Ese mismo día, Jimin llegó a casa incluso más tarde que Heesoo.
Se la había pasado en la biblioteca, avanzando trabajos y proyectos, tanto así que ni siquiera fue al comedor a reunirse con Taehyung.
Lo primero que hizo al llegar a su habitación, fue tirarse a su cama y cerrar los ojos porque le ardían de tanto estudiar. No era la primera vez que se enfrascaban en sus estudios para evitar pensar, para evitar sentir.
Porque eso solo se desataba en un estado de debilidad que Heesoo siempre le recordaba cuando a veces extrañaba a su madre.
A su verdadera mamá.
Es que no valía la pena extrañarla cuando ni siquiera la había llegado a conocer. Al igual que no valía la pena anhelar un amor que, en primer lugar, nunca fue para él.
Las heridas empezaron a abrirse y un sollozo se le escapó de los labios por más que los apretó.
Odia sentir, porque hacerlo siempre lo lleva a esto. A lágrimas que solo le recordaban lo débil que en verdad era.
Y en su persistencia de no soltarlas, las horas pasaron mientras la luna hacía de su única compañía. Su cuerpo le dolía, pero aún así se obligó a levantarse.
Jimin debía despejar su mente para volver a borrar sus recuerdos, o al menos guardarlos muy dentro de él, por lo que, todavía con el uniforme de la escuela puesto, salió de su habitación para caminar por la casa con los pies desnudos.
La oscuridad es aún mayor por los pasillos porque ya es de madrugada, pero para él solo es otra compañía más. Así como la melodía que empezó a escuchar, mientras se va acercando a un lugar que él sabe que no es recibido.
El hueco en su pecho se sigue abriendo...
—Sé que no soy tu hermano, pe-pero podemos ser amigos.
—¡No! ¡Vete!
—Pe-pero, hyung...
—¡No soy tu hyung, jamás lo seré! —le siguió gritando ese mismo niño de cabellera oscura—. ¡Vete, vete, no te quiero aquí!
Hasta transportarlo a uno más reciente.
—Bienvenido-
—No estoy para recibimientos. —Ahora ese mismo niño había crecido y su cabello de hebras oscuras también lo había hecho. Pero el desprecio en su mirada no había cambiado ni un poco, seguía intacto hacia él—. Solo déjame entrar y dile a Heesoo que ya estoy aquí.
Sus ojos caramelos volvieron a arder, pero esta vez por un motivo diferente.
•••
Jimin no había podido dormir en toda la noche y en su rostro eso se notaba, pero no había nada que una buena base de maquillaje no pudiera ocultar, por lo que no se tardó en estar listo para iniciar un nuevo día de clases.
Y así continuaron los días siguientes, fingiendo que nada había pasado y que estaba lleno de trabajados para ocultarse en la biblioteca y no ver a nadie más.
TaeTae
Minie, juro que si no comemos juntos hoy, te voy a ir a hacer un escándalo en la biblioteca!
Jimin rodó los ojos por su enésimo mensaje del día.
La señora Choi te va a echar de la biblioteca si haces eso.
Ps nos echará a los dos, acaso quieres eso???
Lo conoce, sabe que Taehyung es capaz de hacer eso y más, así que no le queda de otra que reunirse con él a la hora de receso. Aunque eso significara que también tenía que ver al otro par.
Suspira, mientras apaga la pantalla de su celular y va a en búsqueda del maquillaje que siempre tiene guardado en su casillero. A pesar de todo, debe de lucir resplandeciente ante ellos hoy.
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Alianza Equivocada | yoonmin
FanfictionLo único que unía a Yoongi con Jimin era su mutuo desagrado y que se fijaran en las personas equivocadas. ¿O... habría algo más? ••• ©Historia original. Prohibida su copia y/o adaptación. También puedes leer este fanfic a través de AO3: nexermind.