Había pasado una semana desde que decidí pelear por ella, una semana en la que cada día se quedaba conmigo, teníamos una pequeña rutina.Cuando salía del trabajo se cambiaba de ropa (incluso tenía algunas en mi cuarto por petición mía) luego la llevaba al hospital y esperaba algunas horas por ella.
Cuando salía cenábamos en algún lugar lindo y luego íbamos al campamento nuevamente hasta el día siguiente, hacíamos el amor, por mi parte así era.
Y pese a que no hablábamos sobre lo que teníamos me sentía a gusto, también lo prefería así. Tenía miedo de que si la conversación llegaba la perdería.
Aún estaba en mi la sensación de saber que mi hermano se hizo a un lado y que quizás por eso esta me presta más atención. La duda de saber si me habría elegido a mi si él no lo hubiese hecho.
Cuando esta salió del cuarto esa mañana continué un rato más en mi cama hasta desperezar, luego me preparé para comenzar mi día.
Fui a mi oficina para enfrentarme al mar de papeles que debía firmar.
Entre ellos estaba una solicitud de la milicia en Estados unidos, tenían un programa de una año donde ofrecían entrenamiento y preparación a dos cadetes, eso llamó mi atención.
Se suponía que debía yo elegirlos, tomé mi teléfono fijo y mande a llamar a SeoJoon, en apenas unos minutos estábamos en mi oficina discutiendo a cuál enviaríamos, quien lo merecía.
-Kim Bomion será- dijo este por último y asentí. Elaboramos una tabla con sus fortalezas y él era el apropiado. -¿Hablaras con ella?- asentí.
Nuestra primera opción era Kim pero debía cerciorarme de que en verdad lo deseara porque se que aceptó estar en el campamento solo porque el hospital donde está su padre está en la misma cuidad, y para esto no solo tendrá que irse por una año, sino debe ir a otro país.
Piqué mi teléfono para que mandaran llamarla mientras esté se retiraba para comunicarle al otro prospecto sobre el programa.
Esta tocó poco después.
-¿Ya me extrañabas?- dijo en forma de broma, aún así veía algo de tristeza en su mirada. Ha estado así desde hace unos días.
-De hecho si. Siéntate- me puse de pie para buscar los documentos.
-¿Es de trabajo?- asentí -Prefiero estar de pie- la miré inquisitivamente -Hay rumores- reí.
-Qué más da. Siéntate, ahora- puso los ojos en blanco pero aún así lo hizo.
Le mostré los documentos y prácticamente carcajeo -¿Que cosa es divertida?
-¿Tan rápido quieres deshacerte de mí?- negué mientras me acercaba a esta.
-Es una excelente oportunidad para una excelente cadete.- Tomé asiento frente a ella sobre mi escritorio, -Si lo que vas a extrañar es esto- tomé su manos y la guíe a mi hombría, apretó de manera juguetona -Puedo llevarlo a donde estés.
-¿Pide que vayamos juntos?- dijo con incredulidad
-Digo que si quieres ir y si me extrañas puedo ir allá y estar contigo. Puedo hacerlo.
-Estoy aquí para ver a mi padre, de lo contrario estaría en Daegu, y me pide que considere un programa de un año en el exterior.
-Es una oportunidad única
-Eso lo se- dudó -Pero él está muriendo y aunque luego de que me enlistara nos alejamos él es mi padre, el mismo que me enseñó a andar en bici, quien me cuidaba si enfermaba, quien me crió.
-Lo entiendo, solo piénsalo. De todos modos será hasta dentro de dos meses, llega los documentos, hazte los exámenes y si aún está vivo y no quieres ir puedes renunciar.
-¡Qué cruel eres!, acabas de decir si aún está vivo, ¿es en serio?
-Lo siento, no tengo mucho tacto- reí
-Eso lo tengo claro- me miró mal pero aún así se puso de pie y se ancló a mi cuello.
-¿Tu estómago está mejor?- asintió -Te dije que no comieras ese pescado, en esta época hace daño.
-Lo se, pero se veía muy rico.
-¿Lo harás?- quise saber
-Lo haré
-Excelente, cuando terminen contigo serás aún mejor que yo- me golpeó en el hombro en modo de queja y reí. -Vamos a enfermería.
-¿Por?
-Haremos los exámenes cuanto antes.
Salimos de mi oficina e iba tan plácidamente que no noté que llevaba ambas manos entrelazadas sino hasta que esta las alejó como si quemara, cuando salimos a cenar solemos tomarnos de la mano, pero aquí en el pelotón esta mantiene las distancias, ¡como si no supieran todos que dormimos juntos!
Sacaron sangre, tomaron muestra de saliva. Luego le hicieron un examen completo y cuando estuvo lista pasó nuevamente a mi oficina para llenar el formulario.
Los exámenes estaría para dentro de una semana por lo que teníamos tiempo, pero aún así quería que todo estuviera listo.
-¿Si?- dije cuando tocaron la puerta de mi oficina, me había molestado, la tenía sentada sobre mi regazo mientras nos comíamos la boca en uno de mis descansos y nos interrumpían para supongo traer más papeles para firmar, justo ahora, a minutos de mi hora de salida.
-Señor, tengo los resultados de sangre de Kim- fruncí mi ceño, me puse de pie y abrí mi puerta lo suficiente para tomar los documentos.
-Pensé que estarían listos dentro de una semana.
-Damos ese lapso de tiempo por los demás, estos están en unas horas, pero es que estos salieron..- dudó -Debería verlos- la doctora se marchó luego de eso, volví mis pasos luego de cerrar la puerta y esta había tomado asiento en su silla correspondiente.
-¿Salió algo mal?- negué
-No lo se- abrí los documentos entre mis manos. Tenían varios términos que sabía solían usarse para las infecciones o enfermedades de transmisión sexual, todas negativas. No entendía.
La última con las siglas HCG estaba positivo. Leí bajo las siglas, prueba de embarazo.
Busqué mi prueba de embarazo para esto 🤭 Valoren mi esfuerzo
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Solo Mía
FanfictionUno ha cedido toda su vida, por sus amigos, por su familia, ante sus hermanos, ante los deseos de su padre, pero ya no más. Harto de ceder, harto de no tener a alguien que vele por él como él lo hace por los demás decidió enfrentarse a su hermano po...