HOY: ¿LOBO ESTÁ?: SEGUNDA PARTE

985 138 16
                                    

Me sentía distinta

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me sentía distinta. Me sentía renovada, pero sobre todo, me sentía más segura de mí misma. Confiaba más en mí y mis habilidades, pero no iba a bajar la guardia. Además, Relojito fue bastante claro; tenía que ser responsable al usar mis poderes. Y yo iba a cumplir mi promesa, no pensaba fallarle.

Me recosté sobre la cama que compartía con Mar y me puse a pensar en todo lo que Relojito me contó. Me puse a pensar en mi mamá biológica y en cómo me hubiese gustado conocerla. Sin embargo, saber que me había amado, me reconfortaba muchísimo. Ahora, saber que había viajado al futuro... no sabía que eso se podía hacer, bueno, suponía que eso era algo que Relojito podía hacer, pero no sabía que él podía llevar a otros a ese tiempo. Todo era mágico. Si hace un año alguien me hubiese dicho que estas cosas sucederían, me hubiese reído en su cara. Las cosas que descubrí desde que llegué al país... yo ya no era la misma Valentina de hace un año atrás.

"Nos volveremos a ver muy pronto". Relojito dijo.

¿Cuándo sería eso? Sabía que siempre estaba, él lo había repetido muchas veces, pero no solía verlo y esperaba que eso cambie. Amaba conversar con él, platicarle mis miedos.. mis inseguridades. Todo el mundo se merece por lo menos un amigo en quien confiar, a quien contarle sus miedos, esperanzas y sueños. Su felicidad, sus fechorías. Todos merecen alguien a quien mirar a los ojos y que les digan: Sí, eres lo bastante bueno y suficiente. Eres perfecto, incluso aunque tengas cicatrices.

Para mí, ese alguien era Relojito. Me conocía bien, mejor que nadie y le estaba muy agradecida. Él me había cuidado, me había protegido y jamás lo iba a olvidar. Sin embargo, me causaba curiosidad él, su vida. ¿Cómo se había convertido en Tic Tac? Sabía que ese no era su nombre, estaba claro, pero yo no sabía nada más allá de lo evidente. ¿Confiará él en mí lo suficiente como para contarme eso? Yo iba a respetar su decisión, pero se lo preguntaría.

—¡Aquí estás!

Abrí los ojos al reconocer esa voz. Me senté y reí al ver a Thiago cruzado de brazos, con una expresión de preocupación en el rostro.

—Te busqué por toda la casa.

Arqueé una ceja —¿Toda? Estaba en el sótano, con Re- digo, con...— reí, nerviosa —Con nadie. Tienes una cara... ¿qué pasa?

—Estaba preocupado por vos, ¿de acuerdo? Pensé- pensé que-

—¿Pensaste que Juan Cruz me tenía?— terminé su oración —Thiago, tienes que relajarte un poco más porque estará todo bien. No me va a pasar nada.

—¿Cómo podemos estar seguros?

Porque Relojito me lo dijo.

—¿No quieres que hagamos algo? No sé, quizá nos podemos relajar viendo una película o-

—¿Querés ayudarme a reforzar las ventanas? Aquí nada es seguro— negó —Cielo no hace nada y creo-

Interrumpí —No tendrías que ser tan duro con ella porque está haciendo lo mejor que puede. Además, tenemos que confiar en lo que dice y hace.

Midnights ✨ || Casi ÁngelesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora