Alianza Equivocada | yoonmin

tanto que al final me lo creí.

Es evidente que cuando los tres bajaron finalmente al primer piso de la casa, atrajeron la mirada de todos allí.

Sin embargo, a Yongsun solo le interesaba ir de frente hacia una chica alta, de apariencia seria y de hermoso cabello largo. Se llama Byulyi, según recuerda Jimin que ella le dijo. Mientras que Hyejin no demora en unirse a su grupo de amigos de siempre en la escuela.

Él es el único de los tres que siguió caminando hacia ningún punto en específico porque no veía a nadie conocido cerca.

O a alguien en especial.

Al menos así continuó hasta que Taemin se puso delante suyo.

—Wow... Ji-jimin, luces e-espectacular.

Jimin se ríe por lo bajo, mientras cruza sus manos por detrás de su pantalón.

—Gracias, Taemin hyung. —Lo mira de pies a cabeza. —. Tú no te quedas atrás.

Al instante, este se sonroja por completo, ofreciéndole con torpeza la lata de cerveza que tenía en la otra mano. Ese comportamiento le saca otra risa discreta al de cabellos dorados.

Y así ambos se enfrascaron en una conversación que no logró durar mucho cuando, por el rabillo del ojo, Jimin distingue la figura Yoongi, quien recién parece haber llegado a la fiesta al salir del grupo de personas que se habían amontonado cerca a la puerta.

Sin embargo, no recibe una sola mirada de su parte ni cuando camina por su lado hacia el centro de la sala y eso le molestó, no quitándole la vista de encima mientras coge una lata de cerveza de la mesa, la abre y le da un trago con la misma expresión de aburrimiento de siempre.

—Entonces... ¿estás muy nervioso?

Esa lejana pregunta llama de nuevo la atención de Jimin.

—¿Nervioso? —Tuvo que repetir la última palabra que Taemin dijo para ponerse en contexto.

—Por la presentación... —le explicó él.

—Oh, sí, estoy muy nervioso.

Pero apenas Jimin nota a la distancia que Yoongi se vuelve a mover, se enfoca en él otra vez. ¿Por qué salía hacia la parte trasera de la casa? ¿No se va a quedar en la fiesta?

—¿Jimin?

Este nuevo llamado lo sobresalta una vez más.

—¿Eh, sí? —Taemin se remueve ligeramente en su sitio y Jimin siente un tirón de culpabilidad en su estómago—. Hyung... lo siento, estoy un poco distraído por-

—Por Yoongi-ssi.

Ese nombre hace que lo mire a los ojos.

Taemin lleva una de sus manos hacia detrás de su oreja, demostrando lo incómodo que está cuando quién tendría que estar así es él mismo.

—Hyung...

—Oh, no pasa nada, Jimin. Entiendo eso—. Pese a sus comprensivas palabras, no puede evitar tensar sus labios—. Más bien... perdón por quitarte tu tiempo. Deberías estar allá con él y no aquí conmigo.

Ahora Jimin sí se siente incómodo. Y no sabe si es porque sus mejillas se están sonrojando o por el mal rato que le está haciendo pasar a Taemin.

—Hyung, yo... —se le escapa un suspiro—. Lo siento.

Se disculpa de nuevo solo por rechazar sus sentimientos de forma indirecta, no hay nada más que eso. ¿Por qué todos inmediatamente lo emparejan con Yoongi?

Esa simple pregunta en su cabeza hizo que su estómago se revolviera por completo.

—N-no, no lo sientas. —Taemin negó enseguida—. Solo que... —«Yoongi-ssi tiene tanta suerte», concluye muy dentro de él—. Suerte —susurra esa palabra a pesar de que no será escuchado por la música a alto volumen.