𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝟓

1.4K 113 32
                                    

Agradecía con todo mi ser que yo ya había terminado literatura. Amaba literatura con todo mi ser, pero Romeo y Julieta era algo pesado. Mas que todo con ese montón de ensayos que teníamos hacer. Bella durante el trayecto devuelta a casa solo mencionaba lo que había ocurrido en su clase mientras veían a Romeo y Julieta.

Cuando llegamos a casa, ambas nos dirigimos rápidamente a nuestros respectivos cuartos para arreglarnos. Fui a mi escritorio y busqué el regalo que Alice me había dado. Estaba cuidadosamente envuelto a un lado del jarrón de agua con los nueve tulipanes que Emmett me había regalado. Rasgué el papel de regalo con cuidado y encontré un hermoso vestido de tono azul claro, acompañado de un pequeño suéter de lana azul oscuro totalmente elegante.

El vestido era elegante y modesto, con un diseño tapado que llegaba justo por encima de las rodillas. Las medias a juego proporcionaban una sensación de seguridad y confort. Me probé el conjunto y me miré en el espejo. El vestido caía con gracia y el color realzaba mi piel, haciéndome sentir un poco más confiada.

Mientras me ajustaba el vestido, mi teléfono sonó y rápidamente conteste. Era Emmett.

—Hola, Emmett —dije, tratando de mantener un tono alegre a pesar de los nervios—. Ya estoy lista.

—Perfecto, estoy esperando afuera —respondió él con una nota de entusiasmo en su voz—. No puedo esperar a ver lo hermosa que estás.

Rapidamente sali de la casa y al verlo, me quedé sin aliento. Emmett estaba vestido con una camisa negra ajustada que resaltaba su musculatura, y un chaleco que le daba un aire elegante y sexy. Su aspecto era deslumbrante, y de repente me sentí aún más nerviosa.

—¡Wow, Roxy! —exclamó Emmett, sus ojos brillando—. Te ves increíblemente hermosa.

Intenté responder, pero me atraganté con mis palabras, sorprendida por lo guapo que estaba y por su halago. Finalmente, logré recuperar la compostura.

—Gracias, Emmett —dije con una sonrisa tímida—. Tú también te ves... muy bien.

Emmett se rió suavemente y me tomó de la mano, ayudándome a entrar en el auto.

—Vamos, princesa.

Se acercó para abrir la puerta del auto para mí, y cuando me subí, no pude evitar notar cómo me miraba con una mezcla de admiración y cariño.

—¿Cómo fue el día en la escuela? —me preguntó mientras conducía hacia la casa de los Cullen.

—Un poco agotador —admití algo nerviosa todavía—. Pero vale la pena. Hoy va a ser una noche divertida, ¿verdad?

—Eso espero —asintió Emmett—. Alice ha estado organizando esto con tanto entusiasmo que si algo sale mal lo mas probable es que enloquezca. A veces parece dictadora si te soy sincero, pero absolutamente nadie le puede decir que no a Alice.

Llegamos a la casa de los Cullen y Emmett estacionó el auto. Cuando salimos, me tomó de la mano con una sonrisa cálida. Al acercarnos a la entrada, Esme con un vestido hermoso morado nos recibió con una sonrisa radiante y un abrazo afectuoso.

—¡Qué hermosa estás, Roxy! —dijo Esme, envolviéndome en un abrazo reconfortante—. Me alegra mucho que hayas venido y feliz cumpleaños atrasado.

—Gracias, Esme —dije, sintiéndome sinceramente acogida por su amabilidad—. Todo el lugar se ve fantástico.

No pude evitar notar que el lugar estaba lleno de velas y flores. No era el tipo de decoración a la que estaba acostumbrada, pero era muy hermosa.

—Estamos muy emocionados por la fiesta —comentó Esme, guiándonos hacia el interior de la casa. —. Alice ha puesto mucho esfuerzo en esto.

Emmett me miró con una sonrisa satisfecha.

DRIADES || EMMETT CULLENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora