Perspectiva de una estúpida adolescente.

Capítulo 65.

Cuando llegué a casa, pude ver desde la ventana a mis padres en el comedor. Entré con tranquilidad y saludé a ambos con un beso en la mejilla.

-¿A qué hora es la junta mañana? –preguntó mamá.

-A las once –contesté de buen humor-, la misma hora de siempre.

-Pues si tienes algo que confesar respecto a tus calificaciones o algún mal comportamiento del que no sepamos dilo ahora. No quiero sorpresitas con...

-Marta –contestó mi papá con fastidio-, Jane nunca ha tenido malas notas. Y no creo que te esconda algún inconveniente si es que lo hay. Ahora, Jane, si vas a cenar algo, hazlo ahora, mañana hay escuela y no te quiero ver desvelada –guiñó un ojo cariñosamente.

Entendí que esto último lo había dicho por la vez pasada que encubrió mi salida con Jefferson. Sonreí abiertamente.

-Comí mucho con los chicos, en realidad es cansancio lo que tengo –expliqué-. Y justo ahora solamente tengo que hacer los últimos detalles al periódico escolar. Lo enviaré por correo y después me iré a descansar, hasta mañana.

Subí a mi alcoba y tomé una ducha rápida, luego me dediqué a mi única tarea. El periódico escolar de ese parcial no contenía ninguna nota difícil, y como ya habíamos hecho todo –esa es la ventaja de escribir las notas el mismo día que las encargan-, solo me tomo una hora editarlo por completo. Después lo envié al editor que estaba segundo al mando para que se encargara de imprimirlo al siguiente día.

Realmente no tenía sueño, pero no sé si les ha pasado que les gusta estar un rato a solas en su cuarto, con las luces apagadas y viendo el inmenso cielo a través de su ventana.

Así, sin más ruido que nuestra propia respiración. Esto hasta la fecha me resulta relajante.

Ni siquiera pienso en algo en particular, solamente estoy ahí, divagando y siendo consiente de mi pequeña existencia en el mundo. Siempre que tenía momentos así, me sorprendía de lo poco que conocía. Todos dicen que "el mundo es muy pequeño". No lo creo.

Señores, el mundo no es pequeño. El mundo es inmenso.

Lo vemos pequeño –y eso a veces- porque Dios se encarga de ponernos en el lugar correcto. Un lugar en el que podemos ver todo, sin siquiera ver a veces nada. Hay veces en las que decimos: "este no es mi lugar", "yo no debería de estar aquí". Pero no es que tú no debas de estar ahí, significa que no debes de estar con quienes estas ¿me explico?

No puedes aspirar a ser pintor y juntarte con camarógrafos. Ahora, no estoy diciendo que no puedas juntarte o hablarle a gente que sea diferente a ti. Estoy diciendo que debes estar con gente que aspire a algo como tú. QUE ASPIRE A ALGO COMO TÚ, NO QUE SEA O PIENSE IGUAL QUE TÚ.

¿Notas la diferencia? Para ser alguien en la vida, debes de juntarte con ganadores. Un ganador no es aquel que lo tiene todo, un ganador es la persona que se abre camino a base de esfuerzo y dedicación. Alguien que de verdad lucha por ser algo.