Mikey parecía inquieto.
A pesar de que hablaba y se balanceaba por los tubos de los juegos infantiles con agilidad envidiable, había algo en sus ojos, en cómo sus labios se apretaban con impotencia, que la hizo llegar a esa conclusión.
—¿Ocurre algo? —preguntó por fin, consiguiendo que el chico se quedara estático en su trayecto por la escalera china, decidiendo dejarse caer limpiamente.
—¿Por qué lo dices?
—No sé, parece como si algo te molestara.
Manjiro desvió la mirada brevemente y luego la clavó en la de ella, acercándose con un aire amenazador.
—Kenchin y yo peleamos.
(T/N) se hizo a un lado para hacerle espacio para que se sentara y le pareció entre gracioso y tierno cómo su expresión se enfurruñó y cruzó los brazos sobre el pecho para luego dejarlos caer a cada lado del cuerpo.
—¿Por qué?
Manjiro ladeó el rostro para verla profundamente, como nunca lo había hecho y pareció confirmar algo cuando ella no apartó la mirada.
—No es una historia bonita.
—Te escucho, creo que quizás exponerlo a alguien que no haya estado en el conflicto podría darte otra perspectiva.
—Tal vez. —Curvó apenas los labios—. Un amigo, Pah-chin, apuñaló a alguien.
—No mentías cuando dijiste que no era bonito —intentó bromear para ocultar el escalofrío que la recorrió de pies a cabeza.
—La cuestión es que, en el momento cuando llegó la policía, Kenchin me obligó a dejarlo allí. Y yo no quería. Dejarlo es darle la espalda y en ToMan...
—"Uno para todos y todos para uno" —interrumpió con suavidad cuando se percató de su turbación.
—¡Exacto! Kenchin es un idiota. Y si hubiera sido yo, ¿me hubiera dejado igual? No sé qué...
—Manjiro —musitó ella y él volteó a verla con el ceño fruncido—. Siendo objetiva, tu amigo cometió un delito.
—Pero... —Mikey pareció dirigir su exasperación hacia ella, pero cuando no la vio retroceder, dijo—: Ellos le hicieron algo horrible a un amigo de Pah-chin y a su novia. No puede quedar impune.
—Entiendo. —Asintió, regresando la vista al frente. Las copas de los árboles se mecían ligeramente bajo el incandescente sol de verano, continuó—: Aplicar uno mismo la justicia a veces no es una opción. La venganza, la sensación que genera, te consume por dentro. No sé nada sobre tu amigo, pero quizás llegó a esa conclusión, y tal vez Draken quiso respetarla...
—¿Dices que yo no?
—No. —Meneó la cabeza—. Solo estoy hablando por especulaciones. Manjiro, creo que tú más bien, no puedes darles la espalda a las personas que quieres y eso está bien.
—¿Pero?
—Pero no puedes ignorar los sentimientos de la otra persona. ¿Quizás podrías hablarlo con él? ¿Con ambos?
—Eso no quita que Kenchin sea un idiota —dijo, obstinado, pero relajó los hombros—. A Pah-chin se lo llevaron a la correccional y no nos permiten el acceso. Y no quiero ver a Kenchin en un tiempo. Tengo... Tengo que enfriar la cabeza. Eso.
La chica sonrió, satisfecha, cuando Manjiro pareció sumergirse en un estado de reflexión. Al cabo de unos minutos, se percató de que ella lo observaba con fijeza y curvó los labios solo un poco. Sin ambages, se dejó caer contra su hombro, acomodándose, pese a sentir como ella se ponía rígida al tacto; pero no lo había apartado, así que él tampoco quiso alejarse.
—Emma me contó lo que pasó con Takemicchi. —Manjiro cambió de tema.
—Aún quiero golpearla y preguntarle qué demonios pasaba por su cabeza —bufó (T/N) y Manjiro rio un poco.
—Así que tú también estás molesta con tu amiga.
—¡Me hizo preocuparme mucho! Además, ¡¿cómo va a hacer eso para...?! —Se mordió la lengua cuando se dio cuenta de lo que estuvo a punto de decir.
—¿Para darle celos a Kenchin? —elaboró Mikey, quejándose cuando la chica se alejó de él para pararse y encararlo con una expresión triunfante.
—¡Sabía que tú sabías sobre esos dos!
—Son bastante obvios.
—No son tan obvios. —Agitó la cabeza con vehemencia.
Mikey estiró la mano para tirar de su antebrazo, obligándola a sentarse junto a él, esta vez más cerca.
—Si llevas viéndolos tantos años como yo, se hace muy obvio. —Se acomodó mejor sobre su hombro, los cabellos de su coronilla le hacían cosquillas en la mejilla, y (T/N) se dio cuenta de que la media cola de Manjiro ese día lucía más desprolija.
—A-ah... —soltó, intentando calmar el latido de su corazón—. ¿Eso quiere decir que Draken corresponde sus sentimientos?
—Sí. Pero no vayas a ayudarlos ni nada.
—No voy a hacerlo —espetó un poco ofendida porque creyera que le gustaba hacer de Cupido.
—Quiero que terminen juntos de forma natural, a su tiempo. Kenchin tiene sus propios demonios e inseguridades, y no quiero que Emma salga lastimada. En el futuro los veo juntos, ¿sabes? Eso me haría muy feliz.
—Aún falta mucho tiempo para eso, pero quiero imaginar que será así —coincidió ella.
Manjiro separó los labios para decir algo, pero prefirió callarlo porque era una repentina epifanía. Después de todo, empezaba a figurarse un futuro en el que (T/N) también estaría.
Continuará...
¡Muchas gracias por leer!
N/A: No sé, no me gusta publicar capítulos cortos, pero aquí estoy xD
No saben lo que me está costando seguir el hilo de los eventos y agradezco a la persona que en la wiki de Tokyo Revengers hizo una línea de tiempo jaja Nadie lo pidió, pero quería decir que, por ejemplo, ahorita estoy escribiendo capítulos ubicados al inicio del arco de Tenjiku y siento que todo se va a ir a la caquita xD
Tengan un gran día y nos leemos en otra ocasión.
¡Cuídense! >.<
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Destino fortuito || Manjiro Sano x Reader
FanficCuando (T/N) se encontró con Manjiro, salpicado de sangre, en mitad de un callejón y él le ofreció un aventón, jamás imaginó que lograría superar sus prejuicios para poder mantener una amistad con él, generando una cadena de sucesos que aunarán el p...