Capítulo 1

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Abrí los ojos con pesar, me dolía todo y no era para menos. Recuerdo haber recibido una bala en la pierna apenas hace dos días. Era apenas superficial pero aún así dolía como los mío demonios.

Las paredes blancas y la luz del hospital me secaban. Había sido una mala noche.

Recuerdo las balas los gritos.

Habíamos armado un operativo de rescate, ya que según nuestros contactos infiltrados en el norte la tenían cerca de la frontera.

Fue un desastre, Jeon armó un equipo. Teníamos tiradores, estrategas y aviadores. Recuerdo sólo el nombre de uno de ellos. Min el la había sacado, también su hermana.

Cual al fin logró dar con ella nos avisó para cubrirle la espalda. Me precipité a su encuentro y recibí una bala que iba para ella.

Los mal-nacidos querían matarla.

No sabíamos el porque, pero mi hermano hablaba sobre algún ajuste de cuentas hacia mi.

Ella estaba en peligro por mi, mi hija.

La habían tenido dos semanas retenida, unas semanas en la que según me dijo mi hermano la interrogaban para ver si sabía algo más sobre los involucrados en el operativo del que fui partícipe.

Era mi culpa, estaba claro.

Cuando el operativo terminó y luego de estar a salvo Jeon se marchó. Según se tenia más de un mes fuera de Busan, pidió no decir nada a mi hermana, al menos no antes de contarle el.

La noche anterior me avisaron que la tenían en observación pues el parto parecía querer adelantarse. Apenas tenía 8 meses justos. No debía.

Su hermana también estaba hospitalizada por el hecho de encontrarse mal de los nervios por el secuestro de esta y apenas ayer en la tarde le desconectaron el suero y los aparatos. Solo esperaban a que se presentara el parto de manera natural.

Tomé a siento como pude encontrando a mi hermana frente a mi.

-¿Como estas?

-Adolorido

-Solo a ti se te ocurre ir a algo así.

-Es mi hija

-Aún así, no estás preparado para el combate terrestre. No es lo tuyo.

-¿Como está Sofía?

-Igual- asentí

-Mi silla- me acercó la silla de ruedas para sentarme en ella.

Me metí al baño y lave mi rostro. Cepillé mis dientes y cuando estuve listo me dirigí al cuanto donde la tenían.

-¿Como estas?- pregunté apenas se me dio entrada a su cuarto. Su hermana estaba acompañada de SeokJin. Ambos en uno de los sillones.

-Mejor, gracias.- asentí -¿Tu?

-Mejor- la verdad es que no hemos hablado prácticamente nada, apenas un cómo estás luego de todo esto.

Escuchamos a su hermana gritar y luego un grito ahogado de SeokJin. Sus ojos estaban abarrotados de lágrimas.

-Mierda, llama a enfermería Sofía- gritó mi hermana antes de acercarse para socorrerla.

-¡MALDITO MALDITO MALDITO!- mierda

Estos salieron con una enfermera. Se había puesto de parto cosa que alteró aún más a su hermana, dándolo a notar los aparatos que tenía monitoreando a la bebe.

-Sofía Mírame. Mírame por favor. Esta bien ¿si?.

No respondía solo lloraba. Mi hermana entró poco después. -Tranquila Sof, ella estará bien. Es tiempo ¿recuerdas?- Esta asintió. -¿Quieres comer?- negó -¿Que quieres? ¿Te abrazo?- asintió

-Gracias- decía en medio del abrazo. Me sentía algo fuera de lugar pero luego de un rato se durmió en brazos de mi hermana.

-Debes ser más cariñoso con ella, la está pasando mal.

-No se como ¿si? Hace unos días supe que sería padre. Es nuevo para mi.

-Si, ahora está a punto de tener a tu hija y está asustada. Su hermana está en labor de parto. Fue secuestrada- enumeró y asentí

-Está distante

-Claro que lo está. La dejaste sola.

-No sabía.

-Lo se, pero no fue muy maduro de tu parte irte de esa manera sin siquiera arreglar las cosas. La abandonaste indirectamente, estaba sola y embarazada en medio de la nada ¿y sabes porque?, porque te esperaba. Creía que si se iba de allá no tendría como ubicarte.- asentí -¿Jungkook te golpeó muy fuerte?- asentí.

-¿Solo sabe hablar luego de los golpes?- dije haciendo una mueca de dolor al recordar como amaneció mi cuerpo al día siguiente.

-Solo contigo al parecer- eso la hizo reír.

-Lamento haberlo puesto en peligro.

-Descuida, me alegra que te haya ayudado. A ella también- la señaló -Lo que me molestó fue el hecho de que no me dijeran nada hasta luego de pasado todo. Me dijo lo qué pasó al día siguiente de regresar- dijo cansada.

-Gracias por venir- asintió -Se que debes estar con mucho trabajo Mayor Jeon.

-Mi capitán se hace cargo- le restó importancia. -Aún así creo que debo irme mañana- asentí

-Debes extrañar los niños- continuamos hablando. De cualquier cosa y ninguna, solo hablando. Poco después de una hora llegó SeokJin a la habitación, hizo tanto alboroto que la despertó.

-Es hermoso- dijo con una gran sonrisa. -Enorme, nació enorme. Tuvieron que hacer un corte- dijo con orgullo.

-Quiero verlo- mi hermano negó

-No puedes moverte de aquí. Pero cuando lo revisen pediré para que lo traigan. ¿Bien?- asintió

-Tienes la cara roja- señalé y mi hermana se carcajeó

-Me golpeó, mucho- ouch -Haló mi cabello, me pellizcó. Intentó morderme, me maldijo también.

-Es normal.- dijo Suran

-Solo con ustedes par de fieras, estoy seguro que con Sofía no será así- pronunció este.

-¿Crees que no necesite cesárea?- dijo esta viendo su barriga. -No es tiempo y puede que ella....

-No pienses en eso. Estoy seguro que con todo lo que comías la bebe es aún más grande que SeokMi, dalo por hecho. Además, si deben hacerte cesárea lo importante es que esté sana. Iré a ver a Kim, ¿pueden dejar la puerta abierta para cuando pase Sofi la vea?- mi hermana asintió.

Este le regaló una leve caricia a la barriga de esta y luego la besó en la frente para entonces marcharse.

Una vez más me sentía fuera de lugar, como si no perteneciera.



¿Recuerdan ese viaje en el final de Di gracias? Pues ese 😈


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