-No puedo creer que no te la hayas cogido- soltó Greg ofendido, acostado en el piso de mi habitacion, mirando el techo, como la otra vez.
-Que delicado- contesté en la misma posición, a su lado.
-Si, si, simula que eso no te afecta- dijo- ¿No te arrepientes de no haberlo hecho?
Me quedé callado, nunca lo había pensado, realmente. A ver, sabía que si seguíamos al ritmo que veníamos, tarde o temprano, iba a pasar. Pero, ese pensamiento me ponía tan incómodo, que tenía que sacarlo lo antes posible de la cabeza.
-No me quejo- respondí finalmente, ni siquiera yo sabía realmente a que me refería.
El tema quedó atrás, gracias a Dios, y nos quedamos, como siempre, filosofando sobre la vida. Yo no soy muy creativo, pero Greg tiene una facilidad para pensar preguntas y yo, una habilidad para respondérselas de la manera más lógica posible. Y él, siempre me detiene diciéndome: "Cierra la boca, deja de sacar información y háblame de ti".
Nunca le entendí, pero esta vez, creo que si: ¿Cómo vivirías si no pensaras en el futuro?
Sin ansiedad, eso seguro. Pero lo prometí que lo pensaría bien.
A los cinco minutos de que Greg se fuera, el timbre sonó y, alguno de mis padres, abrió e inmediatamente, escuché pasos en la escalera.
Se me encogió el corazón cuando la ví en el marco de la puerta, con un campera de cuero y su patineta debajo del brazo. Intenté que no se me notara ninguna emoción.
-¿Ya sobrepensaste y cambiaste de opinión?- soltó.
-No- hablé serio, levantándome del escritorio y me paré frente a ella- No cambié de opinión. Si vas a ir, vas sola- aclaré- Lo cual, te repito, me parece una locura.
Sonrió como la vez que me robó mis chicles en el almacén, era literalmente la misma sonrisa.
-Adiós, Oliver Twist- desapareció de mi vista y escuché de nuevo los pasos en la escalera.
💻💻💻
6:30, como todos los viernes, bajé al living junto con Ricky, no sin antes ir a la cocina y meter una bolsa de palomitas en el microondas.
-Hijo...- mi papá estaba sentando en la mesa con el teléfono, pero lo dejó para hablarme. Lo miré para que siguiera hablando- El otro día me dejaste pensando- soltó. Cambié mi expresión a confundido- Me dijiste "te amo, papá".
Íbamos a hablar de eso, ok.
-Es la verdad- me encogí de hombros, escuchando las palomitas explotar.
-No lo decimos seguido- siguió.
-Lo sé- contesté- Pero habría que hacerlo, porque... hay mucha gente que no tiene la suerte de tener a su padre siempre a su lado- expliqué- No quiero darte por sentado, a mamá tampoco.
Él asintió sonriendo y el microondas terminó. Saqué la bolsa para abrirla, poner las palomitas en un bowl y llevarla al living.
Star Trek, lo único que podría distraerme en este momento es Star Trek.
Me senté en el sillón y prendí la tele en el canal de noticias. Estaba a punto de cambiarlo, cuando empecé a prestar atención a lo que estaban diciendo.
-Así parece ser, Bret- decía la chica de las noticias, frente a una casa que conocía muy bien. Había muchísima gente alrededor, policía y una cinta amarilla a lo lejos- Mario L'eruie, llamó a las autoridades cuando llegó a su casa, diciendo que había una fuga de gas viniendo desde el sótano- explicó- Si hubiera estado ahí dentro varios minutos más, podría estar muerto ahora mismo, nos dice la policía.
-¿Había alguien en la casa?- preguntó el otro periodista desde la central.
-Él asegura que no, que si los bomberos encuentran a alguien, no tenía permitido el acceso- respondió ella- Aún no han llegado, pero inspeccionarán la casa por protocolo y volveremos con ustedes cuando...
Apagué la tele con el corazón en la garganta y con lágrimas cayendo por mis mejillas.
Sarah está en la casa. Todo dentro de mi me asegura que ella está ahí adentro.
Y todo me decía, que no tiene chances para sobrevivir.
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Mastermind 💻
Action¿Y si te digo que nada fue un accidente? Oliver, un chico tímido, pero increíblemente inteligente, siempre que lee una novela de misterio sabe perfectamente quien es el culpable después de la página 6, muy responsable y amable. Se le dan muy bien es...