El dragón que nos unió (Callum X Male Reader)

Capitulo 7 T7: Dedos pegajosos parte 2

Gran parte de la tarde Callum, Sael y Aurelio se la pasaron entreteniendo a los pequeños elfos. Yo en cambio me senté en uno de los árboles cercanos a solo verlos pero en un momento saqué la piedra y mi concentración se fué completamente a ella ignorando todo lo demás. De vez en cuando venía Sael o Callum a invitarme o preguntarme sobre lo que me pasaba pero yo solo evitaba el tema.

No podia evitar mirar cada franja que se había formado con cada nueva arma que había fusionado a Ratheous. Cada una de ellas era una aventura, cada una de ellas fue un obstáculo hasta que llegamos al punto en el que estamos ahora, ¿Valió la pena? Sinceramente...no lo sé. Perdí mucho como para estar feliz pero también gané muchas cosas, muchas amistades que me impiden culpar las aventuras, pero...¿De que sirvió todo eso si también lo perdí a él?

Rinís: ¿Por qué miras esa piedra?— ni siquiera había escuchado sus pasos por lo que me sobresalté cuando lo escuché repentinamente frente a mi.

___: Es...un recordatorio— obviamente no iba a decirle al niño todo acerca de los marcados y que era un asesino— Uno que es doloroso.

Rinís: ¿Entonces por qué lo llevas contigo? ¿No es mejor dejarlo?— el tono de inocencia con la que hablaba me había recordado a Aurelio años atrás. Siempre preguntando por papá y sobre la piedra.

___: Porque es muy importante para mí, demasiado— cerré el puño alrededor de la piedra antes de guardarla nuevamente en mi bolsillo y levantar un poco la mirada para ver al pequeño— ¿Por qué no estás jugando con los demás?

Rinís: Ya nos cansamos y ahora estamos descansando en el suelo— me señala al sitio y efectivamente, estaban todos tirados en el suelo riendo y hablando.

___: ¿Y que haces aquí?— pregunté cuando volví a mirarlo.

Rinís: Quería invitarte a que vengas con nosotros— dice extendiendo su pequeña mano hacia mi.

___: ¿Por qué harías eso?— al parecer el tono en que lo dije asustó un poco al pequeño, pues apartó la mano y bajó un poco la mirada, cosa que me hizo sentir culpable.

Rinís: E-es que te veías muy solo y triste aquí— solo suspiré y me levanté del suelo llamando la atención del pequeño.

___: De acuerdo, vamos— eso pareció alegrar lo otra vez pero antes de dar un paso, el pequeño volvió a extenderme la mano— ¿Que haces?

Rinís: E-es que yo te invité, yo debo llevarte— dice tomando mi mano sin obtener respuesta por lo que de inmediato me llevó hacia donde estaban los demás recostados en el suelo que apenas verme, sonrieron.

Sin decir nada me tumbé en el suelo junto a Callum quien rápidamente tomó mi mano antes de sonreírme a lo cuál yo respondí de la misma forma pero no duró demasiado pues el silencio que se formó me volvió a recordar que Ratheous ya no estaba aquí.

Estuvimos ahí varios minutos, hasta que Lira se sentó y miró a Sael con una sonrisa algo sospechosa.

Lira: ¿Entonces, tu y Rayla son amigos?— por el tono y la forma en que lo dijo estaba claro que se refería a algo más que amigos.

Sael: ¿Rayla y yo? Si, claro que sí— dice ligeramente confundido por el tono de la pequeña y levantándose un poco mas.

Lira: ¿Y tú y Rayla son más que amigos?— ante esa pregunta los otros dos elfos rodaron y se acomodaron para ver mejor a Sael y soltar a la vez un "Ohhh" algo burlesco.

Callum y yo solo mirábamos la situación con gracia. Sael siempre fue bueno con los niños, pero no sabe explicarles ciertos temas sin ponerse nervioso y bueno, Rayla definitivamente es uno de esos temas que lo pone nervioso.