Cada 1000 años los dioses de todo el mundo votan por la extinción de la humanidad y cuando todo estaba perdido, los arcángeles y las valquirias unirán fuerzas para desafiar a sus creadores en el torneo Ragnarok, un combate uno contra uno entre los 2...
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El combate había comenzado y sorprendentemente Isthar había pedido su asiento y se quedó acostada en el como si fuera otra espectadora del combate.
Cleopatra: ¿Tanto me infravaloras, diosecilla?
Sin embargo, Isthar ignoró completamente a Cleopatra y ahora iba a enseñar su arma divina.
Isthar: Solo hubo un hombre que pudo destruir mi arma divina, reza para que puedas durar algo.
Isthar silbo y los cielos empezaron a tomar una forma que era muy conocida por Gilgamesh.
gradas humanas.
Enkidu: No puede ser, es...
Gilgamesh: Sí, en efecto, lo ha vuelto a crear.
Arena del Valhalla.
Heimdall: ¡Parecía que lo habían destruido, pero sus ojos no los engañan! ¡El gran toro de los cielos que alguna vez se había enfrentado a Gilgamesh ha regresado!
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Toro de los cielos: Bestia divina de Isthar.
Isthar: Ahí tienes tu comida mascota mía, diviértete y matala.
El toro obedeció a su ama y fue a atacar a Cleopatra, empezó a correr hacia la faraona para atravesarla con sus cuernos pero esta lo pudo esquivar. Cleopatra sabía que no podía cansarse con esa bestia y tenía que centrarse en su verdadera rival, la faraona fue hacia Isthar y a un milímetro de córtala el toro le embistió y la faraona terminó estrellándose contra la pared y escupiendo sangre y con un corte en el brazo derecho.
Rafael: ¡Cleo-sama!
Isthar: Fue una muy mala decisión intentar atacarme, este toro fue creado exclusivamente para protegerme.
La faraona se levantó lentamente y cuando estaba dispuesta a volver al enfrentamiento, en un instante fue completamente atravesada por el toro. Nadie podía creer ese resultado tan rápido, Isthar estaba muy satisfecha con la facilidad de la pelea pero sin embargo, Brunhilde y Miguel estaban muy tranquilos y era por un simple motivo...
