Monster High - One shots

Seth Ptolemy/Faraón

Segunda parte del primer one shots 

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Seth Ptolemy/Faraón

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Bajo el cielo estrellado de la noche de bodas, T/N y Seth, rodeados de familiares y amigos, se preparaban para unir sus destinos en un evento que fusionaba el esplendor de Egipto antiguo con detalles modernos. La ceremonia se llevaba a cabo en un majestuoso templo decorado con columnas doradas, antorchas resplandecientes, y un suave incienso que llenaba el aire con una esencia de mirra y jazmín. Las antiguas reliquias y los ornamentos modernos resaltaban en perfecta armonía.

T/N lucía un vestido que combinaba toques tradicionales con un diseño contemporáneo. La tela fluida en tonos dorados y arena estaba adornada con gemas esmeralda y topacio, cada una incrustada a mano, formando patrones inspirados en los jeroglíficos egipcios. Su cabello, adornado con una diadema de oro y lapislázuli, caía en suaves ondas alrededor de sus hombros, y su mirada, intensa y radiante, reflejaba la emoción del momento.

Seth, por su parte, vestía una túnica ceremonial con bordados dorados, y, como un símbolo de respeto, llevaba la máscara que siempre había usado como "Faraón," solo que esta vez era su madre quien la sostenía junto a él. Mientras avanzaba hacia T/N, sus ojos centelleaban con la misma devoción que había demostrado en su primer encuentro.

Los asistentes los miraban en reverente silencio cuando ambos se tomaron de las manos, y el sacerdote inició la ceremonia con una invocación en lengua antigua. Las palabras antiguas parecían flotar en el aire, envolviéndolos en una atmósfera mágica y solemne.

Cuando el sacerdote terminó, Seth miró a T/N y habló, su voz apenas un susurro, pero clara y sincera.

—T/N, prometo cuidarte, apoyarte en cada sueño, y compartir esta vida contigo, tanto en la luz como en la sombra. Eres mi reina, mi musa y el latido de mi corazón.

T/N, con una sonrisa tierna, le respondió con una voz llena de amor:

—Seth, eres mi refugio y mi alegría. Desde el día en que te conocí, supe que serías tú con quien compartiría mi vida. Hoy, aquí, frente a todos, juro amarte, respetarte y apoyarte en cada paso que des.

El sacerdote los declaró unidos, en medio de los vítores y aplausos, Seth levantó el velo de T/N y, con delicadeza, la besó, sellando la unión que ambos habían deseado tanto. El eco de los aplausos resonó entre las columnas del templo y bajo el manto de estrellas, la pareja comenzó su vida juntos como marido y mujer, listos para enfrentar cada aventura que el destino les tenía preparado.

La celebración continuó en un salón impresionante, donde la decoración mantenía la fusión entre lo antiguo y lo moderno. Las paredes estaban adornadas con tapices que mostraban escenas de la mitología egipcia, y entre cada tapiz había luces tenues que daban al ambiente un toque íntimo y cálido. La música, una mezcla de ritmos tradicionales y contemporáneos, llenaba el aire mientras los invitados comenzaban a ocupar sus asientos alrededor de largas mesas de banquete decoradas con flores de loto y delicados vasos de cristal.

T/N y Seth, radiantes y aún tomados de la mano, recorrieron el salón mientras recibían las felicitaciones y buenos deseos de los invitados. Todos parecían admirar la pareja; su amor era palpable, y la felicidad en sus rostros parecía iluminar la sala entera. Cada persona que los veía sentía que estaba siendo testigo de un momento extraordinario, de una unión verdaderamente única.