Perspectiva de una estúpida adolescente.

Capitulo 36.

 -Me interesa –espete-, eres importante para mí. Si puedo ayudarte en algo…

-¡No! –Estallo con furia- ¡Entiende, no puedes ayudar! ¡Limítate a largarte de aquí y alejarte de mí en cuanto antes!

Sus palabras me perforaron poco a poco.

-Por lo menos por esta noche –repuso luego de unos segundos- no es seguro.

Alejarme de él, fingir que no vi nada y seguir adelante con mi vida. Era capaz de ello. De verdad que lo era… pero la simple idea de dejarlo solo me dio asco.

-¡No! –Grite con enojo-, no me iré hasta obtener una explicación.

-No te diré nada, Jane.

-Me insinúas… –hable con toda la tranquilidad que me fue posible- todo el tiempo que me amas, ¿pero no confías en mí?

Pareció que le di una puñalada al corazón. De la nada, Jefferson rompió en llanto.

No eran lágrimas de cobardía o de miedo. Lo sé, porque incluso para llorar hay formas. Este era un llanto de tristeza, y mucha desesperación. Que al parecer llevaba mucho tiempo queriendo salir, pero no había tenido oportunidad.

-De verdad, no puedo explicarte nada. Vete por favor, Jane, te lo ruego.

-Quiero ayudarte.

-No puedes.

-Vamos a mi casa –suplique-, por favor, estas muy mal y no te voy a dejar deambulando por ahí en estas condiciones.

-Estoy bien, es normal.

-Si no vienes conmigo, no me iré de aquí –si la Jane linda no lo convencía, la Jane manipuladora lo haría. Cambie mi tono de súplica a uno de mandato.

-Demonios –una ligera sonrisa se asomó en su rostro-, ¿de verdad te vas a poner en el plan de controladora?

-No me retes.

-Tendrás problemas.

-Créeme, hoy ya tuve muchos y uno mas no va a importar demasiado. Además, ya me hice a la idea de que en estos momentos están localizando a mis padres y les están diciendo que su hija es una prófuga de la ley.

-No es verdad –contesto, más calmado- no vieron las placas, es de noche. Muy noche y te aseguro que apenas pudieron distinguir las primeras dos cifras.

-A propósito… gracias por defenderme. Este problema fue por mi culpa…

-Nunca dejaría que algo te pasara –interfirió-, y mucho menos por mi culpa. No me lo perdonaría. Pero si fue muy estúpido de tu parte seguirme.

-¿Cómo supiste que era yo?

-Me di cuenta de que un carro venia atrás de las patrulla, supuse que era ayuda de mis amigos, ya sabes, los del barrio. Pero note que era tu coche, y cuando dejaron de seguirme y mi primer pensamiento fuiste tú.

-¿Tu primer pensamiento fui yo? –Pregunte sorprendida- ¡Vaya!

-Tú siempre eres lo primero en lo que pienso.

El color subió por mis mejillas.

¿Qué mierda, Jane? ¿Te estas poniendo carmesí por algo tan cursi? Pensé.

Me decidí a cambiar de tema.

-Estas totalmente sucio, te vez agotado y necesitas comer algo. Por favor, ven conmigo.

-Iré, si tú me prometes que jamás, por ninguna circunstancia, me ayudaras en algo.

-Lo prometo –grandísima mentira. Sabía que lo ayudaría en lo que pudiera… siempre que pudiera.

Bajo del auto y arrojo el arma para adentro de la casa abandonada.

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Al llegar a mi hogar, subimos en silencio al cuarto –por fortuna, nadie se dio cuenta de nuestra llegada, pienso que se debió a la hora-. Jefferson se dio una ducha y le preste una de mis camisas –mi favorita. Que aparte de ser dos tallas más grandes de lo que realmente usaba, era de hombre. Si, de hombre: me gustaba combinarla con pantalones ajustados. Y considerando que él era delgado, y yo algo rellena, le quedo perfecta-.

Cuando estuvo listo, le di unos panques de chocolate y un vaso de leche. Los devoro de inmediato.

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-¿No me dirás porque te perseguía la policía verdad? –Pregunte con enfado.

-Es complicado, ¿Qué hacías tú, a esas horas de la noche?

-Es complicado.

-¿Así vas a ser conmigo?

-Jefferson, no me dejas otra opción, ¿por qué no confías en mí?

-No es eso, Jane, es que… en estos momentos estoy indispuesto.

-Por favor, Jeff, si estabas robando o…

-¡Para nada! –Exclamo ofendido-, ¡jamás robaría…!

-Shhh –lo calle-, baja la voz, mis padres duermen y si te ven aquí…

-Lo siento, lo siento –contesto en un susurro.

-Bueno, ¿entonces que paso?

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Espero que hayas disfrutado mi nuevo capítulo, me ayudarías mucho si lo compartes.

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