Monster High - One shots

Abbey Bominable

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Abbey Bominable

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La noche era joven en la casa de Ghoulia que había ahorra en tanto tiempo y su cuarto lleno de tierra para dormir con la comodidad en la luz de la luna, aunque para los habitantes de Monster High, el tiempo parecía ser algo relativo. La mansión tenía un aire inusual, con luces suaves que iluminaban las estanterías llenas de libros polvorientos y las paredes cubiertas de posters vintage de monstruos clásicos. En la sala principal, Ghoulia había dispuesto todo para una pijamada perfecta almohadas amontonadas, mantas de diferentes texturas y un arsenal de esmaltes de uñas tan variado que incluso un vampiro centenario tendría problemas para elegir.

Abbey Bominable, con su habitual aire de confianza, se encontraba sentada con las piernas cruzadas en el suelo, alisando cuidadosamente su larga melena blanca mientras observaba el colorido despliegue. Su vestido de lana y piel de yak brillaba con los destellos de los copos de nieve incrustados, y la luz tenue hacía que sus ojos violetas parecieran aún más brillantes.

A su lado, T/n se sentaba con los hombros un poco encorvados, claramente perdida en sus pensamientos. Su cabello dorado caía en mechones sueltos sobre su rostro, y sus ojos rojos brillaban con una mezcla de nerviosismo y determinación. Desde que había llegado, había estado buscando el momento adecuado para hablar. Pero ¿Cómo podía siquiera empezar a expresar lo que sentía cuando Abbey, con su confianza innata y su fuerza impresionante, parecía completamente imperturbable?

Ghoulia, fiel a su naturaleza, observaba en silencio mientras organizaba los esmaltes con precisión quirúrgica. De vez en cuando, emitía un gruñido o un murmullo en su idioma zombie, lo que arrancaba risas de T/n, aunque estas eran más nerviosas que auténticas.

—¿Todo bien? —preguntó Abbey de repente, su voz firme cortando el silencio.

T/n casi dejó caer el frasco de esmalte que tenía en las manos. Miró a Abbey y luego a Ghoulia, quien también levantó la mirada, esperando su respuesta.

—Yo... sí, claro. Todo bien —Respondió rápidamente, aunque la tensión en su voz la delataba.

Abbey no era del tipo que dejaba pasar las cosas. Se inclinó un poco hacia adelante, sus ojos clavados en los de T/n con una intensidad que la hizo estremecer.

—No parece que estés bien ¿Qué pasa?

T/n se revolvió en su lugar, jugando con un mechón de su cabello. Finalmente, soltó un suspiro que había estado conteniendo.

—Bueno... hay alguien que me gusta, y no sé qué hacer al respecto —Admitió en un tono apenas audible.

Ghoulia soltó un leve gruñido que sonaba sospechosamente a una risa contenida. Abbey, en cambio, frunció ligeramente el ceño.

—Ah, romance —Dijo Abbey, con un toque de desdén en su voz. La palabra parecía extraña en sus labios, como si estuviera describiendo una situación particularmente absurda—¿Y qué quieres saber?