¿Quién diría que en un viaje de vacaciones a Mónaco me terminaría enamorando de un piloto de fórmula uno?
Me llamo Valentina Márquez, 23 años, Española, Portuguesa y Venezolana, soy directora creativa de distintas empresas en Europa. Mi vida desde q...
Al día siguiente Carlos se duchaba mientras Charles y Valentina seguían en cama-Buongiorno Principessa-dijo Charles dándole un beso.
-Buongiorno amore-dijo sonriéndole.
-¿Cómo te sientes?
-Me siento excelente, pero me duele todo-dijo estirándose en la cama para sentarse.
-Lo sabía, todos los días después de follar estás así-dijo Charles sentándose detrás de ella.
-¿Cómo lo sabes?-pregunto extrañada viéndolo.
-Lo se porque me doy cuenta, de cómo caminas, respiras...-dijo lamiendo su cuello-Mmm fuck, what a taste-dijo delirante el monegasco-Y por cómo te estiras en la cama, sin contar el cómo te sientas.
-Veo que me estudiaste por completo y créeme que tú no eres el único que estuvo estudiando-dijo dándole un beso.
-No tengo dudas-dijo acariciando su cabello-¿Tienes el cabello rizado o son ideas mías?
-Dicen que cuando te enamoras el cabello se te coloca rizado-dijo arrodillándose en la cama para abrazarlo.
-No lo dudo, pero veamos las fotos-dijo tomando su celular.
Y al ver la primeras fotos el cabello de la morena era liso y luego de unas semanas el cabello estaba medio rizo, hasta la fecha que está un poco más rizo.
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-Te ves tan hermosa de cualquier forma, que pareces irreal-dijo Charles depositando un beso entre la separación de sus pechos.
-Y tú eres tan perfecto, que aún no lo puedo creer...
-¿No puedes creer que?
-Que hayas fijado en mi, en una simple mortal, no soy modelo, ni famosa, así que no sé qué me viste.
-¿Pero que tonterías dices? ¿Acaso no te haz visto? ¿No te haz escuchado hablar? ¿Aún no te haz dado cuenta de lo que causas en mi? Eres la mujer más hermosa, amorosa, valiente, humilde, honesta, dulce, inteligente, increíble y la mujer que quiero que sea mía por el resto de mi vida... por favor no me vuelvas a decir eso, porque lo que yo veo en ti, estoy segura que no lo ve nadie más.
-Ojalá tú vieras el hermoso ser humano que eres Charles, yo creo que aún no lo sabes y me sorprende como dudas de ti, de tu potencial, de tu hermoso corazón, las pequeñas cosas por las que haz pasado te hicieron la maravillosa persona que eres hoy... Te amo-dijo besándolo y abrazándolo.
-Te amo-dijo el monegasco acariciando su mejilla.
-Si quieren ya pueden bañarse y me dejan la llave de su cuarto para poder buscar sus cosas mientras se duchan-dijo Carlos saliendo del baño.
-Gracias mate, aquí está la llave-dijo Charles levantándose de la cama.
-No hay de que, tómense su tiempo. Además creo que alguien va a necesitar ayuda y tendrás que encargarte-dijo Carlos mirando a Valentina que estaba sentada en el borde de la cama sin poder levantarse.
