Juanjo y Martin están en el Parc del Fòrum, en Barcelona, el día 1 del Primavera Sound. Los chicos van de la mano ante la mirada emocionada de varias fans, que les piden fotos.
Al llegar a su zona, Juanjo le deja su sudadera a Martin porque tiene frío (y porque adora mimar a su novio).
Están en pista front viendo alucinados como entran a Carmen Machi como si de una virgen en una procesión se tratara.
Resulta realmente simbólico para los chicos ver en directo cómo las Stella Maris abren el festival, pues, de alguna manera, también estuvieron presentes en los inicios de su relación...
***
Tras la fase de grupos del casting, Martin y Juanjo hablaron, y Martin le transmitió con su habitual sinceridad lo increíble que le había parecido su voz.
Por este entonces el vasco, con su talento para leer a las personas, detectaba que Juanjo cargaba con una coraza de miedos. Lo pillaba en momentos con la mirada perdida, algo que lo desconcertaba. Todo esto sumado a ese vozarrón y a esos ojillos brillantes le generaba una curiosidad que le hizo acercarse a él. Sin darse ni cuenta, esa curiosidad se convirtió en algo más.
Al día siguiente fue el casting final, y Juanjo se echó a llorar tras haber interpretado su versión de "The great pretender", por la presión, los nervios, el miedo a no entrar... eran muchas cosas acumuladas.
Martin, incapaz de mantenerse al margen, se había acercado a Juanjo y le había animado, diciéndole que iba a entrar seguro y que su actuación había sido impresionante.
Juanjo, a su vez, admitió que la actuación de Martin le había encantado, y que su voz era de las más bonitas que había escuchado.
Algo en la forma en que Martin lo miraba motivó a Juanjo a sincerarse con él, contándole lo incapaz que se sentía de volver a su vida como estudiante de ingeniería. Le contó cuánto tiempo llevaba luchando por dedicarse a la música, le contó cómo realmente necesitaba que esto saliera adelante. No había otra opción, Juanjo necesitaba entrar a OT.
Martin se dio cuenta de que esto era raro, de que Juanjo no se abría a menudo, no se mostraba vulnerable. Le estaba mostrando algo especial. Y a partir de entonces fue inevitable: se enganchó a él.
Juanjo notaba algo en Martin... algo bonito, real. Y no sabía muy bien qué era, cosa que le asustaba un poco.
Cuando Martin vio al aragonés entrar a la sala de los 18 últimos seleccionados del casting, no pudo ocultar su alegría.
Juanjo lo atrajo hacia sí en un fuerte abrazo. Mientras esperaban a que llegaran todos a la sala, los chicos rieron, hablaron, se cogieron de la mano y se abrazaron mil veces más, en tímidos gestos inconscientes de felicidad, envueltos en una curiosa delicadeza que solo se mostraban entre ellos.
Lina ya notaba algo, algo dulce y transparente que estaba naciendo entre los dos chicos.
Los 18 aspirantes se quedaron unos cuantos días en Barcelona, grabando promos y haciéndose pruebas médicas. Y ahí entró "La Mesías".
Martin, como buen cinéfilo, se vio el primer episodio y flipó tanto que en una de sus tímidas conversaciones con Juanjo le habló de la serie.
Una cosa llevó a la otra y Juanjo se encontró esa noche en la habitación de hotel de Martin, utilizando sus dotes de ingeniero para iniciar sesión en un antiguo televisor con la cuenta de Movistar+ del vasco.
Vieron juntos ese primer episodio, sentados en la cama, algo tensos, compartiendo un paquete de patatas fritas y lanzándose miraditas nerviosas. Martin se avergüenza del nivel al que sentía mariposas en el estómago.
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Detrás de cámaras - Juanjo y Martin
Romance¿Qué nos perdimos entre Martin y Juanjo cuando no había cámaras? Basándome en cosas reales, imagino momentos y conversaciones que pudieron ocurrir. La historia está en orden cronológico, desde las semanas en las que Juanjo aún tenía miedo, vemos su...