capitulo 67

4 3 0
                                    

Hilary escuchaba horrorizada, al escuchar que la golpeaba intento abrir la puerta, estaba dispuesta a ayudarla pero no abría, estaba bloqueada no sabia que hacer. Entonces corrió al teléfono pensaba llamar a James, era lo único que se le ocurrió en el momento. Tomo el teléfono y marco a su celular.
“Hola soy James ahora no puedo contestarte pero déjame tu mensaje y te devuelvo la llamada” Contesto el buzón.
—No, no, no por favor no—Dijo Hillary desesperada, marco a su casa, sonaba, sonaba pero nadie contestaba, entro la grabadora y decidió dejarle un mensaje.
—James por favor ven de inmediato Justin lo sabe todo, la va a matar por favor ven le esta pegando horrible—Dijo entre lagrimas y colgó. Minutos después todo fue silencio.
Beka estaba en la cama tirada, la colcha estaba manchada de sangre la cual no paraba de salirle del labio y la nariz, con una mano se abrazaba, el cuerpo le dolía demasiado, estaba débil, los ojos le ardían de tanto llorar. Justin por su parte tenia ambas manos apoyadas en la pared y la cabeza agachada, estaba agitado y poco a poco se controlaba.
—Jamas creí esto de ti—Dijo por fin—Para ti hubiera sido preferible que yo me muriera… Tu y mi hermano— Apretó los ojos e hizo un gesto de asco. Se inclino y camino hacia ella, quien con los ojos cerrados seguía llorando en silencio, se sentó en la cama y acaricio suavemente su rostro golpeado, ella tembló al contacto de sus pieles, miedo temblaba de miedo— Olvídate del divorcio linda. Y si me entero de que tu y el malnacido de mi hermano se siguen viendo… los mato—Le dijo y la beso en los labios fugazmente, se levanto y salio de ahí.
Al bajar vio a Hilary rezando en la sala, ella lo miro sorprendida el se veía tan tranquilo, tan sereno, como si nada hubiese pasado.
—Voy a salir, creo que esta por demás decir que ella no puede salir de esta casa ¿Cierto?
—No se preocupe ella no saldrá a ningún lado—“Como si con la paliza pudiera o quisiera salir” pensó Hilary.
—Bien— Asintió y salio de la casa. Ella corrió a la habitación de Beka y la vio ahí tirada en la cama, llorando, temblando y sangrando.
—Señora— Corrió a ella y le vio la cara golpeada, tenia una cortada en el labio, la nariz un poco hinchada y un pequeño moretón en el pómulo izquierdo—Dios mio—Susurro. Sus muñecas estaban rojas eran las marcas de las manos de Justin cuando la sostenía con fuerza.
—Hilary—Dijo entre lágrimas.
—Tranquila señora, yo le ayudo—Le ayudo a acostarse bien en la cama, la recostó sobre las almohadas, se sentía muy adolorida. Hilary fue por el botiquín y limpio su rostro, por fortuna las heridas no eran graves pero si notorias, ella jamas creyó capaz a Justin de hacer algo así.
—Me lo merezco Hilary.
—No señora no diga eso.
—Es la verdad… Pero te juro que yo no pedí enamorarme de el.
—Lo se señora, su amor es puro, es verdadero no tiene porque sentirse mal—La consolaba mientras la limpiaba y le ayudaba a cambiarse de ropa.
James llego de la junta del consejo, entro a su departamento e iba maldiciendo pues su teléfono se había quedado sin batería.
— Estúpido teléfono, ya no sirve para nada—Se dijo mientras entraba, se quito el saco y lo aventó al sofá, fue a la cocina y se sirvió un vaso de jugo, se lo tomo disfrutándolo, la junta lo había estresado un poco, miro el teléfono y vio que tenia un mensaje. Se acerco y escucho la voz de Hilary llorando desesperada.
“James por favor ven de inmediato Justin lo sabe todo, la va a matar por favor ven le esta pegando horrible”
James sintió un enorme escalofrió recorrer cada parte de su cuerpo, era Hilary llorando desesperada, Justin sabia todo, ¿Cómo? ¿Cuándo? La estaba golpeando, “Mierda no” Pensó el, su mente analizaba las cosas a mil por hora, tomo su saco, iba a enfrentar a su hermano y a defender a Beka, la imagen de Justin golpeándola lo enfureció.
—Te mato—Susurro para si mismo y corrió a la puerta, abrió y sus ojos se abrieron como platos, encontró a Justin ahí parado quien lo observaba tranquilamente y sin expresión alguna.
—Hola James—James lo miraba sorprendido con los ojos bien abiertos—¿Puedo pasar?—James parpadeo varias veces como volviendo a la realidad.
—Claro… pasa—Logro decir, se hizo a un lado y Justin entro tranquilo cosa que sorprendió mucho a James. Justin observaba el departamento, era la primera vez que entraba.
—Muy lindo… me gusta—Le sonrió—Tienes buen gusto.
—Gracias—Dijo frunciendo el ceño ¿Qué mierda? Pensaba James.
—¿Dónde te la coges?—James abrió de mas los ojos y retuvo la respiración. Justin lo miro seguía muy tranquilo—Dime James… ¿Dónde te coges a mi mujer?
—Justin no es lo que tu piensas—Logro decir James.
—Valla… ¿Se pusieron de acuerdo?— Sonrió divertido—Eso mismo me dijo ella.
—Escucha… Yo jamas lo hice con mala intención, yo… yo la amo Justin. No se como, no se cuando, no se porque, solo se que la amo mas que a nada en este mundo.
—Habiendo tantas mujeres en este mundo, justo viniste a enamorarte de mi esposa. Eres un maldito infeliz ¿Sabias?
—Si lo se, pero no puedo hacer nada, mi amor por ella es mas fuerte que mi razón.
—Tienes agallas… Decirme todo esto en mi cara como si nada, wow.
—A eso viniste ¿No? No pretenderás que lo siga negando—Dijo seguro, ya era momento de poner todo en su lugar.
—Ahora entiendo porque no me hablabas de la mujer que te robo el corazón. Ahora todo tiene sentido. No es más que una maldita pe…
—¡CÁLLATE!... NO TE ATREVAS A INSULTARLA.
—Eso es lo que es… hermano... ¿Sabes que me pidió el divorcio? Bueno, obviamente lo sabes por que estuvieron juntos toda la noche—James frunció el ceño confundido ¿Cómo lo sabe? Se pregunto—¿Qué como lo se? No hubo ningún viaje a Chicago, estuve vigilandola todo el tiempo. Vi que llego aquí a tu casa, y no salio hasta hoy en la tarde, no sabes las ganas que tenia de venir y tocar a mitad de la noche cuando seguramente tu te la estabas cogiendo de lo mas tranquilo.
—Ella ya no te ama.
—Si me lo dijo, esta enamorada de ti— Sonrió cínicamente—Ella ya pago lo que me hizo…
—¿Qué le hiciste?—Le pregunto entre dientes, apretó los puños, recordó las palabras de Hilary “La va a matar, le esta pegando horrible”
—Yo a ella le hago lo que se me pega la gana, es mi mujer.
—Maldito machista, por eso dejo de amarte.
—No le voy a dar el divorcio nunca ¿Entendiste? Así que mas te vale mantenerte alejado de ella, si me entero de que tu y ella siguen viéndose… La dejo peor de lo que la deje hoy—La sangre de James hirvió, y le propino un fuerte golpe a Justin en el rostro haciendo que callera, de inmediato escupió sangre y lo miro con furia, se limpio la boca con la mano, su respiración se agito pero a pesar de todo logro controlarse—Te quiero lejos de ella… hermano—Dijo esto ultimo con desprecio, camino a la entrada y salio del departamento.
James saco de golpe el aire que tenia retenido dentro de el, lagrimas invadieron sus ojos las cuales no tardaron en salir, se sentó en el sillón, apoyo sus codos en las rodillas y tomo su cabeza entre sus manos, empezó a llorar, le dolía toda esta situación, ¿En que momento se fue todo de las manos? Necesitaba verla, sabia que estaba mal y golpeada, pensar eso hizo que la sangre le hirviera aun mas, la imagino, esas imágenes le destrozaban el alma, se sentía impotente sabia que el ir a verla complicaría las cosas, ¿Qué debía hacer? Tomo el teléfono y llamo a Hilary.
—Hilary soy James.
—Joven por fin, dios mio… ¿Escucho mi mensaje?
—Si lo escuche, justo cuando pensaba ir, Justin apareció en mi puerta.
—¿Qué? Dios mio…
— ¿Cómo esta? Dime Hilary… dime que esta bien por favor.
—Ella esta bien, pero un poco lastimada…
—¿La golpeo muy feo?
—Pues no por fortuna, tiene unos golpes en su cara—James apretó los puños—Pero nada grave. ¿Y que paso con su hermano?
—No se yo… El estaba como si nada—Suspiro.
—Tranquilo mi niño, mira todo esto paso muy rápido y tan extraño.
—Voy para aya.
—No por favor, no se atreva a venir eso complicaría mas las cosas, su hermano seguro no tarda en llegar.
—Necesito verla Hilary.
—Lo se lo entiendo pero por favor hágame caso, todo se complicaría ademas la señora ya esta dormida.
—¿Qué hago Hilary?— Empezó a llorar de nuevo—El no le piensa dar el divorcio.
—Estoy segura de que hay una solución.
—Te juro que si le hace algo yo… ¡Agh!
—Ella esta bien créame.
—Esta bien pero por favor Hilary… Cualquier cosa avísame ¿Si?
—Claro mi niño, pierda cuidado.
—Adiós.
—Adiós y trate de descansar—Fin de la llamada.
James trato de dormir pero fue en vano, ¿Cómo paso todo esto? Apenas una noche antes el estaba con ella, eran tan felices juntos, hablaron del futuro, jamas imaginaron que Justin supiera todo, pero le desconcertaba la actitud de el, el siempre pensó que cuando el se enterara, Justin simplemente trataría de matarlo a como de lugar, pero no, fue todo lo contrario, era un Justin tranquilo, calmado y aparentemente fuerte. ¿Debo temerle mas a ese Justin? Se preguntaba James, quizá este planeando algo, quizá tenga algo en mente pero, ¿Qué?
