HOY: EL ESPEJO: SEGUNDA PARTE

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Cuando todos nos tranquilizamos, decidimos oír a Tina

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Cuando todos nos tranquilizamos, decidimos oír a Tina. Ella comenzó a contarnos todo, desde que se había intercambiado con la verdadera Feli hace un tiempo atrás, cuando la detuvieron, y por qué. Ella se escuchaba verdaderamente sincera.

—Y sí.. volví para mandarlos directo a la morgue— limpio su nariz —Una arrrpía con sed de venganza. Pero...

—Pero le pasó lo mismo que a mí— Luca completó.

Tina sonrió y palmeó su mejilla con cariño.

—¿Le crecieron pelos en el pecho?— Mar preguntó.

Todos la miramos.

—Fue un chiste. Pasa que estoy nerviosa y...

Tina le sonrió y estiró su mano —Vení.

Mar negó —Perdón, no puedo.

—¿Perdón? ¿Perrrdón? Perdón tengo que pedir yo, Mar. Yo les juro que cambié— Tina aseguró —Y no les voy a negar; disfruté tanto odiándolos, pero me di- me di cuenta, que amándolos.... era muchísimo más feliz. ¿Entienden?

Asentimos.

—Y ustedes hicieron ese milagro. Y Cielo... Cielitis, se dió cuenta— nos sonrió —Y me dió otra chance, mirala.

Mar la miró por varios segundos y negó.

—Yo no me puedo olvidar quién sos.

—Es que no te tenés que olvidar— Tina habló y nos miró —Como yo no me olvido de quién soy. Ver esa mirada, esas caras de miedo de terror, a mí me- me duele mucho, eh. Y.. me recuerda a un lugar que no quiero volver nunca más en mi vida— pausó y soltó un suspiró —Miren... yo voy a ser feliz el día que en esos ojitos yo vea un milímetro de amor propio.

—Es que es raro, Tina— Thiago habló —Yo a vos te quiero, pero porque creo que vos sos Feli.

—Y es lógico, natural. Ahora, yo... no me rrresigno. No voy a parar hasta que me quieran, un poquitito, un poquitito— sonrió —A Justina Merarda García, tanto como han querido a- Fe-Fe-Fe— miró a Luca por ayuda.

Luca sonrió —Feli.

—Esa.

Yo le sonreí y Tina tomó una de mis manos.

**********

Había estado pensando muchísimo. Estuve dentro del carromato sola con mis pensamientos, y sentía que cada vez nos acercábamos más a la verdad. Yo traté de hablar con Relojito, pero este no aparecía. Bueno, sabía que siempre estaba, pero no aparecía fácilmente. Además, sabía que tenía que recuperar mi llave, aunque no sabía cómo.

Cuando entré a la mansión, escuché la voz de Cielo en la sala. Estaba acompañada por Thiago, Rama y Tacho. Antes de que pueda escapar, me vió Thiago.

Midnights ✨ || Casi ÁngelesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora