Capítulo 22

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Habíamos regresado hace unas semanas, con Sofía estábamos bien. Había regresado a trabajar pero no me sentía cómodo de dejarla ir sola, así que había puesto vigilancia para ella por un tiempo.

Tae decidió no hacer su siesta de la tarde, así que obvio dormirá temprano, estuve pensando sobre en dejarla con mi hermano y salir a una cita con Sofia.

Hice la reservación en un lindo lugar y espere por que llegara para invitarla.

-Hola amor- besó mis labios apenas estuvo dentro del departamento -¿Y Tae?

-Se acaba de dormir- la halé hasta sentarla conmigo, esta soltó su bolso y celular y se abrazó a mi cuello.

-Me alegra, saldré en un rato.

-¿Donde?

-Yoori está en la ciudad y vamos a salir a beber un rato las tres.

-Pensé que no podías beber si amamantas.

-Si puedo, solo debo botar esa leche luego de extraerme.- ¡mierda!

-No llegues muy ebria, te ayudaré.

-¿A extraerme?- dijo divertida. -¿Como sostendrás el aparato?- piqué sus labios.

-Ve a cambiarte, ponte sexy.

-Se supone que deberías mandarme a cubrir.

-No, quiero que vean lo que me como cuando vaya por ti.- apreté sus piernas y deslicé mi mano levemente por sus muslos.

-No tienes que ir, podemos venir en taxi. Así te quedas con la bebé y me esperas desnudo sobre la cama.

-Mandaré por ti.

-¿A quien? ¿Al alto y fortachón que me sigue a todos lados?- asentí

-¿Tu o Kim?

-Ambas, deberías buscar a uno que llame menos la atención, no que se parezca a Hulk.

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-Me aburro, ven.- dije al teléfono, las chicas ya se habían ido, las había mandado a llevar.

-Veo revistas de novia.

-¿Estas loco? ¿Te crees ama de casa o algo?

-Debo organizar una boda genio.

-Contrata a alguien, que vergüenza ser tu hermano- cerré la llamada y poco después entró por la puerta con su hijo en brazos.

Me lo tendió y siguió en lo suyo, tenía una en que las modelos portaban los vestidos de una marca, comencé a hojearla.

-¡Mierda!

-¿Que?

-No cancelé la reserva. ¿Tienes hambre? Pediré para entrega.

-Ya cené

-Aún así pediré, no quiero hacer la cena.- tomé mi teléfono y luego de pedir para entrega pagué por el servicio.

-Vamos a hacer boda doble.

-Qué cosa de mal gusto.- lo vi alzar una ceja. -Gemelas, hijos con diferencia de menos de 24 horas entre sus edades, vivimos en frente, ambos nos quedamos cuidando de los bebés ¿y ahora quieres boda doble?, solo falta que intercambiemos.- negué

-Sería lindo, además a ellas le encantaría la idea, gastaríamos menos y entrarían juntas al altar, sería hermoso. Piénsalo.

-¿Quien cuidará de nuestros hijos por la noche de bodas? ¡Porque yo no!

Solo Mía Donde viven las historias. Descúbrelo ahora