Justin entro a un lujoso bar de la ciudad, y se sentó en una mesa donde ya sus acompañantes lo esperaban.
—Justin, que sorpresa… ¿Para que nos citaste aquí?
—Tanto yo como la señorita estamos muy intrigados.
—Ya lo se todo. Solo quiero que ustedes me cuenten lo que saben—John y Nataly se miraron unos segundos.
—¿Qué es lo que sabes exactamente Justin?—Pregunto Nataly mientras bebía su martini.
—Todo y nada, mi hermano se ha estado cogiendo a mi esposa— Rió por lo bajo, John y Nataly se miraron confundidos ¿De que se ríe?— Así que quiero detalles.
—Ya, bueno en realidad no sabemos desde cuando empezó todo.
—Lo que sepan, sea lo que sea quiero saberlo.
—Bueno, pues desde la visita guiada a Napa, cuando estuvimos en tu hacienda yo me di cuenta de que James veía de una manera…. especial a Beka, incluso se lo dije, obviamente el lo negó. Pero no se si desde ese día ellos ya… tu sabes.
—Luego vino el lanzamiento del vino de Mark Thompson—Continuo Nataly—Estuvieron toda la noche juntos, se miraban de una manera especial, obviamente los únicos que nos dimos cuenta fuimos nosotros 2, yo tenia y sigo teniendo un interés por James y simplemente me molestaba como la miraba, como le hablaba… todo.
—Yo tenia interés en tu esposa no te lo voy a negar—Justin le dedico una sonrisa de lado.
—Así que te gusta mi esposa he.
—Me fascina es bellisima… Pero bueno eso siempre lo supiste—Justin asintió divertido—Entonces entre en acción, ellos bailaban, me acerque a ellos y le pedí bailara conmigo. Después de una mirada de advertencia por parte de James accedió y me dejo con ella.
—Ahí entre yo, hablamos y me dejo mas que claro que no tenia ni el mas mínimo interés de volver a estar conmigo, hasta que me confeso que estaba enamorado, le hice preguntas y me dijo que se llamaba Emma. Tiempo después fui a su oficina y le pregunte por ella— Rió—No la recordaba, siempre supe que esa tal Emma no existía y se lo dije, entonces lo bese y justo en ese momento llego tu esposa quien nos miraba fijamente estaba a punto de llorar, le dolió muchísimo.
—¿Y que paso después?
—Ella salio corriendo de ahí y el como idiota corrió tras ella, entonces lo entendí todo, pero necesitábamos algo que lo confirmara—Miro a John para que el continuara.
—Dime Justin... ¿Dónde estaban ellos cuando despertaste?
—En Londres—Dijo con la mirada llena de coraje.
—Fue la cena anual del consejo Europeo, yo estuve aya. Un día después confirme todo…
John estaba en un antro Londinense con algunos amigos, se encontraban en una de las mesas del segundo piso, tomo su bebida y encendió un cigarro, se acerco al barandal y miraba a la gente bailando en la pista de baile, la música cambio a algo mas lento y romántico, el miraba como muchos regresaban a sus asientos y otros se acercaban a sus parejas para bailar fue entonces cuando una pareja llamo su atención, bailaban abrazados ella tenia su cabeza apoyada en su pecho y el la besaba con ternura en la cabeza, ella levanto el rostro y unieron sus labios en un tierno beso, ella lo abrazaba por el cuello mientras aquel chico la aferraba a el por la cintura, después de un largo y dulce beso ambos se miraron con una sonrisa, el tomo su mano y acaricio su dedo, los 2 se miraron y fue cuando se dio cuenta que usaba un anillo en el dedo anular, después de unas palabras ambos rieron divertidos hasta que ella lo tomo de la nuca y lo beso lentamente, simplemente desbordaban amor y el lo noto de inmediato.
—No… puede… ser—Se dijo a si mismo, sin dejar de mirarlos, no podía creer lo que sus ojos veían, y aunque en el fondo lo sabia, verlo le sorprendió mucho. Tomo su teléfono y marco.
—¿Hola?
—No te imaginas lo que mis ojos están viendo ahora mismo.
—¿Qué cosa? ¿Dónde estas? Se escucha mucho ruido.
—Estoy en un antro acá en Londres.
—Con razón… ¿Y que has visto?
—Tenias razón en todo preciosa… Justo ahora están tu querido James y mi bellisima Beka bailando y besándose de lo mas lindo… Se adoran es obvio.
—¿Qué? ¿Estas seguro de lo que me estas diciendo?
—Totalmente seguro, los estoy viendo ahora mismo. Ya les tome una foto, ya sabes por si acaso.
—¡Lo sabia! Es una maldita infeliz.
—Hey hey… No hables así de ella. En todo caso aquí el miserable es tu adorado James.
Y así continuaron su conversación por unos minutos, John el resto de la noche no les quito la mirada de encima.

•••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••Siganme
Dejar su estrella
Comenten

 Entre los Maslow Donde viven las historias. Descúbrelo ahora