Monster High - One shots

Holt Hyde

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Holt Hyde

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El aire vibraba con los bajos de la música que Holt Hyde escuchaba a través de sus auriculares. Su cabello, formado por llamas danzantes, chisporroteaba con energía, cambiando de tonalidades naranjas y azules al ritmo de los beats. Vestía su característica chaqueta roja con costuras doradas y unos pantalones morados con un patrón de llamas en los dobladillos. Cada paso suyo parecía marcado por la pasión de su ritmo interno, perdido en un mundo donde todo giraba en torno a la música.

Epic Falls, el escondite perfecto para alguien que buscaba calma o inspiración, no solía estar concurrido, lo que lo hacía el lugar ideal para Holt. Sin embargo, ese día, mientras giraba sobre sus talones y balanceaba su cuerpo al ritmo de su propia mezcla mental, chocó contra alguien, rompiendo el flujo perfecto de su danza.

El impacto fue leve, pero suficiente para hacerle tambalearse y detenerse. Al mirar al frente, vio a una chica delgada que se inclinaba apresuradamente para recoger un cuaderno caído. Tenía la piel pálida, casi translúcida, y unos grandes lentes que enmarcaban unos ojos tímidos pero brillantes. Su cabello oscuro caía en cascada sobre sus hombros, y una ligera sombra de rosa se asomaba en sus mejillas mientras se disculpaba con voz apenas audible.

—¡Oh, cielos! L-lo siento—Murmuró, apretando el cuaderno contra su pecho.

—¡Mi error!—Exclamó Holt, levantando una mano como para detener cualquier disculpa. Su cabello ardió un poco más con la emoción, y una sonrisa despreocupada apareció en su rostro—¡Estoy sintiendo las notas! No vi por dónde iba.

La chica negó rápidamente con la cabeza, todavía evitando su mirada directa—No, de verdad, fue mi culpa. No estaba mirando bien...

A pesar de su impulsividad habitual, algo en la vulnerabilidad de su voz hizo que Holt se quedara. Por lo general, habría seguido bailando sin mirar atrás, pero esta vez, inclinó la cabeza, observándola con interés.

—¿Estás bien? ¿No te lastimé ni nada?—Preguntó, su tono ligeramente más suave de lo usual.

Ella alzó la mirada por un momento, encontrándose con los intensos ojos de Holt que parecían brillar como un amanecer y un atardecer al mismo tiempo. Su voz era todavía más baja cuando respondió—Estoy bien, gracias.

Holt frunció ligeramente el ceño, curioso—Espera, no te he visto antes por aquí ¿Eres nueva en Monster High? Créeme, recordaría una cara como la tuya.

La chica asintió lentamente, su timidez evidente en la forma en que sus dedos tamborileaban sobre la tapa de su cuaderno—Sí... Me llamo T/N. Apenas llegué hace unos días.

—¡Ah, con que T/N!—Exclamó Holt con entusiasmo, sus ojos brillando—Soy Holt Hyde, el DJ más ardiente -literalmente- de este lado de la dimensión ¿Qué haces en Epic Falls? No es el lugar más popular entre los estudiantes.

T/N bajó la mirada nuevamente, su voz apenas un susurro—Me gusta la tranquilidad. Es... más fácil pensar aquí. Estar sola.

Holt la observó durante un momento, cruzando los brazos sobre su pecho. No era ajeno a la sensación de querer espacio propio, pero algo en la forma en que lo dijo lo hizo sentir un poco de empatía. De repente, una chispa de determinación apareció en su mirada.