar. Era lindo verla en esa faceta de embarazada, estaba más tierna aunque no lo reconozca y más encantadora también. Será una buena madre.

Mi teléfono se escuchó en algún momento en el que me hablaba sobre los posibles nombres para la niña de su hermana y lo tomé aún con ella envuelta en mis brazos.

-Si Song

-Solo le aviso que puede llámarme cuando guste, voy camino a la central.

-Te dije que la esperas Song

-No... señor. Pero

-¿Que mierda pasa?

-Usted mandó un mensaje diciendo que pasaría por ella, que me retirara.

-No hice tal cosa- puse el teléfono en altavoz y busqué en mis mensajes solo estaba el último

"Pasa por Sofía a esta ubicación, debes llevarla y esperar por ella."

Luego recibí un mensaje de él, era una captura de pantalla sobre nuestra conversación, tenía el antes descrito y otro más

Puedes retirarte Song, yo pasaré por mi cuñada.

-Mierda, no envíe eso. Regresa allá y tienes permiso de abrir fuego.

-¡¿Que pasa SeokJin?!- no respondí, ni siquiera yo lo sabía. -¡SeokJin es mi hermana! ¿Es ella?- la tomé de la mano y caminamos hacia el coche.

Antes de lo esperado íbamos camino al hospital donde se trata mientras llamaba refuerzos, mi número aparecía igual pero en letras blancas en el dichoso mensaje, era lógico que habían hackeado mi número. Algo pasaba.

Temí por ella.

Hace unos meses me enteré del verdadero motivo del porque no trabaja en el periódico, había renunciado luego de dar a conocer a sus altos mandos el hecho de que su superior directo ocultaba información sobre el operativo del que Taehyung fue partícipe, no creí que fuera tan grande como para que buscaran venganza o quizás es por algo que tiene relación con mi hermano.

Si es así debe haber un topo en la central, uno que sepa sus horarios, quien iba por ella y que días.

Cuando llegamos no estaba, las cámaras de seguridad solo mostraban una camioneta negra que por la placa logramos relacionar con el Norte.

Se la hacían llevado

Ahora más que nunca necesitamos a Taehyung





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